FAUNA DE MORROCOY
6. FAUNA DE MORROCOY. Por Jairo Sánchez Hoyos.
¿Qué es la fauna? El conjunto de especies animales propias de una región o país referidos a un periodo de tiempo determinado. La fauna de Morrocoy fue variada y abundante, en tiempos de nuestros abuelos era un lugar favorito para la cacería, por eso llegaban cazadores de distintas partes. En este capítulo trataremos de recordar las especies que había y las que aún se ven en nuestro suelo
Conejo criollo. Es de origen europeo. Tiene un bonito aspecto con su cuerpo cubierto de pelaje espeso y lanudo, color pardo o gris, y blanco en el vientre. Esta forma de pelambre le permite camuflarse en el medio. Cabeza pequeña, ojos saltones, orejas largas, erectas. Los machos tienen la cabeza más ancha que su pareja. Existen cerca de ochenta variedades. Los dientes le crecen sin cesar, por eso debe constantemente desgastarlos con el fin de evitar que se vuelvan demasiado largos. Lo veía en Morrocoy de manera abundante, los cazaba a pocos metros de la casa. Vivian en matorrales, ahí mismo hacían sus camadas para el alumbramiento. También se refugiaban en pequeñas cuevas. Cuando me iba de Sahagún para Morrocoy me los encontraba merodeando en el camino a eso de las 6:00 pm. Se alimenta desde el crepúsculo hasta el amanecer. De día se la mantiene en su cama o madriguera. Cuando estaba frente a un perro, se quedaba inmóvil, sin pestañear para despistarlo, pero que va, el perro no mordía la treta, entonces el pobre salía a mil por hora. El conejo tiene la particularidad de comerse las heces recientes porque son ricas en proteínas y celulosa, este acto se llama cecotrofia. De esta manera le da un segundo tránsito digestivo al alimento, por esto no debemos clasificarlo como rumiante, aunque lo veamos mucho tiempo moviendo la mandíbula como lo hacen los verdaderos rumiantes que regurgitan el alimento. El conejo se alimenta de arroz, maíz, yuca, ñame, zanahoria, pasto, corteza, raíces y bulbos. Las hembras estan listas para la procreación a los 5 meses de edad, por lo general paren cuatro gazapos o crías. La gestación demora un mes. Puede tener varias camadas al año, por esto es una especie prolija. En Australia no lo había y llevaron unas cuantas parejas que al poco tiempo se constituyó en un grave problema debido a que mermaban los pastizales. El número se elevó 600 millones, tuvieron que inducir un virus para que los eliminara, pero a decir verdad, esto resultó al principio, después volvieron a aumentar. Un conejo en circunstancias especiales puede vivir hasta 10 años, pero en nuestro medio no supera los dos años debido a la caza y destrucción masiva del hábitat.
La zorra chuchaca, abunda en la región. Los campesinos la matan porque merma la población en aves de corral. Esta de la foto va parida, en la bolsa transporta las crías. Es propia de América y del sudeste de África. En otras partes algunos campesinos se la comen, su carne es tierna y coge buena sazón. Se alimenta de maíz tierno y de aves. A esta especie se le conoce también como zorra pelá o zarigüeya. Pertenece a los marsupiales, por eso carga sus crías en una bolsa que posee a la altura del vientre. En Morrocoy también existía la zorra baya y la patona.
Mico tití, especie única de América. Abundaba en la montaña de don Andrés Catalino. Son muy graciosos y territoriales, de fácil adaptación en cautiverio. La deforestación y la captura para venderlos en Barranquilla lo extinguieron. No solo en la zona, sino en las sabanas de Córdoba. Los pocos que existen están de mascotas traídos de otros partes. Se supone que hay unos 7000 en toda Colombia. En Santa Catalina, Bolívar hay una reserva a cargo de Rosamina Guillén, dedicada al cuidado de los pocos que existen allí, que llegan a unos trescientos, entre Bolívar y Atlántico.
Guartinaja. Natural de Suramérica, se le conoce con diferentes nombres, según la región. Así tenemos: guagua, tinajo, paca, guanta, guagú molón, goruga, boruga, majaz, marioxys|, picuro, conejo manchado o lapa. Es uno de los roedores de mayor tamaño que existen en el mundo. Su carne es deliciosa, dicen que tiene cinco sabores distintos. Su periodo de gestación dura cinco meses. Se aparean de noche. La hembra es un poco más alta que el macho y es quien debe procurar su comida y la de las crías porque él se parta apenas la embaraza. La hembra suele tener tres crías en un solo embarazo. No tienen temporada exacta para procrear, lo hacen en cualquier periodo del año. Se alimentan de tubérculos, semillas y corozos nuestros campesinos las mataban porque le hacían daño a las cosechas de yuca. Durante el día se la mantienen en la madriguera, salen a comer durante la noche. Logran reproducirse en cautiverio. Ya se extinguieron en Morrocoy y en Sahagún, debido a que se aniquiló su hábitat.
Venado. El macho es el único que posee cornamenta, la muda cada año. Su carne es deliciosa, más seca que la del cerdo y res, por eso no tiene colesterol; coge bien los condimentos. La hembra pare una cría por parto. El periodo de gestación es de casi siete meses. Las hembras viven en manadas, resguardadas por un macho vigilante. Las crías nacen con manchas en el lomo, desde el mismo instante de nacida saben cómo camuflarse entre el pasto. Tienen una existencia de 10 a 20 años. Se crían en cautiverio sin inconveniente alguno. Se alimentan de pasto, frutillos y hojas tiernas de ciertas plantas. En Morrocoy hace rato se extinguió esta especie. Viven en todas las regiones del mundo, menos en Australia la Antártida. Pueden girar las orejas en diferentes direcciones. Mudan el pelo durante el verano. Las manchas de las crías desaparecen a los 4 meses de edad. Las crías no tienen olor para evitar ser detectadas por los predadores. El venado se alimenta únicamente de vegetales, el estómago tiene cuatro cavidades. Nadan muy bien; las pezuñas son filosas, debemos tenerlo en cuenta para no salir herido cuando lo manipulemos.
Perezoso, es una especie endémica de Centro y Suramérica, es pariente del oso hormiguero y del armadillo. Los hay con dos y tres dedos. No tienen orejas, pero si oídos. Los perezosos de dos dedos pueden durar hasta veinte años y los de tres duran más. Los de dos dedos son nocturnos y los de tres son diurnos. Comen todo tipo de vegetales, pero lo principal son las hojas y cogollo del yarumo o guarumo. Su metabolismo es lento. Algunas veces solo tienen coito una vez en la vida y la cópula puede durar 20 horas porque suelen dormirse sobre la pareja. La gestación de los perezosos dura casi un año, aclarando que la especie de dos dedos apenas llega a los seis meses. A los nueve meses la madre se descarga de su cría. Tienen una sola cría por parto, la que sube al lomo de su madre apenas nace. Los perezosos pasan casi todo el día durmiendo, apenas se despiertan para comer. El agua la adquieren de los vegetales que come, aunque algunas veces se le ve tomar agua de los arroyos. Nada muy bien y soporta estoicamente el hambre y la sed. El gato y él, son muy discretos al hacer sus deposiciones, pues el gato la tapa y el perezoso defeca cuando está lloviendo para disimular el ruido de la caca al caer. Es bastante miope, pero su cabeza casi hace un giro completo. Tenemos que decir que también el sentido del olfato y oído son muy pobres. En Morrocoy es una especie en riesgo porque capturan sus crías y están destruyendo su hábitat.
Armadillo. También conocido como jerrejerre, quirquincho, tatú, peludo, mulita, cusucu, pitero, toche, pirca, piche, gurre, cachicamo. Natural de Colombia y Venezuela. Algunos llegan a pesar hasta 18 libras. Se alimentan de hormigas, insectos, lombrices, gusanos arañas, mariposas, caracoles, ratones, lagartijas, huevos, frutas, hongos y tubérculos. Es un hermoso ser que muestra las curiosidades de la naturaleza; parece blindado. El consumo de su exquisita carne y la destrucción de su medio ambiente casi acabaron con su presencia en los suelos morrocoyeros, por suerte se ve uno que otro rastro de ellos, pero muy escasamente. Vive en los matorrales, dentro de cavernas. Su carne no tiene grasa ni colesterol malo.
