Piedra natural, excelente opción para fachadas.

Evitar elevar costos a futuro, tener un bajo mantenimiento, alta durabilidad y fácil instalación son solo algunos aspectos a tener en cuenta al momento de seleccionar el material para fachadas; y es ahí donde vemos que los revestimientos en piedras naturales cumplen estos y más requerimientos, además que son hermosas, exclusivas, perduran en el tiempo, existe una gran variedad de colores, texturas, acabados y obedecen a la tendencia actual de construcción sostenible.

La piedra va bien en proyectos de todo tamaño, ya que hace juego y complemento perfecto para darle protagonismo a cada parte de la obra con un estilo muy estético y exclusivo. Los colores claros generen sensación de amplitud y luminosidad, se consideran colores para fachadas minimalistas, estéticas y elegantes; por otro lado, los colores oscuros suelen relacionarse con la sofisticación y la modernidad y ambos tonos dan un alto valor adicional a la propiedad. En www.meup.co reiteramos siempre que existen innumerables ideas y estilos que dependen de la personalización que cada persona desee otorgarle, teniendo en cuenta también aspectos como ubicación geográfica, tamaño, estilo, temperaturas y demás generalidades del proyecto.

Aspectos importantes para seleccionar tu piedra de fachada

Selección de la piedra: Sé cuidadoso al seleccionar la piedra natural que utilizarás en la fachada, pon atención a que la piedra sea duradera, resistente a los diferentes aspectos climáticos y que tenga el aspecto atractivo que quieres plasmar, considera también la forma y tamaño de la piedra para asegurar una instalación adecuada.

Diseño: Sé igual de cuidadoso al seleccionar la manera en que vas a incorporar la piedra natural. El diseño debe tomar en cuenta el tamaño y forma de las piedras, la colocación y la unión con otros materiales de construcción.

Preparación de la superficie: Ten muy en cuenta que la superficie donde se colocará la piedra natural debe estar limpia y libre de cualquier material que pueda impedir la adhesión de la piedra como polvo, grasas, arenas y demás.

Instalación: Es indispensable que la piedra natural sea instalada por un profesional experimentado. Esta fase debe ser cuidadosa para asegurar que cada piedra esté nivelada y bien unida a la superficie, así como es importante considerar la forma de la pared y los detalles arquitectónicos para asegurar que la piedra se ajuste adecuadamente.

Mantenimiento: Pon atención acá, pues la piedra natural requiere mantenimiento regular para mantener su aspecto y durabilidad, lo cual incluye la limpieza regular para evitar la acumulación de suciedad, generalmente solo con jabón de PH neutro y agua, así como la aplicación de selladores de superficie para prevenir la humedad y la corrosión una vez instalada y en periodos variables de acuerdo factores como la exposición y el clima.

 Ventajas de la piedra natural

Durabilidad: La piedra natural es un producto muy resistente y duradero, de forma que se convierte en un material de construcción muy valioso con el tiempo. Su apariencia se mantiene a lo largo de los años sin deterioro, ahorrando así costes de mantenimiento.

Reutilizable: Es, precisamente, la propiedad anterior la que confiere a la piedra esta característica y lo convierte en el material de construcción sostenible por excelencia, pues, su vida útil no tiene por qué terminar con la del edificio, sino que se puede reciclar y colocar en otra construcción.

Inercia térmica: Una de las características más destacadas, debido a su gran masa, es que posee una elevada inercia térmica, lo que lo convierte en un aislante natural que proporcionará un importante ahorro en calefacción y refrigeración, elevando de manera importante la eficiencia energética de la vivienda.

Aislamiento acústico: También debido a su gran masa, la piedra natural se convierte en un buen aislante para amortiguar los sonidos.

Versatilidad: Permite multitud de aplicaciones en todo tipo de proyectos, ya que se adapta tanto a interiores como exteriores y se puede instalar en la fachada, en paredes y en suelos.

Variedad estética: La piedra natural ofrece una amplia variedad de texturas y colores, lo que la hace perfecta para cualquier ambiente y espacio. Los tonos pueden ir desde los más claros hasta los más oscuros, y los acabados pueden ser pulidos, rústicos, naturales, etc. Además, tiene un punto de exclusividad, porque ninguna piedra es igual a otra. Cada piedra es única y atemporal, dotando a los proyectos de un aspecto noble e inimitable.

Integración arquitectónica: A nivel paisajístico, podemos conseguir que el tipo de proyecto se integre totalmente con el entorno.

Ignífuga: La piedra natural es totalmente ignífuga. Además de ofrecer una total seguridad contra incendios en fachadas exteriores, permite su utilización en aplicaciones para fuentes de calor al interior de la vivienda.

Genera valor agregado al proyecto: Al momento de instalar piedra natural en los revestimientos de un proyecto, este automáticamente incrementa su valor comercial, representando un excelente beneficio económico.

Y tú, ¿Qué piedra sueñas para tu proyecto?

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