EULA y sus seis mandamientos

En la gaceta de El Sur del 16 de diciembre de 1990, nuestro Centro EULA, daba a conocer a la comunidad parte de su trabajo y del ambiente presente en sus jóvenes investigadores. Hoy queremos compartirles la publicación íntegra de hace casi 34 años, escrita por el destacado periodista regional Hugo Olea, en la que se aborda nuestra historia como Centro y la labor de monitoreo de la cuenca del Biobío.

Eulalia se llama una publicación interna medio en broma y medio en serio que editan los alumnos de doctorado del Centro Universitario Internacional Europa Latinoamérica de Investigación y Formación en Ciencias Ambientales, más conocido como EULA. Allí hay de todo, su poco de chismografía, incluso irreverencia. En alguna parte se habla de nuestro «santo Cutrona», en alusión al ingeniero italiano Aníbal Cutrona, uno de los capos del EULA. Claro. «Eulalia» es nada más que un paréntesis risueño de EULA. Lo fundamental es el estudio, la investigación, la docencia. Allí están siendo formados expertos a través de tres cursos: Adiestramiento Científico en Ciencias Ambientales (prepara doctores); Especialización Técnica en Mediciones Ambientales y un curso de Adiestramiento profesional en Análisis y Gestión del Ambiente. Claro, es una parte importante, pero de lo que queremos relatarle es como Eula se inserta en nuestra región y está punto menos que tomando una radiografía de ella para presentar, en 1992, lo que los especialistas llaman un «Plan de manejo» cuya finalidad es conseguir una utilización racional de los recursos existentes de todos. Cuando se habla de recursos alguien podría imaginar bosques, minerales, peces. Si están, pero la palabra va mucho más allá, comprende todo lo que aquí hay, aire, agua, vegetación, usted, ellos, nosotros. Así pues, el principal proyecto de investigación que el Centro Eula lleva adelante se titula «Gestión de los Recursos Hídricos de la Hoya Hidrográfica del Biobío y de la plataforma continental adyacente».