Ardilla. Es nativa de América, las hay con distinto pelambre. Durante el invierno el pelaje es rojo y en el verano cambia a casi anaranjado. Es inquieta, veloz, precavida y desconfiada. Permanece encima de los árboles. Cuando va a comer se sienta y manipula el alimento con las dos manitas. Come frutos y semillas. Construye los nidos en las horquetas de los árboles altos y con frutos. No es una especie gregaria, son diurnas y muy activas. Cuando la hembra entra en celo, es acosada hasta por 8 machos y uno de ellos es quien la monta. Sacan dos crías por año. A propósito, el año pasado, 2015, en La Padilla, el político y terrateniente Álvaro Aldana cedió más de 100 hectáreas de tierra en rastrojos a dos o tres amigos campesinos para que la sembraran de arroz y maíz a cambio de que le sembraran el pasto, hasta aquí, todo bien, mi lamento es que murieron más de 200 ardillas envenenadas por los dueños de los cultivos.
Machín. Originario de América Central. Llamado también Mono carablanca, mono maicero, capuchino, tanque. Es de tamaño mediano, cuerpo negro, cara rosada, pelo blanco en la frente. Se alimenta de frutas, pulpa, jugos de frutas y palmas, flores, hojas, retoños, e invertebrados como garrapatas, arañas, saltamontes, escarabajos, larvas, lagartijas, huevos, sapos, aves, cangrejos, moluscos. Beben agua de las oquedades de los árboles y en los arroyos. Son muy sociables, familiares, protectores y recursivos. Cuentan con habilidades motoras como la de caminar en dos patas, correr, saltar, galopar, trepar y brincar. Gustan de acicalarse mutuamente y en grupo. Duermen principalmente en árboles altos y sitios con gran densidad de forraje. Manuela Pérez y El Cachaco Jesús León lo comercializaban en la región para llevarlo a Barranquilla. En Morrocoy se extinguió por completo, los pocos que vemos en cautiverio son traídos de otros puntos del departamento.
Iguana. Originaria de Centro y Suramérica. Desde los 16 meses ya está lista para la sexualidad, pero alcanza su adultez a los 36 meses. Deposita sus huevos dentro de cavernas que hace en lomas de tierra suave o suelta. Desde hace tiempo se captura en la época del desove para consumir sus huevos que después de cocidos se atan en colgarejas que se ponen al sol, en donde se tornan dorados. Lo malo de esto es que al animalito se le extraen los huevos a través de una operación, luego de la cual no se le cose, sino que se rellena con hojas secas y el pobrecito muere unas horas después. En estos tiempos hay un control estricto por parte de las autoridades para evitar su desaparición. Tienen cinco dedos en cada pata, terminadas en afiladas garras. Su cola es usada para defenderse de los perros y el hombre. Su periodo de celo es de dos meses, entrando diciembre y enero. Los huevos eclosionan 70 días una vez depositados. Como son de sangre fría se les ve en las copas de los árboles atrapando el sol. Son gregarias, por eso es común ver varios ejemplares encima de un mismo árbol. En Morrocoy, su árbol preferido era el “jobo” del cual consumían los cogollos. Al verse amenazadas se tiraban al arroyo donde podían sumergirse hasta por 15 minutos. La iguana no duerme de día. Se alimentan de flores, hojas tallos y frutos. En estado libre y salvaje dura de diez a 15 años. En muchos puntos de Colombia consumen su carne, por lo que constituye un exquisito plato de lujo en las pensiones o fondas. En Montería las personas aprendieron a respetarla, por eso se les ve en los patios, parques, clínicas y avenidas. El macho es enorme, con crestas grandes y un repliegue debajo de la barbilla; le llamamos capó.
Cada colgarejas de estas es una iguana sacrificada.
Oso hormiguero. Originario de Centro y Suramérica. Pueden llegar a pesar más de treinta kilos. Trepan a los árboles y les encanta alimentarse de hormigas. Realiza su actividad durante el día. El pelaje es áspero, color gris, con una banda diagonal oscura que le sube por los hombros. Posee garras largas, curvas y fuertes, las que utiliza para desgarrar los nidos de termitas. El rabo es seco y prensil. Suele vivir unos 15 años. En Morrocoy está como especie en riesgo, su población ha mermado bastante.
Marta. Especie salvaje carnívora. En Morrocoy la encontrábamos muy seguido en los huecos de los árboles en los rastrojos altos. Por rato se llegaba hasta las casa en busca de comida, se alimentan de pájaros, pollos, murciélagos, ratones. Es curioso como coge un huevo de gallina y lo sorbe sosteniéndolo entre las manos, no sin antes haberle hecho un orificio con el diente. Tiene enormes ojos negros. Orejas de mono hocico y pequeño, cabeza redonda. Su pelambre es fino, parece de peluche, color marrón claro. Tiene una cola tupida que le sirve de balancín cuando salta de rama en rama. Las extremidades terminan en dedos, con fuertes garras. Desde pequeño oía decir que una marta era capaz de escapar encerrada en un baúl. Parece un animalito lento, pero es rápido y certero. Marca su territorio con la orina, la caca y el almizcle y lo hacen tanto hembras como machos. No son gregarios, la pareja se desplaza por separado y solo se unen lo que dura el coito, tiempo en que aseguran la reproducción y continúan su camino. Pueden vivir hasta 15 años. Tienen varios refugios en los huecos de los árboles. En Morrocoy esta especie está casi extinguida, es muy raro oír que decir que fulano vio un ejemplar.
El mono aullador. Los veía en la montaña de Andrés Catalino y en la de Miguel Gómez. También lo veía de vez en cuando en la orilla del arroyo Castañal. Hoy están muy escasos debido a la caza indiscriminada y a la destrucción del monte alto para dar paso a los potreros. En la pequeña reserva forestal del pozo La Peña veo unos cuantos ejemplares. Es el más grande y fuerte de los monos de América. Acostumbran a cantar por las mañanas, más que todo en el verano, las personas decían que estaban pidiendo la lluvia. Es un canto masivo, se escucha a una legua de distancia como una horda pidiendo gol. Su pelambre es abundante, pelos largos, color rojo, más claro en el lomo. Los adultos tienen una barba negra. Su alimento preferido era el árbol de guarumo, caracolí y caimito. Son gregarios, acostumbran andar en grupos de hasta 10 miembros. Tiene un jefe, el macho más viejo, el único que se aparea. Este macho puede separarse del grupo para formar nueva tropa con hembras más jóvenes, es reemplazado por otro adulto. Cuando esto sucede acontece una tragedia porque el nuevo líder sacrifica la especie bebé para que las hembras queden receptivas y él pueda imponer su linaje. Tienen la costumbre de defecar todos al mismo tiempo en el lugar donde diga el líder, quien es el primero en hacerlo. Esto lo hacen para no ensuciar las hojas que son su alimento. También tienden a defenderse del hombre tirándole caca. La hembra pare un solo monito. No tienen época fija para la reproducción. La hembra que parió este año puede demorar dos años en volverlo hace. Su alimentación está basada en hojas, raices, bulbos, brotes, flores, frutas, insectos, pájaros y arañas.
El cerdo. Es un cuadrúpedo ungulado porque sus cuatro patas terminan en pezuñas. En estado salvaje se le llama jabalí. Los caninos de los cerdos crecen bastantes, en el monte mucho más. El cerdo es muy inteligente, buen amigo, fiel y juguetón cuando está pequeño. Es capaz de recordar direcciones y el nombre que le dieron cuando estaba siendo criado. Sabe ubicar su alimento en casos de apuros. La hembra cuando está por dar a luz, se separa del grupo y se va a la orilla del arroyo a tener sus crías. Unos días después el dueño la trae con los críos por delante. La cría se llama lechón o chanchito. La manada se llama piara. Algunas hembras dan a luz hasta quince marranitos, pero el promedio es 8- 10. La gestación dura unos cuatro meses y el destete cuatro semanas. A las hembras se les considera adulta desde los 6 meses. Es de fácil crecimiento y desarrollo, esto ayudó mucho a su domesticación. Se sabe de cerdos que han pesado 150 kilos. Se conoce diversas razas de cerdo. El macho procreador se le llama verraco, pero en la región decimos barraco. Los cerdos pelean entre sí por lograse el favor de las hembras. El pelambre del cerdo se llama cerda y es empleado en la fabricación de cepillos. Del cerdo no se desperdicia nada, porque hasta la caca es utilizada para abono y alimento de peces. Como no tienen glándulas sudoríparas, no pueden sudar, por eso se les ve en lugares húmedos y en charcos lodosos. El cerdo puede ser gregario cuando le interesa, pero es capaz de subsistir de manera independiente. Come todo lo que sea digerible. Anteriormente en Morrocoy se alimentaban con corozo, chopo, auyama, yuca y básicamente maíz. Hoy se emplea mucho el concentrado. Es originario de Eurasia, los hay de diferentes especies. En la sede del ICA, departamento de Córdoba, se logró una especie criolla llamada “Zunga” sin pelambre alguno, color negro, resistente al trópico y de gran peso con poco volumen de tocino, pero desconozco el motivo por el que lo sacaran del mercado después de haber tenido buena acogida. En general el cerdo vive de 10 a 15 años.
