¿Estás haciendo una entrevista laboral no adecuada? Te puede costar una mala contratación ... o perder una buena

Como lo he comentado en posts anteriores, los estudios demuestran que una entrevista estructurada (bien elaborada) constituye un predictor válido del desempeño del candidato. Y dado que en muchas ocasiones, las fases del proceso de selección requieren que los jefes/gerentes de nuestras áreas clientes también entrevisten a los candidatos, (inclusive como primer filtro o lo que es peor, son los únicos responsables del proceso de seleccionar) es IMPORTANTE, que ellos también estén entrenados para hacer una buena entrevista laboral, para que juntos se pueda evitar descartar un buen candidato o de lo contrario, aceptar uno que no era necesariamente el más adecuado.

Si haces lo siguiente, no estás haciendo uso efectivo de éste método de evaluación, por lo cual estás invirtiendo tiempo en vano y perdiendo dinero (por una mala contratación o dejando pasar un buen candidato):

1.      Tu entrevista no tiene orden/organización/confiabilidad

Necesitas un/a analista en tu equipo y debes entrevistar a María y Roberto, cuando entrevistaste a María le hiciste 15 preguntas, mientras que a Roberto, le hiciste 9 preguntas y la mitad de las preguntas fueron diferentes de las preguntas que hiciste a María.

Si esto te resulta familiar, entonces necesitas mejorar tu método de entrevistas!

Recuerda que buscas evaluar determinadas competencias (conocimientos, habilidades, actitudes) que son las que componen tu puesto vacante, por lo que no puedes preguntar cosas demasiado distintas a tus candidatos que participan para un mismo puesto. Si no, no habría confiabilidad en tu método de evaluación.

2.      Haces preguntas no relacionadas al puesto/no tienen validez/discriminan

Si haces preguntas como éstas, puedes convertirte en la anécdota que el candidato contará a amigos y familiares sobre su incómoda/graciosa entrevista laboral en tu empresa:

• ¿Quieres casarte? ¿Cuándo?
• ¿Cuándo planificas tener hijos?
• ¿Qué tan seguido te enfermas?
• ¿Cuál es tu religión?
• ¿Tu vivienda es alquilada o propia?

Además de ello, podrías dejar la impresión de que estas “filtrando” (discriminando) en base a sus características demográficas como edad, religión, estado civil, nivel socioeconómico, entre otros, lo cual trae consecuencias de impacto financiero y reputacional, pues existen leyes explícitas en contra de la discriminación en la oferta de empleo (Ley 26772 y Ley 27270) que establecen multas de tres unidades impositivas tributarias (mayor a S/.10,000).

3.      Hablas demasiado o permaneces en continuo silencio.

Recuerda que la entrevista es una interacción de ambas partes, el objetivo es conocer lo mejor posible al candidato, así que si te la pasas hablando y no dejando que el candidato responda lo que le preguntas, no vas a obtener la información que necesitas. Por otro lado, si permaneces en silencio, no le das feedback al candidato sobre si te quedaron claras o no sus respuestas. Lo mejor es encontrar un equilibrio entre ambos.

Si te sucede una de ellas o ambas, probablemente es porque no se te ocurre que preguntar, es justamente la falta de una entrevista estructurada.

Si quieres entrenarte o entrenar a los jefes/gerentes/supervisores y toda persona que esté involucrada en el proceso de entrevistar a candidatos, con el fin de disminuir el riesgo de una mala contratación o perder una buena, no dudes en contactarme.

Lucero Lamas – Consultora en Recursos Humanos y Selección

+51 969281893 / lulamasr@gmail.com