¿Eres parte de la solución?

¡¡¡GRACIAS!!! Creo que mostrar mi agradecimiento es la mejor forma de comenzar el artículo, ya que todo mi entorno familiar y social está bien, y la empresa en la que trabajo, Seidor, es lo suficientemente sólida como para que no haya tenido que recurrir a un ERTE debido a la pandemia. También estoy agradecido de ser parte del sector tecnológico que, una vez más, está siendo parte de la solución a muchos de los problemas terrenales, por mucho que el mercado se haya encargado de denominarlo soluciones en la nube 😊.

En concreto, quiero compartir con vosotros estas líneas, y simplemente dar mi punto de vista al respecto de lo importante que es "ser parte de la solución". Recurrentemente escuchamos, leemos y hasta nos obsesionamos con establecer un plan de #transformacióndigital y lo importante que es llevarlo a cabo a día de hoy, pero esto no es nada innovador, llevamos mucho tiempo conviviendo y mucho camino recorrido al respecto de esa transformación, hemos realizado y naturalizado cientos y cientos de procesos asociados a la #transformacióndigital desde hace años.

Por contar una anécdota, siendo el protagonista de la misma la persona a la que quizá más le gusta contar una, mi padre (Cipriano Barco, el de la foto). Él ya estaba inmerso en la transformación digital, sin ser consciente de ello, cuando trabajando en @Uralita en el departamento de logística tenía que enviar un correo electrónico desde #Outlook en lugar de hacer uso del correo postal, o como con la implantación de @SAP procesaba directamente los pedidos de tubos de saneamiento o de presión y le permitía resolver todos los trámites administrativos asociados a este proceso. Pero la parte anecdótica, divertida y admirable, fue cuando una vez prejubilado, en casa, frente al ordenador, comenzó su propio proceso de transformación digital (con su correspondiente proceso de gestión y adopción del cambio), él fue parte de la solución, él se interesó y se implicó para que fuera posible...procedo a escribir lo que podría ser una transcripción de una conversación real entre mi padre y yo hace ya muchos años, la cual se podría reproducir parcialmente también a día de hoy 😊.

Cipri: Entonces hijo…yo enciendo el ordenador, enciendo el monitor, pongo la contraseña, le doy al botón “Intro” y pincho en "la E azul" esa de siempre… ¿no?

Yo: eso es…dale al icono de Internet Explorer que está en la parte de "Inicio rápido".

Cipri: Muy bien, vamos a probar…

Yo: ¡Pincha en la "E azul" una vezzzzz! al pinchar dos veces se abren dos ventanas… (finalmente yo terminaba diciendo también “la E azul”… ☹). Cierra una de las dos ventanas…

Cipri: Vale, vale, entonces le doy a la “X” roja, ¿no?

Yo: ¡si, dale!

Cipri: vale, le doy…

Yo: ¡NO HAGAS DOBLE CLIC!, has cerrado las dos ventanas…(con el tono característico que usamos los hijos para para explicarle las cosas a nuestros padres…). Venga, da igual, pero dale un clic, uno, no dos, a la “E azul” y cuando se abra la ventana, pulsas en el botón que quieras de la barra de favoritos…

Cipri: ¡Hecho! ves…aprendo rápido. (risas) ¡jejeje!

Yo: (risas) ¡jajaja! ¡Estaba claro, a alguien he tenido que salir yo! Venga, muy bien, abre lo que quieras…este es para los Sudokus, este para ver los resultados de los deportes...de Nadal, del Madrid o de lo que quieras y este para entrar en la cuenta del banco.

Cipri: ahora entonces, por ejemplo, ¿si quiero ver los resultados de fútbol para comprobar la QUINIELA le doy al botón que pone Eurosport?

Yo: ¡Exacto! Fácil, sencillo y para toda la familia…(humor heredado del actor principal, qué le vamos a hacer… 😊, mis agradecimientos también a Kristian Pielhoff y a Iñigo Segurola).

Cipri: Hecho! (mientras estaba cargando la página, con la exigencia que caracteriza a todo usuario al respecto de los tiempos de respuesta…mi padre procedía a darle de nuevo al botón).

Yo: Papá...tienes que esperar a que cargue la página por completo, y no hace falta que cada vez que le des al botón pulses 7 CLIC SEGUIDOS…(volciendo al mismo tono de antes y añadiendo un poco de sarcasmo...).

Cipri: ¿entonces que hago?

Yo: Nada, esperar, pero pulsa el ratón una sola vez, por favor…

Cipri: ahora le doy a Fútbol…Primera división…Resultados…¡ya está! ¡Muchas gracias! (concluyendo de forma categórica con...)

”Hijo…, vete al salón y coge el recibo de la quiniela que está en el mueble…¡ANDA!”

Todavía hoy, ese “¡anda!” me traslada a ir a tirar la basura, a poner o quitar la mesa, a ir a por la sal, o traer el pan de la cocina, o agua fría de la nevera…pequeños traumas que también comparto con vosotros!!! Jejeje.

La “E azul” y el consumo del contenido publicado en internet no era el fin, sino el medio para poder aportar una solución en particular…en este caso, comprobar la quiniela sin hacer uso del teletexto…¡PUM...transformación digital!). El concepto de la “E azul” ha formado parte de conversaciones recurrentemente y generado buenos momentos de risas familiares, todavía lo comentamos a día de hoy y este texto será una razón más para hacerlo…indicaros que yo soy el pequeño de tres hermanos, y los tres somos informáticos ¡¡¡qué habrán hecho mis padres para merecer eso!!!