Saíno. Conocido con otros nombres según la región como: Coyamel, Taitetú, Sajino, Coche de Monte, Chancho Rosillo, Báquiro, Chácharo. Aunque parece un puerco, no es el puerco de monte conque a veces lo confunden. El saíno es más pequeño y menos robusto, con pelaje más corto, color gris oscuro. Aunque si es más pesado que el ñeque. Tiene una raya blanca en el cuello, junto a los hombros, que parece hecha con tiza. Tiene una glándula secretora de almizcle cerca de la cola. Cuando las crías están amantando tienen un pelambre distinto al de los padres, chocolate amarillento, con una raya negra a lo largo del lomo. El macho es más activo de noche, le encanta hozar la tierra en busca de alimento. Es agresivo cuando se le provoca. Es de vida gregaria se le ve en grupo de hasta 12 miembros. Algunas veces logra domesticarse cuando ha sido capturado jovencito. Come yuca ñame, chopo, manzano, guineo, pepino, naranja, raices, cogollos, arroz y maíz. No tiene fecha exacta para aparearse, lo hace en cualquier parte del año. El tiempo de gestación demora tres meses, pare una o dos crías. Los recién nacidos son vivarachos, juguetean y corren a las pocas horas de haber venido al mundo. En Morrocoy ya no existen en estado salvaje. Uno que otro se ve en cautiverio traído de otra parte.
El ñeque. Es uno de los roedores más grandes de América, junto con el saíno y el ponche. Recibe distintos nombres según la región donde se encuentre, como Agutí, Alazán, Guaqueque, Sereque Cotuza, Guatuza, Guatín, Jochi Colorado, Añuje, Picure, Cherenga. Su cuerpo es robusto, ágil, elástico, con un pelaje color chocolate, brillante, parece que lo lustraran con aceite de coco. Los pelos son largos, gruesos y duros. En la parte de abajo del lomo y ancas la coloración es castaño. Orejas cortas y patas largas, delgadas y firmes, dispuestas para la carrera, terminadas las delanteras en dos dedos y las traseras en cuatro, con pezuñas. Durante el día permanece encuevado, pero de noche sale a buscar pareja y alimentarse. Come sentado, si quiere, sosteniendo el pedazo de yuca con las dos manos. Come yuca, ñame, hojas, brotes, semillas y raices. El periodo de gestación demora tres meses al cabo de los cuales da a luz una o dos crías. En Morrocoy se encuentran poquitos en estado silvestre. Los campesinos los perseguían porque se les comían el cultivo de yuca.
El carnero. Es una especie rumiante, tenida como ganado. Es de tamaño pequeño, ojos grandes, redondos y saltones. Sus patas terminan en pezuñas. Su carne es de buen sabor, pero debe saberse sazonar y cocinar. De su leche también se hacen quesos.
El perro. Algunos científicos afirman que es tal vez el primer animal domesticado y que tienen un antepasado común en el pequeño lobo del sudeste asiático. Todos los perros están emparentados con los lobos, los zorros y los chacales. Es el animal más conocido de los seres de la naturaleza, es muy amigo de su amo. Sumamente inteligente y fácil de aprender y acomodarse a cualquier ambiente. Su sentido del oído y olfato es altamente desarrollado. Existen muchas razas de perro, el hombre ha cruzado cientos de razas, así que hay suficiente para escoger según tus necesidades, puede ser para cacería, compañía, guía, detección de sustancias o rescate. Se estiman unas 800 y unos 500 millones de perros en el globo. Los perros defienden su territorio, los marca orinando los límites. Los perros domésticos no sólo sirven de compañía, muchos trabajando duro, cuidan rebaños, ayudan a los cazadores, guardan viviendas y realizan tareas policiales y de rescate. Incluso algunos de ellos, especialmente entrenados, sirven de guía a los invidentes; un conmovedor símbolo del antiguo papel del perro como el mejor amigo del hombre.
El gato. Originario de Egipto. Cuando es adulto del todo la mayoría de sus respuestas son felinas. Hay registros de gatos salvajes de 9.000 años atrás y hay registros de 3.500 años del gato domesticado. En Egipto había culto a los gatos. Los gatos si pueden ver los colores, aunque de manera muy rudimentaria. Los bigotes del gato le sirven para cazar de noche porque funcionan como sensores. También le sirven para calcular si puede pasar por una abertura determinada. Los gatos predicen los terremotos, parece que detectan a tiempo los dramáticos cambios de la estática. El gato tiene un promedio de 9 a 12 años de vida. Los gatos tienen el reflejo de enderezamiento, es cuando se cae y siempre cae de pie. Sucede porque la cabeza gira hasta mirar el suelo, luego gira el lomo y después las patas traseras. El pene del gato tiene una especie de ganchos que cuando copula con la hembra ésta lanza unos desgarradores gritos cuando el gato termina, es que los ganchos le desgarran brutalmente la vagina cuando el macho intenta sacar el pene.
El burro. Para ir y volver del monte, buscar la leña, arriar el agua y visitar a los compadres. El burro pertenece a la familia del caballo, siendo pariente del tapir y del rinoceronte. Es pacífico, noble y rudo, tiene bien desarrollado el sentido del olfato y la vista, con la propiedad de saberse ubicar por zonas en donde mucho tiempo atrás le tocó transitar. Puede supera los 60 años de vida, además de que resiste las enfermedades, heridas, lesiones y altas temperaturas, capaz de transitar por los senderos más difíciles. No requiere ser bañado para soltarlo a pastar. Al cruzar esta especie con yegua se obtiene un hibrido llamado mulo o mula. También se cruzan burras con caballos, el resultado es un híbrido de nombre burdégano. De igual manera se cruza el burro con la cebra, el resultado es un cebrasno o ceburro. En francés se dice: donzébre. El burro que monta las yeguas se llama burro cho, padrote o garañón, es más corpulento que los demás. El origen del burro está en el norte de África. Cuando se cruza una burra con un caballo se obtiene un burdégano.
El mulo. Tanto el mulo como la mula salen del cruzamiento entre una yegua y un burro. Cuando se cruza la burra con el caballo nace un híbrido llamado burdégano. Tanto las mulas como los burdéganos son estériles. De hecho, en el mundo se conocen tres casos de mulas que han logrado dar a luz, uno en Colombia, otro en España y el tercero en Bután.
Burdégano. Criadero Villa Luz. Las mulas y mulos son animales criados para el trabajo pesado y de resistencia. Sus cascos son más resistentes que los del caballo. Además son más resistentes a las enfermedades. Las mulas son capaces de patear con cualquiera de sus patas, en la dirección que sea. Recordemos que el burdégano es una mula (o), pero es más alto(a) que la mula que sale del burro con yegua, porque viene de un caballo, además es más dúctil, manejable, paserito, de movimientos más elegantes y se cansa menos. De hecho, es más difícil de criar. Se parece más a un caballo con orejas largas que a un burro. Los cascos del burdégano se parecen más a los del burro, mientras que los de la mula a los caballos.
El caballo. En estos momentos en Morrocoy ha quedado apenas para encerrar el ganado y hacer las visitas a los vecinos en época de invierno en que se pierden los caminos para el tránsito de los vehículos de dos ruedas. Pero antes era un importante medio de transporte. El primer caballo tiene unos 55 millones de años de antigüedad, fue el Eohippus equino cuyo fósil fue encontrado en Norteamérica en el 1867. Se supone que de él descienden todos los équidos. Los primeros caballos eran del porte de un perro. La evolución les aumentó de tamaño. Estudiosos del tema afirman que hace 15.000 años el género llamado Equus se regó desde…
América hasta Eurasia y África. Después de esto el caballo se extinguió en Norteamérica debido a los glaciares.
