'Etimología de la palabra empresa: retornando al origen'

En los últimos años, la palabra emprendedor/emprender ha cobrado fuerza en el espacio socio-económico mundial y la impresión es que nacen empresas a un ritmo nunca antes visto.

Es por ello que quizás sea el momento de pararse y profundizar en la etimología de la palabra Empresa y Empresario para así poder focalizar con mayor claridad y no perder de vista su razón de ser.  Su etimología castellana puede contribuir, con mucho, a mejorar el perfil de su definición.

La primacía del mundo anglosajón en todo lo referente al sector económico y empresarial es indudable  La consecuencia de este liderazgo cultural resulta ser un protagonismo anglosajón casi total en todo lo que se refiere a autores, ideas, planteamientos y perspectivas de lo concerniente a la empresa, tanto en elementos teóricos e ideológicos como en la práctica.

La palabra empresa tiene su raíz etimológica en el latín «prehendere», que significa «coger, alcanzar, atrapar». 

En el Diccionario de Uso del Español (Maria Moliner,1973) por emprender se entiende “empezar una cosa que implica trabajo o presenta dificultades”, por emprendedor la “persona que tiene iniciativa y decisión para emprender negocios o acometer empresas” y por empresa: “la cosa que se emprende o acción en la que hay trabajo o dificultad.

A modo de conclusión, no deja de resultar sugestivo, re-descubrir en la etimología castellana del término Empresa los valores e ideas que han configurado durante los últimos doscientos años la base de la cultura empresarial del mundo occidental.

¡Todos tenemos un potencial ilimitado!

Pero este potencial solo está disponible para aquellos que llevan su vida a un nuevo nivel de realización, significado y éxito personal. 

Jose Miguel Navarro

Responsable de Recursos Socio Laborales en @metodocronos