Esta ha sido mi experiencia con el método EOS desde 2018

¿Cuántas veces he estado involucrado en procesos de reorganización? Pues, en estos momentos la memoria me falla para contar con exactitud tales esfuerzos. Como director de agencia, es bastante común para mí realizar micro gestiones que cuando son vistas desde del plano general a finales de cada año, resultan ser nada más y nada menos que piezas pequeñas de un rompecabezas gigante que busca el reordenamiento efectivo de todo un conjunto de trabajo.

Dicha labor es tan abrumadora y compleja de ejecutar, que andar por sí sólo y sin ningún tipo de guía suele ser peligroso, una invitación a la pérdida total de argumentos, ruta y metas. Es por ello que decidí adentrarme un poco más en el mundo de los métodos aplicados al quehacer gerencial. Y luego de tantas horas de lectura, ensayos y errores, pude encontrar uno en específico que desató mi profundo interés de inmediato.

Nuestra CEO vino a mi con este método, que al principio consideré uno más del montón. Sin embargo, luego de leer los libros, no había duda de que es totalmente diferente, tanto que se convierte en un desafío cambiar la forma en que pensamos.

Llamado EOS (entrepreneurial operating system, que en español sería: sistema operativo de emprendimiento), dicho método está diseñado para involucrar en mayor medida todas las herramientas y disciplinas en torno a las metas de una organización. Usa los factores del espacio y tiempo para concretar objetivos, valores y actividades a seguir, todo con el fin de lograr resultados positivos sin comprometer los medios ya predispuestos.

Una adopción sin mayores contratiempos

El proceso resultó ser mucho más directo y estratégico de lo que pensé, para entender a ciencia cierta lo que se escondía detrás de tanto organigrama, decidí convocar una reunión de urgencia a puertas cerradas, y allí se juntaron varios miembros del equipo que normalmente trazan los lineamientos y planificaciones.

Una vez dentro, diversas ideas comenzaron a estallar, una nube de debates se posó por encima de nuestro mesón, y poco a poco comenzamos a entender la magnitud y sentido detrás del método que ya estábamos poniendo en práctica. Temas como el actual estado de la compañía, el entorno económico y financiero del país, las diferentes fotografías mentales de lo que sería nuestra agencia dentro de 3 a 10 años, y otros tantos tópicos que hicieron de la charla una anécdota que transcurrió por más de 2 días. ¿Te parece mucho tiempo?, suma todo los esfuerzos que realizas a lo largo de un año y te darás cuenta que esos 2 días ya no parecen tanto. Sin contar la falta de resultado al realizarlo fuera de un plan o método.

Sin notarlo con plena profundidad, el método EOS comenzaba a envolverme entre sus propuestas, detalles y argumentos. Me permitía comprobar con mayor visibilidad el grado de compromiso que tenía cada punto de vista, la posición firme de los mandos crecientes dentro de nuestra compañía, los diferentes targets de negocio, sin contar con lo esperanzador y crudo que puede ser debatir acerca de las fortalezas y debilidades concretas de nuestros talentos o posibilidades.

Estamos hablando de un nivel de honestidad laboral que te coloca directo y de frente con todas aquellas personas que piensan similar a ti, pero que también logra yuxtaponerte frente a aquellas mentes que difieren del pacto. Asunto que es verdaderamente positivo, al menos así lo percibo, y que nos ha permitido acercarnos a mejores aliados. Mientras que por otro lado nos ha concedido la oportunidad de descartar ciertas colaboraciones que no poseían un mayor potencial.

La ejecución y el motivo

A mediados de octubre de 2018, iniciamos la implementación del método EOS en todo nuestro entorno organizacional. Definimos eso que giraba alrededor de nuestra visión, datos, procesos, retos, personas, clientes, proyecciones y muchísimo más, un asunto que no se puede acordar de la noche a la mañana y que ya nos ha tomado varios meses en perfeccionar.

En base a todas estas maniobras, buscamos no sólo involucrar con acciones concretas a un mayor número de personas en nuestros objetivos, todo a través de la contratación selectiva y del entrenamiento del personal que ya está, sino también fortalecer nuestros valores como marca sin el uso de medidas aburridas y trasnochadas tales como correos electrónicos apresurados, pendones in-site y demás.

Vemos con buenos ojos la necesidad de un relanzamiento oportuno en nuestra estructura, con un enfoque tanto interno como externo. Sobre todo porque era el año del 10mo aniversario de nuestra agencia, desde aquel inicio de operaciones en 2009; fecha que se siente lejos pero a la vez tan cerca.

Pues no hay mejor forma de celebrarlo que con una aproximación totalmente distinta a los procesos, que nos provee de marcos mucho más profundos, innovadores y claros para trabajar, sin dejar de lado la importancia del monitoreo detrás de cada esfuerzo, que a su vez mejora nuestras relaciones de trabajo tomando en cuenta los distintos aspectos que conforman el entorno.

El tiempo nos dijo qué tan efectivos logramos ser, cuántos objetivos logramos cumplir y hasta qué punto seremos capaces de llegar a través de nuestras diferentes voluntades, siempre tomando en cuenta las funciones de cada integrante del equipo y entendiendo el lugar que debemos ocupar dentro de los parámetros del método que estamos ejecutando; tan sólo un paso a la vez.

Estamos ya por cerrar el año 2019, recorriendo un poco mas de 12 meses de haber implementado este método. Estamos lejos de haberlo hecho perfecto, pero si orgullosos de lograr los pilares necesarios para convertirlo en nuestro sistema organizacional. Es importante mencionar que detrás de cada esfuerzo, está la suma de un valioso equipo que aceptó el reto y se dispuso de la mejor manera a que funcionara, aunque esto implicara mas tiempo, mas esfuerzo y mas café para lograrlo. ¡Gracias familia de @Actiowsi!