Hay registros de que en el neolítico ya el hombre lo había domesticado. El caballo fue introducido a Colombia durante el descubrimiento y conquista. La altura de un caballo se toma desde el suelo hasta la cruz, o sea el punto donde se une el cuello con el lomo. Hay tres grupos de caballos que son: pesados o de tiro; ligeros o de silla; ponis y razas más chicas que los poni. El caballo influyó mucho en el sometimiento de nuestros indigenas, pues creían que jinete y animal era un mismo ser. Además ha estado presente en las hazañas de grandes y poderoso hombres como Atila, Alejandro, Napoleón y Bolívar, entre otros. El caballo es uno de los animales más esbeltos de la tierra y se apega a su amo. Hoy en día, en Morrocoy, hay caballos que valen más de cien millones de pesos, cuyos propietarios no son morrocoyeros, sino que poseen grandes haciendas ahí en Morrocoy. Estos criadores organizan cabalgatas y ferias equinas para divertirse y exhibir sus hermosos ejemplares.
El búfalo. En el corregimiento ya hace presencia el búfalo como fuente productor de leche, y carne. En Colombia existe un marcado interés por incrementar esta especie. Hasta el momento la Asociación de criadores ha introducido tres importantes razas como son la murrah, la mediterránea y la bufalypso. La leche de este animal es más cremosa que la de la vaca, por eso cuesta más. Aunque a decir verdad, en Morrocoy no es fácil la explotación del búfalo debido a que requiere muchos espejos de aguay espacio libre. Hay comentarios críticos que dicen que desertifica los terrenos, por lo que ya algunos ricos han salido de ellos.
La vaca. Fue traída a Colombia por el conquistador Pedro de Heredia. Es un cuadrúpedo de cuerpo pesado, vientre voluminoso y buen productor de carne y leche. En Morrocoy utilizábamos la caca para cercar las casas. Esta caca húmeda se revolví uniformemente con arena y la fijábamos en la pared de caña lata o caña guadua, con ayuda de la palma de la mano. Después se le pasaba un palaustre y quedaba plana, lisa. Pero la mayoría de las veces la dejábamos así, a lo burdo, con los dedos de la mano dibujados en ella, porque no era fácil conseguir el palaustre. El macho de la vaca es el toro y la cría se llama ternero o becerro. Cuando el ternero está de año o año y cuarto, se castra y se llama novillo. Cuando se quieren dejar para bueyes se escogen los más corpulentos, se castran, se amarra el uno al otro por un buen tiempo, hasta que hayan aprendido a coordinar los movimientos en equipo. En mi época veía bueyes aperados, en el cual viajaba uno que otro vaquero llevando el ganado a la ciénaga. O sino en el buey iba la comida en jolones. Hoy por hoy el ganado vacuno es el principal renglón de la economía de la región de Morrocoy. De hecho, es el ganado quien más bota gas carbónico contribuyendo al recalentamiento del globo. En Morrocoy hay muchas fincas y parcelas dedicadas a la lechería.
TRASHUMANCIA DEL GANADO. Desde los años de 1.700 Morrocoy fue una de las vías preferida por los hacendados de Corozal, Chinú, Heredia, Sahagún y Trementino, para enviar el ganado en la época de verano a la ciénaga de Caimito, San Marco, Viloria, El Mamón, Las Flores y Cecilia. Desde el mes de diciembre empezaban a verse cruzar los grandes “viajes de ganado” Era bonito, alegre y hasta riesgoso el cruce de tantas reses por el poblado. Esto lo hacían porque en la ciénaga abundaban los pastos dado el fresco de los cuerpos de agua. Se oía desde lejos el murmullo de los cascos, sobre la ruta peñosa, el bramido del ganado y los gritos de los vaqueros. Cuando las reses eran bravas, delante venía el capataz gritando: “Cierren las puertas, que viene ganao bravo” Pasaban a veces de prisa, los jinetes pendientes de que los toros o novillos no se metieran a las casas. Por lo menos, la nuestra que estaba en la orilla de la quebrada siempre fue invadida por las moles bravas y nerviosas que nos hacían esconder dentro del pañol. Pasaba el ruido y la polvareda continuaba por unos instantes opacando el ambiente oloroso a boñiga, orines y sudores. Todos los vaqueros regresaban, menos uno o dos, quienes se quedaban para contar el ganado mañana y tarde. Como eran espacios comunales, había que estar pendiente de que no se perdiera una res. Cuando llegaba la época invernal los pastizales se inundaban, de nuevo tocaba trasladar el ganado a tierras altas para que el agua no les enfermara los cascos. Ya el ganado no podía alimentarse bien debido a que el pasto estaba enfangado o ahogado. Desde el 8 de abril empezaba a verse el retorno; los que pasaron flacos, volvían gordos, las preñadas, regresaban paridas. “Ganancia para el blanco”. Hay cuentos sobre ganaderos que se volvieron más ricos debido a que cuando iban arrastraban cuanta res encontraran en el camino y cuando se venían, ocurría lo mismo. Me acuerdo la vez que quise ser ganadero, año de 1978, tenía ya unas doce reses en compañía de Ariel Rivera Díaz, las mandó éste para la ciénaga, junto con el ganado de su papá. Todas volvieron, menos las doce.
José María Bula, el nuevo.
Viajes famosos fueron los de la China Bula, los de don Lorenzo y Germán Bula Reino y los de José María Bula, el rey de los viajes. La cabeza del viaje estaba pasando el arroyo grande de Morrocoy y todavía la cola venía por el arroyo El Tigre. Se calcula que tuvo unas 10.000 reses. Fue dueño de fincas afamadas como Platanal, La Popa, Mata Corozo, El Destierro, El Caucho, Los Reyes, El Alivio, Canta Rana, Viloria, entre otras. Era un señor entre los señores, le regalaba leche a todo Trementino, los chicos iban cada mañana a buscarla y hasta desayuno recibían. Los más agradecidos reconocían estas bondades y en vista de ello se ponían a asear los chiqueros. Don José María Bula se reía cuando pedía que le “estusaran” los chiqueros, pero los unos se hacían “el oreja sorda” y los otros asumían cualquier compromiso urgente en casa. “Carajo, que gente tan agradecida”, exclamaba, y continuaba en su faena diaria.
El ganado hacía jornada en La Padilla, finca de Lao Sánchez.
La gallina. Provienen del Sudeste asiático. Aunque hay autores que señalan que también se originaron en el mediterráneo, luego aceptan dos especies, la asiática y la mediterránea. Las asiáticas ponen huevos de color pardo, la mediterránea, color blanco marfil.
Pero no olvidemos que en América hay una tercera raza y sería la ARAUCANA, originaria del Sur de Chile, conocida como Mapuche, porque eran criadas por los indígenas Mapuches, esta especie proviene de la unión de dos sub razas, la Kollonca que se caracteriza por la ausencia de cola y la Ketro que tiene una especie de aretes formados de piel, cerca de la salida del canal del oído, cubiertos de plumas parecidas a las del pecho.
La gallina americana tiene características físicas reconocibles por su plumaje suelto, cuyas plumas parece que estuvieran al revés, barbillas, orejillas rojas y patas de color verdoso. Esta especie fue descubierta por los estudiosos en el 1850. En el 1920 fue llevada a los Estados Unidos y a Europa. A los europeos les llamó mucho la atención de que pusieran huevos de color azul celeste. De hecho, en China también hay una raza que los pone azul, pero no tan bellos y nutritivos como los suramericanos. Aquella gallina china es de color negro, llamada dongxiang. Los huevos de la Mapuche son más apetecidos por tener una mejor yema y bajo contenido de colesterol. La mapuche también pone los huevos verdes. Las gallinas Ketro ponen los huevos color café.
La Cocá. Una de las aves de carne más deliciosa que existe. Su nombre es una onomatopeya de su canto. Es muy sensible, ligera y veloz. Intuye cuando se las quiere sacrificar. Algunas personas acostumbras sacrificarlas a escondidas del resto para no incrementar su instinto preventivo. Se alimenta de granos, semillas e insectos, por lo que mantienen los cultivos limpios de ellos. Los campesinos la tienen como vigilante eficaz contra los ladrones por su prevención a los extraños en las noches. Su periodo de incubación dura de 26 a 28 días. Ponen de 14 a 15 huevos en abril. El macho vigila. Son una de las especies más fieles de la tierra, una vez que se emparejan, jamás se vuelven a separar. Las hay de varias clases. Algunas de plumaje blanco, otras de plumaje blanco apenas en el pecho, otras con pintas más menudas, otras con pintas gruesas en el lomo, otras de plumaje cenizo, otras de pescuezo azul plateado. El macho se distingue por su cascote más pronunciado, al igual que las barbillas.