Después de muchos años, hoy...con 71 años, mi padre (además de seguir jugando al tenis 3 ó 4 veces a la semana durante 2 horas...¡¡¡QUÉ GRANDE ERES!!!) ha madurado en cuanto a su transformación digital (incluso contando únicamente con ese arduo y austero plan de adopción que yo mismo, junto con mis hermanos, le facilitamos a cuenta gotas en alguna, que no en todas, de las quedadas familiares…) y ha incorporado a su vida cotidiana más elementos que la innovación tecnológica pone a su disposición, ha enriquecido su listado de favoritos, usa el correo electrónico a nivel particular para, entre otras cosas, ser parte del motor que daba continuidad a esas cadenas de Power Point que pululaban en nuestras bandejas de entrada…hace uso de Google Maps, usa whatsapp de forma eficiente, utiliza el móvil como punto de acceso a internet haciendo uso de “Compartir Internet y zona Wi-Fi” cuando está en el pueblo y quiere utilizar el ordenador para hacer uso de la “E Azul” 😊, entre otras muchas cosas. En definitiva, él mismo ha sido capaz darle continuidad a ese proceso de transformación, aunque seguramente si le pregunto me diría…

”yo no entiendo de tecnología hijo…”

¡¡¡Para quitarse el sombrero Cipriano Barco!!!

El resumen de lo que os acabo de contar, no es que la tecnología sea la solución, sino que el uso adecuado de la tecnología, unido a la implicación de personas y/o empresas darán como resultado la obtención de soluciones a problemáticas en situaciones cotidianas, pero debemos ser capaces de avanzar en este sentido no únicamente a nivel individual, sino como colectivo, como comunidad, y conseguir que la suma de todos nos saque del socavón económico que estamos viviendo, el cual nos acompañará por un tiempo...

Cierto es que la tecnología ha evolucionado tanto, que ahora tenemos a nuestra disposición elementos muy complejos tecnológicamente hablando, pero enfocados a un consumo de forma sencilla en muchos casos...prácticamente todo se provee, facilita o suministra en formato…”como servicio”, y es ahí donde tenemos que seguir creciendo, en hacer grande, o a poder ser, increíblemente grande, el catálogo de soluciones como servicio proveemos al mercado, para que cada uno de nosotros o de las empresas para las que trabajamos continúen siendo esa pieza en movimiento de nuestro motor económico. Por ello, debemos devanarnos los sesos hoy (no es momento para la divagación…) y no sólo buscar, sino encontrar, de qué forma vamos a aportar valor para que nuestro tejido empresarial sea más eficiente y eficaz.

Se puede afirmar que la innovación tecnológica, es parte de la solución, según ya he indicado en uno de los párrafos anteriores, la tecnología no es el fin, sino el medio, y permite ayudar para dar solución en infinidad de casos, lo que podríamos denominar “soluciones para los problemas de las personas” (me gusta más que el concepto de “casos de éxito” 😊 que manejamos de forma habitual...). Debemos ser conscientes, y me atrevo a decir que como profesionales y como ciudadanos, estamos obligados a dar lo mejor de nosotros mismos, el contexto actual requiere que como empleados pensemos, aportemos, nos capacitemos, nos preocupemos y nos ocupemos como si la empresa fuera nuestra, porque es una realidad que las consecuencias de no hacerlo sí nos afectarán como si lo fuera, las empresas necesitan empleados con “alma” de director general, esa actitud es la que provoca las mejoras en los procesos de negocio de las compañías, ya sean propios o de aporte a los clientes y la que dará como fruto la identificación de alternativas de negocio disruptivas o la especialización llevada a su máximo nivel (aplicando a cualquier ámbito o sector de negocio) que tanto nos hace falta. Nosotros, las personas, también somos parte de la solución.

Por poner algunos ejemplos de cómo las personas han conjugado la tecnología con la resolución de un problema, en el sector sanitario podríamos hablar sobre cómo el análisis de imágenes mediante el uso de algoritmos de inteligencia artificial está ayudando a obtener mayor precisión en los diagnósticos o facilitar la detección temprana en algunas enfermedades, o cómo la impresión 3D hace posible que una persona pueda tener una prótesis en zonas desfavorecidas de nuestro planeta; o en el sector industrial, cómo alternativas mediante el uso de gafas de realidad mixta permiten que un operario en planta obtenga tutelaje en tiempo real por parte de un ingeniero especializado, que teletrabaja desde su casa, reduciendo los tiempo de resolución de incidencias de cara a la empresas y a los clientes finales y, permitiendo que la conciliación familiar pueda ser una realidad para ese ingeniero que antes pasaba la noche fuera de su casa. Por no dejar al sector primario sin ejemplos (podríamos hablar de cientos y cientos por sector…) citaría como el Agro 4.0 (agricultura y ganadería) está aportando soluciones de gestión eficiente del riego y fertilización, monitorización de cultivos mediante el uso de drones o sensores en fincas o animales…o como soluciones de análisis de datos enfocadas a la cadena de suministro de alimentos han reducido considerablemente el volumen de género desperdiciado, a día de hoy el volumen de alimentos que se queda por el camino o termina en la basura nuestros hogares, supermercados o restaurantes es una cifra disparatada e incluso hiriente, teniendo en cuenta los millones de personas que están en situación de desnutrición…

Como conclusión, únicamente os invito a reflexionar al respecto de lo importante que es ser parte de la solución, y en caso de serlo, si estáis en constante movimiento para que siga siendo así...porque como decía el anuncio de Renault…"o te mueves…o caducas".

¿os habéis preguntado si vosotros lo sois? ¿si lo son vuestras empresas?