No Existen los Viejos Obesos...
Hace un tiempo, una amiga que sufría de obesidad, me contactó para que la ayudara a ordenarse en su estilo de vida y así poder bajar de peso y lograr un cuerpo armónico y saludable.
Entre los motivos que me mencionó cuando hablamos de por qué quería lograr esto, surgieron varios, como verse mejor, poder ponerse la ropa que a ella realmente le gusta, poder hacer los mínimos esfuerzos físicos sin fatigarse, y muchos otros del estilo.
Sin embargo cuando entramos más en profundidad en el tema, mi amiga me comentó la que evidentemente era su razón más importante de todas: poder llegar a vieja y ver a su hijo crecer. Y cuando le pregunté por qué tenía el miedo de no llegar a vieja, su respuesta fue contundente: “A cuántos viejos obesos conocés? Fijate en tu familia, tus amigos, en la calle…. en todos lados, vas a ver que no vas a encontrar ningún viejo obeso. Mueren todos antes”.
Me puse a pensar al respecto, y llegué a la conclusión que mi amiga tenía razón. Las personas obesas no llegan a la vejez. Mueren antes de algún tipo de enfermedad como la diabetes o enfermedades coronarias, o en el mejor de los casos, superaron la enfermedad y ya no son obesos.
Hace poco tiempo, otro amigo con obesidad que se encuentra actualmente realizando todo un plan de ejercicio físico y nutrición, cuando le pregunté sobre el tema, manifestó exactamente el mismo motivo como lo que lo movilizó para poder tomar acción y recuperar un cuerpo saludable y disminuir así drásticamente los riesgos en su salud.
Es evidente que la obesidad (y el sobrepeso también) es un problema en sí mismo que a su vez, implica incrementar en gran medida, los riesgos a contraer otros tipos de enfermedades que a su vez ponen en riesgo la vida. Claramente no se trata sólo de una cuestión de imagen sino principalmente se trata de un tema de salud.
El sobrepeso y la obesidad surgen usualmente (aquí dejo de lado los casos clínicos o genéticos) de llevar hábitos de mala alimentación, poco o nada de actividad física, mal descanso y estrés.
Lamentablemente, hoy la obesidad y el sobrepeso, son una epidemia a nivel mundial. Sólo en Estados Unidos, 1 de cada 3 personas sufre de sobrepeso. Se considera persona con sobrepeso a alguien que tiene un Índice de Masa Corporal entre 25 y 29.9. Cuando este índice es superior a 30, se considera que la persona sufre de obesidad. Cuando es superior a 40, la obesidad es mórbida.
Por esto, la única solución sustentable y consistente en el tiempo, es el cambio del estilo de vida. El cambio en los hábitos de alimentación, ejercicio físico y descanso, así como el manejo del estrés. Basta ver los cientos de casos de obesos sometidos a cirugías que han vuelto a engordar por no poder sostener un estilo de vida saludable, para darse cuenta de esto.
Pero para que este cambio sea posible, se requiere primero aceptar que se tiene un problema de sobrepeso (u obesidad), mirar el problema de frente, y luego (si uno no puede solo porque ya se cansó de intentarlo) buscar la ayuda correspondiente para poder hacer un plan de acción para cambiar el estilo de vida.
En conclusión, volviendo a los argumentos de mi amiga y mi amigo, si queremos llegar a la vejez de manera saludable y feliz, evitando enfermedades como la diabetes, los ACV, el cáncer o las enfermedades coronarias, o sobre todo, una muerte prematura, debemos tomar conciencia de la situación de nuestra salud de cara al futuro, y así buscar modificar el estilo de vida. Esta será la única manera de superar la obesidad y el sobrepeso.