El pavo casero, originario de América del Norte, en México se le llama guajolote. En nuestro medio es el ganado de los pobres, pues lo crían todo el año para venderlo en diciembre, donde llegan a pesar hasta 40 libras y son bien pagos. Su carne es deliciosa y no tiene colesterol malo. Está muy relacionado su sacrificio con las fechas especiales como: Noche Buena, bodas, cumpleaños o visitas de alto rango. Solo el macho posee la cola en forma de abanico, también una barba que crece según la edad, un moco y su canto es un gloteo que puede ser escuchado a 1 kilómetro de distancia. El macho también posee unas orlas rojas o azulosas alrededor del cuello llamadas curúnculas. La hembra llega a poner hasta 17 huevos. El pavo puede vivir de 10 a 15 años. Hay pavos blancos, monos y negros azulosos. Es omnívoro, se alimenta de semillas, granos, pequeños insectos, brotes, yerbas, y desperdicios caseros. Llama la atención que con tanta hambre, los huevos de pava no llamen la atención al consumo humano. En Morrocoy casi no lo crían porque demanda mucho cuidado, ya que los ladrones están al acecho.
Pavo real. El macho es sumamente hermoso y sugestivo porque tienen una cola de lindos colores que pliega y repliega a voluntad. Esta cola, que es más grande que el resto del cuerpo, luce varios ocelos de tonos que van del azul al dorado, pasando por el blanco, verde o el rojo. La usan en momentos de cortejar a la hembra, quien escoge a su macho según lo hermoso que tenga la cola. Los machos pueden tener varias hembras al tiempo. La hembra pone de tres a cinco huevos. Se alimenta de granos, retoños tiernos, insectos y pequeños animales. El pavo real es de India, Sri Lanka y el Congo. En Morrocoy abundan estos ejemplares en la finca del finado Jairo García, en la cual ponen en los potreros libremente. Dentro del caserío lo hay en una o dos casas.
Paujil. Esta especie existió en Morrocoy por allá en los años 50’s; pero ya está extinta. Se alimenta de brotes, insectos y frutas. Se mantiene en los árboles, aunque baja al suelo para escarbar, buscar alimento y bañarse. Se reproducen en verano, anidando de diciembre a marzo. Los huevos son grandes, de color blanco, superficie rugosa. Es de mayor tamaño que la guacharaca. Su carne es deliciosa. En el país está como especie protegida.
Pato criollo, llamado también pato casero. Es un pato enorme, de buen peso, originario de América Tropical. Se encuentra desde México hasta Uruguay. Plumas de color negro brillante, tornasolado en los machos, con plumas blancas en las puntas de las alas. Las hembras también tienen las plumas de color negro, pero no tan brillantes. Tanto el macho como la hembra poseen unas bolitas rojas en torno al pico, llamadas carúnculas. De hecho, los colores no siempre son los mismos, hay patos totalmente blancos, grises o marrones. Debido a lo pesado del cuerpo, ya han perdido la capacidad de volar largas distancias. Procrean para la época invernal, que es donde más alimentos encuentran. Es de reconocer que esta especie muy poco es atacada por la peste. En la casa había por cantidades, por las tardes se recogían en la orilla de la quebradita que conduce a Rodania, los conductores tenían que bajarse para echarlos cosa que desalojaran el paso. Esta especie de ave logra vivir de 9 a 12 años.
Pato pekinés. Especie introducida a Morrocoy en los últimos tiempos, más con ánimo de lujo, que de alimentación. Se ven ejemplares en las parcelas. Tiene el pico, las piernas y patas de color naranja. Los de color blanco son fáciles de crecer. En esta clase de patos los machos se distinguen porque tienen la cola delgada, hacia arriba, mientras que la hembra la tiene recta o hacia abajo. Pone de 4 hasta 12 huevos, el nido lo recubre de plumones, lo hace en el suelo, en mitad de la paja o debajo de un tronco o en un rincón del patio. A los 28 días ya tiene crías nuevas, las que abandonan el nido a las pocas horas siguiendo a su madre, quien los guía hacia la represa para que se alimenten por sí solos.
Ganso. Esta variedad procede de Europa, Asia y África. Esta especie se ve en las fincas de Morrocoy, los compran en las ciudades y los traen para adornar los patios. Aunque es comestible, en Morrocoy no lo sacrifican para la mesa. Tiene un cuerpo robusto, cuello largo y pico grueso, en punta, color rosado o naranja. El macho se distingue porque es más grande que su pareja. Pueden lograr vivir hasta los 17 años. Su voz es fuerte, parece trompeta ronca. Se alimentan de granos, brotes, yerbas, bulbos y raices. Es muy raro que metan la cabeza debajo del agua en busca de alimento. Les gusta pastar en lugares despejados para tener a la vista al enemigo.
Pisingos domesticados. Esta ave acuática es de origen Suramericano. Altamente gregaria cuando no es la época de cría, monógamos cuando están criando; ambos cooperan en la cría de los polluelos. La pareja se une de por vida. Ponen de diez a doce huevos en los huecos de los árboles o en tierra, sobre nidos hechos de rama y paja. Los huevos son de color blanco, crema, ambos padres atienden el calentamiento, eclosionas a los 26 días. Las crías son de color amarillento, con pintas negras. A los dos meses ya pueden volar, a los ocho adquieren el plumaje adulto y al año pueden procrear. Mudan de pluma cada caño, duran tres semanas en ese proceso, en el cual no pueden volar. Vienen y van dentro de una acción migratoria de Canadá a Colombia y viceversa. Siempre llegan al nido donde anidaron el año anterior. Es un ave hermosa, de pico rosado que se acomoda bien a la domesticación. Los arroceros los consideran una amenaza para los cultivos y por eso los cazan y envenenan masivamente, haciendo con esto un grave daño a la especie y a la natura.
El loro. Originario de América, se adapta bien al cautiverio, por eso lo toman mucho como mascota. Imita cantos y voces. Come granos, pan con leche, frutas, ñame y arroz cocido. Son muy longevos, duran hasta 70 años. Existen unas trescientas especies. Unos son verdes y otros son azules, amarillos, negros o rojos. Tienen un poderoso pico curvo que le sirven para comer, defenderse y trepar. Las patas terminan en 4 dedos, dos hacia adelante y dos hacia atrás. En algunas parcelas encierran los puercos gritando desde las puntas del corral. Anidan en huecos de troncos secos o en los comejenes que aparecen en las ramas de los árboles o también en las grietas de las rocas. Su lengua es carnosa, redonda y móvil, por eso imitan la voz humana de manera fácil. La hembra pone entre dos a cinco huevos
Cotorra. Originaria de Suramérica. Come frutos, semillas y todo lo que consume su pariente el loro. Estando pichonas, y en cautiverio, se las cría con pan remojado en leche. Vuelan en manadas con alta algarabía, sin elevar sus alas por encima del cuerpo. En nuestro suelo morrocoyero había tanta que los campesinos temblaban cuando las veían dirigirse a los cultivos de maíz y arroz. Hoy están como especie amenazada. También pueden llegar a imitar la voz del humano. Ponen de cinco a seis huevos y su período de incubación dura 26 días. En la costa es una de las especies que más se encuentra en cautiverio. Hay sitios en donde jóvenes y adulto tienen como oficio ofrecerlas a los turistas en la carretera. Está amenazada por el uso de veneno en los cultivos de granos y por destrucción de montes altos.
Perico corriente. Originario de Suramérica. La pareja viste igual plumaje, que va del verde oliva al amarillo verdoso. Tienen un anillo peri ocular de color blanco, raspado y los ojos negros, redondos. El pico es curvo, fuerte, color amarillo. Andan en bandada ruidosas. Muchas veces desperdician las cosechas de los árboles frutales. El macho es más sociable, la hembra es tímida y agresiva. Se alimentan de mango, mandarina, plátano, guayaba, guineo, concentrado, manzana, semillas de sauco y flores. La hembra pone hasta 8 huevos. Ahora es la especie más perseguida, como para ser vendida como mascota.
