No es cuestión de tiempo, si no de prioridades

No es cuestión de tiempo si no de prioridades

¿Cuántas veces te has escuchado decir “no puedo hacer esto porque no tengo tiempo?

Cuando metemos en nuestra cabeza esta idea, en realidad sólo estamos poniéndonos excusas. Todos tenemos las mismas horas al día, y sin embargo, hay personas que son capaces de hacer un millón de cosas que les gustan, y otras son incapaces. Por lo tanto, el problema no está en las horas que tiene el día ¿verdad? si no en la correcta gestión del tiempo.

«No tengo tiempo»

Cuando te escuchas diciendo esta frase, tienes que prestar atención del motivo real que hay detrás:

Puede ser que lo que te están proponiendo no te atrae demasiado, o resulta un esfuerzo importante para ti, y es más sencillo decir que no tienes tiempo que enfrentarte a la realidad: es más sencillo decir que no tienes tiempo, que ser honesta con esa persona y decirle que no te interesa, o ser honesta contigo misma decirte que te da miedo, o pereza enfrentarte a lo que te están proponiendo.

Otra causa puede ser que a pesar que es algo atractivo para ti, no eres capaz de encajarlo en tu vida porque las prioridades no las tienes claras.Muchas mujeres renuncian a hacer cosas que les gustaría porque se dedican del todo a las prioridades de sus hijos, o de sus parejas, o de sus trabajos… y al final ellas son las últimas de la cola, y jamás queda tiempo para ellas. ¿te suena?

¿Qué sucede si no tienes bien planificadas tus tareas diarias?

Cuando no tienes claro lo que es importante de verdad en tu vida, no eres capaz de gestionar correctamente tu tiempo, te cuesta organizar tu vida, es muy difícil hacer hueco en tu locura de agenda y por supuesto no queda tiempo para ti

Te voy a poner un ejemplo muy claro: imagina que una de las cosas que te has propuesto es hacer ejercicio, pero al final nunca encuentras el tiempo para hacerlo. Si yo te digo que te doy 100.000€ cada vez que vas al gimnasio…¿irías?

Posiblemente si ¿verdad? Y el tiempo que tienes y las tareas es el mismo… ¿qué es lo cambia? En ese caso tu cerebro tiene claro qué es prioritario, pues en este caso el dinero, es algo muy tangible y tu cerebro entiende los beneficios que te va a dar por encima de cualquier otra cosa.

Consejos para gestionar tu tiempo y organizar tus prioridades.

Para que puedas decidir de manera correcta, y dar prioridad a las cosas que realmente son importantes para tu vida y tu futuro necesitas:

1.- Primero saber qué es lo importante. Tanto a nivel personal como profesional, tienes que pararte a analizar cuáles son tus valores, tus objetivos en la vida, y fijarte unas metas claras que te ayuden a conseguirlos.

Por ejemplo, si quieres cuidar tu salud, porque para ti es importante, tienes que enviar un claro mensaje a tu cerebro de que el deporte te va a ayudar a tener salud.

Tienes que escribir una lista de los beneficios que te da el deporte, tan tangible como los beneficios de los 100.000€ que hablábamos antes. A nivel profesional nos pasa lo mismo, hacemos mil cosas en el trabajo, pero en realidad tareas que sean importantes hay pocas. Es importante todo aquello que te ayude a facturar o reducir gastos.

2.- Analiza todas las cosa que haces en tu día a día y clasifica por colores lo que es importante para ti, para tus hijos, tus trabajo… y suma el tiempo que dedicas a cada una de ellas… seguramente puedas hacer algo para que esté más equilibrado ¿verdad?

Identifica aquellas tareas que te llevan tiempo pero no son realmente importantes (cocinar, cosas de la casa, recados, fumar, tiempo al teléfono, atascos…) analiza y cuestiónate todo lo que haces y empieza a pensar qué cosas puedes cambiar o mejorar, que te ayuden a ahorrar tiempo.

3.-Decide dentro de tu lista de cosas importantes, por dónde vas a empezar, y reserva en tu agenda un día fijo a la semana para dedicarle tiempo a ello. Empieza solo con una cosa. Hasta que tengas el hábito.

4.- Protege ese espacio. NO caigas en las urgencias de otros, y si tienes la tentación de comerte ese espacio para otra cosa, recuerda esa lista de beneficios que has escrito, y recuerda porqué has elegido hacerlo.

Recuerda que si quieres tener éxito en la vida (y con éxito me refiero a hacer las cosas que te hacen feliz a ti), tienes que empezar a cambiar y llenar tu agenda de cosas importantes en vez de cosas urgentes.