Perico sabanero. También es originario de Suramérica. Son más pequeños que los anteriores. La hembra no se distingue del macho porque ambos visten plumaje igual, tienen ojos grandes, redondos, negros, con una corona blanca alrededor. Son alegres, bulliciosos cuando están en los árboles comiendo frutos. Vuelan en parejas y en grupos de varias parejas, cambiando de dirección. Posan en las copas de los árboles. Por las tardes, en la recogida, es un gusto la bulla que mandan. Son pequeños, de porte elegante, pico color amarillo o blanco, duro y curvo. Lengua gruesa, negra. Nunca toman agua, lo hacen con los alimentos que consumen que son granos, semillas, arroz cocido, pan con leche, guineo, mango, manzana, naranja, mandarina o mamón maduro. Cuando viven en cautiverio suelen picar todo lo que se les ponga por delante. Son celosos con el espacio que ocupan. Ponen de 4 a 8 huevos. Es una especie no amenazada.
Dentro de estos termiteros sacaban los pericos, loros y cotorras
Guacamayo azul. Llamado también papagayo. Es originario de América del Sur. En libertad gusta de vivir en grupo. Se desarrolla bien en cautiverio. Su plumaje es vistoso, de una combinación agradable de colores vivos. El pico es duro y curvo. Las patas son cortas y las garras fuertes. Las alas y la cola son largas. Tanto el macho como la hembra son idénticos, por lo que es difícil distinguir el sexo
Una vez que escogen su pareja, nunca más se separan. Anidan cada dos años entre agosto y enero, lo hacen en los hoyos de los árboles y palmeras. La hembra pone dos o tres huevos. La incubación es de 28 días, las crías dejan el nido a los tres meses. Alcanzan la madurez sexual a los tres o cuatro años. En morrocoy es una especie casi extinguida, pues ya no existen montes altos para su refugio y procreación, los que existen están en cautiverio
Guacamaya roja. De hecho su nombre obedece a su plumaje rojo intenso en la parte cabezal y rojo opaco en el resto del cuerpo, incluyendo las plumas de la cola. Las alas presentan una porción central de color azul, otra menor, color amarillo y remata con una mínima parte negra. Los guacamayos son de la familia de los loros. El pico grande y forzudo es capaz de romper el más duro de los frutos o semillas. Las patas les permiten coger, sujetar, trepar y bajar de donde estén. Son inteligentes, sociables y celosas con sus amos. Solían juntarse en bandadas de entre 10 y 30 miembros. Sus graznidos y chillidos retumban a través de la selva. Además, vocalizan para comunicarse con los demás miembros de la bandada, marcar territorio e identificarse entre ellos. Como se sabe, algunas especies imitan el habla humana. Las bandadas duermen en los árboles por la noche y por la mañana vuelan largas distancias para comer frutas maduras, frutos secos, insectos y caracoles, su alimento principal. Algunas especies también comen tierra húmeda, lo que les ayuda a neutralizar las sustancias químicas de las frutas y a relajar el estómago. Se emparejan para toda la vida, comparten la comida y se acicalan juntos. Las hembras incuban los huevos mientras el macho sale a cazar y traer comida al nido. Hay 17 especies distintas de guacamayos y muchas están amenazadas. Estos traviesos animalitos son muy apreciados como mascotas y muchos son atrapados de forma ilegal para abastecer este mercado. Las selvas tropicales, donde viven muchas especies, también están desapareciendo a un ritmo alarmante. En Morrocoy está casi extinguido, apenas se ven unos cuantos en cautiverio.
Gonzalo colombiano. Llamado así por presentar los colores de nuestra bandera. La pareja es igual, no se distingue el macho de la hembra. Es un ave grande, de garras fuertes que utiliza para trepar, defenderse y comer. El pico es grande, blanco y curvo. Las patas cortas, escamosas y fuertes. La cola es bastante larga, terminada en punta, es de color rojo. Esta hermosa ave tiene los colores de la bandera colombiana, más debajo del pico el color blanco, el color de la paz. Se alimenta de frutas silvestres. En cautiverio puede durar unos 15 años. Anidan en las ramas más altas y colgantes de los árboles. Hay un árbol de su preferencia llamado así, guacamayo. Sacan dos o tres polluelos. Los cazadores están al acecho para cogerse los pichones y venderlos a buen precio, por esto y porque se les agota su medio natural, es que se considera especie amenazada. En Morrocoy los veía sacar en el Arroyo el Tigre. En un mismo árbol contaba hasta cuatro mochilas, que es la forma que le dan a sus nidos colgantes. Hoy está casi extinguido, apenas se ven pocos ejemplares tenidos como mascota.
Esta variedad de papagayo se llamaba en Morrocoy CHEJA. Su plumaje superior es de color verde azuloso, mientras que el pecho y vientre amarillo. Anidan en bolsas colgantes, al igual que sus parientes. Es decir, tiene las mismas características del Gonzalo y del guacamayo. La cheja era la menos apreciada, por lo que muy poco se esmeraban en capturar. Estas tres especies de aves las conocí en Morrocoy, las había de manera abundante por allá en los 60s y 70s. Repito, hoy apenas quedan unos cuantos ejemplares en cautiverio.
Guazalé o Tucán, una de las aves más hermosas de América. Su plumaje es elegante al igual que su largo pico, el cual parece que le molestara por el peso, pero no es así, este precioso pico no pesa. Le encanta pasearse por los patios de Morrocoy en busca de frutos maduros. Hay distintas variedades de esta especie, distinguible por los colores. Es considerada especie amenazada, pues cada día desaparecen los montes altos y tupidos donde acostumbra hacer sus nidos. Como se sabe, se alimenta de frutas, pero cuando se aprieta la situación come pichones de otros pájaros y huevos. La hembra pone 2 huevos blancos, a veces cuatro, la encargada de cuidar los huevos es ella. El borde del pico es aserrado. Los ojos son grandes, negros, redondos, escuetos en su alrededor. La lengua es casi plana, delgada y larga. Las alas son cortas, así como su vuelo, el cual no es tan armonioso.
Oropéndola. Es un ave alegre, vivaracha. En Morrocoy la veía en los patios sobre los árboles frutales y en los platanales o chopales. Canta muy seguida y su canto lo acompaña con el sonar de sus alas. Canta duro y timbrado, parece que estuviera afinando una trompeta. Se alimenta de frutos y flores. Se distingue esta especie por ese canto ripiado y por las plumas amarillas de la cola. Construye el nido en forma de mochila colgante, lo hace de paja, ramas y hojas secas. Pone hasta dos huevos, cuyo color es verde bajito, con manchitas negras. El macho y la hembra visten igual, por lo que no es fácil distinguirlos a primera vista. En Morrocoy su población ha venido disminuyendo debido a la constante modificación del ecosistema.
Las aves como el Chauchau fueron cazados para el tráfico de especies. Son gregarias, pueden verse grupos de hasta cuatro miembros, pero por lo general andan en pareja. Esta ave se domestica como el loro, su canto se escucha lejos y cuando cantan azorados en un mismo punto, es seguro que detectaron la presencia de una serpiente, zorra o un gato montés. Supe que la mamá de Toño Vega, región del Corozo, tuvo una pareja que hablaba muy bien. Cantaban, pedían comida, saludaban y azuzaban los perros. Se alimentan de insectos y de huevos, por esto los campesinos los atacan porque se meten a los nidales, pero tiene un plumaje azul brillante, el cual se aprecia de cerca. Sus garras y pico son fuertes, o requieren para su defensa y capturar el aliento.
La paloma doméstica, era común en el caserío. La paloma tiene la propiedad de succionar el agua, o sea que la toma sin levantar la cabeza. Las hay de diversas especies. Es tenida como el símbolo de la paz. Es originaria de Eurasia y Norte de África, hoy se les ve en todo el mundo. Se alimenta de granos.
Torroguya o tortolita. Es originaria de nuestra América. Era muy común verla en bandadas en Morrocoy en los patios, solares, rastrojos y cultivos. Ahora es una especie amenazada que ha aprendido a convivir en el ambiente urbano, en donde la vemos en los parques y calles. Se les ve comiendo desperdicios de cocina en los patios. Su vuelo es rápido. Se ha vuelto casi doméstica porque anida dentro de las casas, en los kioscos, en el jardín o frente a la puerta de la calle. Pone la hembra dos huevos blancos que sacan a los 12 0 13 días. Los machos adultos tienen la cabeza y el cuello gris pálido, con manchas negras debajo de las alas. Las hembras tienen el color gris oscuro, por lo general coloradas y con menos contraste entre la cabeza y el cuerpo.
Torcaza. Propia de Sudamérica. En Morrocoy se les veía cruzar velozmente por los patios, rumbo a los rastrojales. Al volar va haciendo ruido al golpear sus alas con la parte lateral de su cuerpo. Era sumamente esquiva y nerviosa, pero ahora la veo en los patios comiendo desperdicios de cocina. Cuando camia no para de mover la cabeza hacia adelante y hacia atrás y de vez en cuando la cola. En los campos ha bajado su número, ahora son más urbanas. Las hembras se distinguen de los machos porque estos presentan coloración celeste en la parte de arriba de la cabeza y ligera coloración rosada o dorada en el buche. Otra característica del macho es su canto sulmaripado y por supuesto es el único que canta. En estos momentos es una especie amenazada en Morrocoy.
Guarumera. Ave originaria de Sudamérica. Es hermosa, ligera, liviana, tan ligera como la torcaza. Su canto es duro, suena embolado, raído de tristeza y melancolía. Anida en los troncos de los árboles del rastrojo, sobre un nido hecho de hojas secas y ramas. Generalmente pone dos huevos pequeños de color blanco níveo, cáscara frágil.
Guacharaca. En Morrocoy abundaba esta ave gallinácea, de carne deliciosa, pero hoy la vemos apenas en poblaciones reducidas debido a que el monte alto, matorrales y rastrojos han desparecido, lo cual era su hábitat preferido para procrear. La cabeza es gris y debajo del pico tiene una tela roja. Sus plumas son de color castaño. La cola es larga, de color verduzco. Vive en grupos buscando alimento entre los matorrales, algunas veces bajan a tierra buscando piedrecillas y semillas. Anida entre los árboles, pone de hasta 4 huevos. Las crías nacen a los 22 días.
La codorniz o corniz. Esta es otras de las aves de más edad en la creación de las especies. En Egipto la registran los jeroglíficos de 4000 años antes de Cristo. Por los lados de América hay registro de ella antes de la llegada de los españoles. A Europa fue introducida en el siglo XX. Su carne es deliciosa, tiene poca grasa, por esto aporta poquito colesterol. Es de la misma familia de los faisanes, gallos, perdiz y pavos. En Morrocoy la veo en los poteros y caminos, siempre me asustan cuando levantan vuelo, debido a que hacen ruido con sus aleteos de despegue. El vuelo no es largo, por eso se pueden cazar con perros. Nunca frecuentan los árboles, siempre van por el suelo en espacios cubiertos de yerba para protegerse con su perfecto camuflaje. Aunque no veo las mismas ‘parvadas’ de antes no puedo decir que sea una especie en riesgo en Morrocoy. En Sahagún ya hay granjas que las crían para comercializar los huevos, los cuales se consiguen en almacenes de cadena. La hembra pone hasta 12 huevos, son de color marrón con pintas oscuras. El periodo incubación demora 17 días, las crías son curiosas y vivarachas; muy vivarachas.
Sangretoro. Hermosa ave que se paseaba por los patios de nuestras casas en Morrocoy, hoy ha bajado su número. Está escaso, todo por el uso de herbicidas y destrucción de rastrojos y montes altos. No se tenía como ave cantora, sino como lujosa, por eso casi no la veía en cautiverio. Esta preciosa ave escarlata es originaria de Colombia y Venezuela. El macho es el vanidoso, el que luce las galas, la hembra no es tan vistosa, su pico es negruzco y las plumas de un rojo opaco, sin atractivo mayor. La hembra pone dos huevos azules con pintas oscuras, los cuales eclosionan a los 15 días.
Bajero. Le dicen bajero pico de plata o pico de loro. Es un ave de canto melodioso, el cual se roba la atención y gusto auditivo. Es originaria de América del Sur. Los hay de varias especies. Abundaba en nuestros lares, hoy está extinguido, apenas se ven unos cuantos en cautiverio. El que lo tiene no lo vende por ningún precio. Se alimentan de semillas de pasto, arroz y alpiste. Las hembras son de color marrón, en Morrocoy le decíamos bajero mono. Los jóvenes también son de color marrón con pintas blancas en las alas, luego toman color negreo. Se alimenta de todo tipo de semillas pequeñas. También come caracolillos y minerales del suelo. Repito, posee un canto alegre, como un mini concierto de voces. Se aparea en época de invierno por aquello de la alimentación para él y los pichones. Viven unos 15 años en promedio.
El meriño. Conocido en otras partes como San José o Rosita. Es de origen suramericano. Su canto no es tan derecho, templado y desenvuelto, son trocitos de lamentos finos que se incrustan en el alma con cierto sentimiento de tristeza. Su pico es corto, con terminal aguda. Ojillos negros, mirada melancólica. Sus alas un tanto caídas, color marrón con negro. El lomo también es marrón. El resto del cuerpo es de color adobe oscuro, menos las plumas de la cola que son negras. Es necesario anotar que el parpado de abajo tiene medio círculo blanco, como blanca es la raya que se desprenden de ambos lados del pico.
Mochuelo. De origen suramericano, de la parte norte. En Colombia es muy común. En Morrocoy era la especie más tenida en cautiverio, por ahora ha disminuido su presencia, por lo que está como especie amenazada. Es un ave sencilla, sin ninguna desconfianza al humano, los he visto anidar en el jardín delantero, en la finca de mi abuelo contemplé este hecho. Su nido era taza pequeña, hecho de paja suave, barusitas sencillas Su canto es hermoso y repetitivo, se la mantiene cantando el 90% del día. Estando en cautiverio retorna a su labor desde las 4 am. El compositor Adolfo Pacheco lo inmortalizó en una linda pieza musical. Es un ave bien vestidita, el macho es de color cenizo azulado, pico amarillo, al igual que sus patas. La hembra es de color marrón. Pone dos o cuatro huevecillos color blanco, de cáscara delicada.
Mochuelo hembra, su color es pardo en el lomo y color beige en el vientre, con pico de color marrón oscuro, al igual que sus patas. Esta misma coloración presentan los machos cuando están juveniles. Siempre se le ve en solitario o en pareja. Su temporada de cría va de septiembre a noviembre. Se alimentan de semillas de pastos, arroz, maíz molido y alpiste,
Turpial. Es un ave de hermoso cantar, en Morrocoy lo veo en cautiverio, pues mis campesinos se van a trabajar a Venezuela y de allá lo traen, de donde es originario. Es símbolo nacional de dicho país. Puede vivir solo o en pareja. Se alimenta de insectos, purina, pan con leche, huevos y frutas. No se preocupa por hacer el nido, cuando siente la necesidad de depositar sus huevos, busca nidos abandonados o los arrebata a la fuerza, luego defiende con su vida el territorio arrebatado. Pone de tres a cuatro huevos que eclosionan a los 14- 15 días.
Pico gordo. Es de origen Centroamericano. Su canto bonito. Al picogordo lo procuran tener en cautiverio para alegrar el ambiente de casa, junto con el mochuelo, canario, bajero y tusero. El macho tiene la parte del lomo y cuello azul brillante, de lejos parece negro. Y tiene la parte ventral amarilla, así como el bonete. El pico es negro, grueso, firme. La hembra es de color amarillo pálido. Pone hasta cinco huevos, color blanco con manchas castaño. La incubación dura 15 días. Se alimenta de semillas, frutos y pequeños insectos.
Azulejo. Originaria de América. Es de hermosa estampa, muy atractiva a la vista, con su tonalidad azulosa blanquecina. Tanto la hembra como el macho son idénticos, no es fácil distinguirlos a simple vista. El canto no es divertido, ni atrayente, aunque es rápido, repetido y timbrado. Se le ve en la zona rural como en la urbana, en Morrocoy esta especie ha bajado su población, por lo que está amenazada. Busca alimentos en los patios de casas y fincas. Su alimento preferido son las frutas maduras. La hembra pone hasta tres huevos, que varían entre blancos y grises, con manchas oscuras.
Canario. Originario de las Islas Canarias. Existen más de 100 especies. En morrocoy es una especie amenazada, muy poco se ve en el área de manera silvestre. Se alimenta de semillas. Su canto es una delicia. El plumaje y su porte es una atracción al buen gusto. Su pico es delgado, terminado en punta.
Congo, ave perteneciente a las canoras. De origen americano. Su pico es grande, fuerte y cónico. El macho es completamente negro, con unas pintas blancas en el ala. La hembra es parda, más clara en la parte del vientre. El canto es apreciado por su atractivo melódico, tanto la hembra como el macho cantan muy bonito. No debe confundirse con el bajero. Se alimenta de semillas, frutos e insectos. La temporada de reproducción va de abril a septiembre. El nido es un cuenco hecho de finas raices, pastos y, hasta pelos de animales. La hembra pone dos huevos blancos con manchas pardas. Esta especie también ha ido desapareciendo en Morrocoy, apenas veo unos cuantos ejemplares en cautiverio.
Toche palmera. Ave sabanera, muy vistosa y de sonido agradable. Saca en los patios que están arborizados y en las parcelas. El nido lo hacen en forma de mochilas colgantes, como el del Gonzalo o guacamayo. Comen insectos, pan con leche, purina y frutas maduras.
El ‘puerquero’. Conocido como cuco o arditero. Cuerpo largo, de plumaje rapé o café, con cola larga, la cual lleva partes blancas y negras por debajo y al final, en las puntas. El pico es amarillo, en tanto que el iris rojo. La mayoría de ejemplares que se encuentran en Morrocoy no tienen las pintas blancas en la cola. Siempre los veía andar en pareja. Estaba asociado a las aves de mal agüero, por su canto luctuoso a media noche. A esta ave también la inmortalizaron en una grabación musical. Aún quedan algunos ejemplares en este contexto.
El chirrí, yerberito o semillero. De origen americano. El pico es en v, propio de las aves insectívoras. La cola larga, los ojos redondos y negros, con iris rojizo. Le encanta posar sobre las ramas de pasto y hacer un salto en giro, mientras canta algo así como ¡chirrí! Es sumamente esquiva, muy difícil de atrapar. Sus nidos son bien escondidos. Ponen dos huevillos de color blanco con pintas marrón. No despierta el interés por tenerla en cautiverio. Aunque ninguna de ellas debiera tenerse. Se alimenta de semillas. Esta especie está amenazada en Morrocoy por falta de hábitat.
El mallero, ave parecida al papayero y al sinsonte. De canto melodioso, abunda en nuestros patios, es casi doméstica, se alimenta de desperdicios caseros y hace sus nidos en arbustos, cerca de las viviendas. Saca de tres a cuatro crías. Se alimenta de insectos, granos y pan con leche. Es el ave nacional de Costa Rica. Se le conoce también como zorzal pardo, mirlo pardo o yiguirro.
La chamaría. Originaria de América, se caracteriza por su canto alegre, casi estrafalario, de diversas tonalidades, que más bien parece que gritara algún nombre en particular. Por rato dice algo cómo: ya te vi, si te vi, Cristofué, Roberto Ruiz, tú fuite, cierto güi, Víctor Díaz. El chico muy contento con su chamaría de mascota. Una de las aves más populares de la región, se desenvuelve bien tanto en el campo como en la ciudad. Es muy precisa para señalar el nacimiento del nuevo día. Se alimenta de insectos y de desperdicios caseros. Su canto se escucha a 50 metros y tiene un repertorio variado. Es muy cercana a la tijereta, familiarmente hablando. En algunos lugares se conoce como chucha fría. Es muy doméstica, familiar, confianzuda, las he visto sobre la mesa de los matarifes comiendo moscas y trocillos de carne; en los pañoles buscando larvas e insectos. También come uva y e higos. Les encanta vivir en los chopales, patios frondosos y rastrojos no muy enmarañados. El pico es negro, largo, duro, firme, terminado en gancho. Muchas personas la tienen como el reloj madrugador, pues le gusta cantar desde las 5:00 am.
El Tusero. De porte pequeño, presencia hermosa y canto melodioso. Este ejemplar de la foto es el macho, la hembra es de color marrón, no tan vistosa. Desde hace rato desapareció de los campos morrocoyeros. La hembra pone hasta 4 huevos, de cáscara blanca, suave, delicada. El nido lo hacía no tan lejos de los sitios habitados.
Cucarachero común. Natural del continente Americano. Es muy familiar, aunque esquivo, se acerca a los alares de las casas en busca de insectos. Recorre las paredillas y cercas en busca de su alimento. Canta fino, rápido y continuo. Sus movimientos son veloces, al igual que su traslado, aunque no gusta de recorrer largas distancias. Se alimenta únicamente de insectos, con lo que ayuda al control biológico del hogar, las plantas y cultivos. Habita en los pastizales, rastrojos y fincas. No está amenazada en Morrocoy.
El bujío, ave insectívora crepuscular, de color gris, collar blanco incompleto, pico pequeño, ojos grandes, alas largas y cola cuadrada. Caza insectos cerca de los corrales. Anida en el suelo, pone dos huevos pringados de negruzco y rapé. Usa un buen camuflaje, su vuelo es corto, casi saltando. No es muy temerosa del hombre, aunque, contrario a las torcazas y las torroguyas que se vinieron para la zona urbana, esta sigue habitando las zonas rurales. El canto es una onomatopeya a su nombre, ¡bujiio! Canta empezando la noche y durante las madrugadas claras, lo cual despierta un sentimiento de añoranza en la distancia.
El colibrí. Originario de América. El nido es una curiosidad, presenta forma de pocillo, muy tierno, liso, algodonoso por dentro y rústico por fuera. La hembra tiene la cola menos ancha que larga, como si la tienen los machos, además el vientre es negruzco, con una banda verde en el pecho y bigotes en la base del pico, pone únicamente dos huevecillos blancos, aunque otras especies pongan tres. Son incubados por la hembra. El colibrí tiene la propiedad de volar en reversa. Esta especie es la más silenciosa, apenas hacen un chasquido, ¡chip!, ¡chip! El macho seduce a la hembra lanzándose en picada desde las ramas más altas para que ella lo vea y se entregue a sus requiebros.
Yolofo. De origen Americano. Son de color negro, muchas veces confundidos con los cuervos, pero ni siquiera son familia, esta especie es de los Icteridae y los cuervos son corvidae. El yolofo es irritable y agresivo. Defiende su espacio y comida. Además tienen la mala fama de que sacrifican los huevos de los otros nidos para ellos depositar los suyos, de tal manera que son otros padres los que se encargan de empollarlos y criarlos. En estos momentos han conquistado el espacio urbano, se ven muchos individuos en los parques y solares. Se alimentan de granos, insectos, crustáceos, semillas, frutas y desperdicios de cocina. Las hembras son más pequeñas, aunque la pareja viste igual. Su canto son silbidos fuertes y repetitivos, tocando un tanto la belleza armónica.
Cocinera. Es originaria de América, muy gregaria, demuestra tolerancia a las personas. Su vestido negro le augura un mal concepto, pero no, es un ave sencilla que no está relacionada ni con la muerte, la tragedia o la ruina. No hace daño a las cosechas por eso el campesino las acepta sin recelo. Tampoco es empleada en el consumo humano. Se alimenta de insectos, semillas, granos, comején, arañas, ciempiés, saltamontes, garrapatas y pequeñas serpientes. Se les ve en grupos recorriendo los potreros en busca de su alimento. El nido está hecho de hojas y pequeñas ramitas sobre los cayos de latas, su lugar preferido. Suele hacer un nido grande para dar alojo a varias parejas que conviven en él. Los huevos son de un azul verdoso, cada hembra pone 4 huevos. Como el nido es comunal, no es raro encontrar hasta 20 huevos en cada incubada, los cuales eclosionan a los 15 días, máximo. Cada día se le ve más cerca de los ambientes urbanos.
Tres piedras. Ave escurridiza, podía estar cantando a pocos metros y uno no la veía, ahora son más de confianza, pues se han vuelto semi citadinos, por esto ya se dejan fotografiar. Su canto es simple, pero llama la atención porque suena duro y timbrado. En Morrocoy lo veía más que todo en los rastrojos del pozo de La Peña y en los rastrojales del camino al Táchira. Es una especie amenazada porque se le ha ido sustrayendo de su hábitat.
Tijereta. Hermosa ave originaria de México. Repito, es sumamente preciosa, de color gris claro, cola larga, bifurcada, en forma de tijera, de aquí su nombre. Cuando está posada cierra la cola y la abre durante el vuelo. Se encuentran desde México hasta Argentina. En Morrocoy hay una población pequeña. La veo en los potreros, durante las tardes, cazando grillos y demás insectos. Durante el vuelo hace un balance de sube y baja. Su vuelo no es tan veloz.
Copetón. Avecilla simpática, parece una criatura bebé, tiene el vientre y pecho gris, las alas color marrón. Su canto es un silbido agudo. En Morrocoy la veo en los rastrojos tupidos, es muy escurridiza. Se alimenta de insectos. Nunca la he visto en cautiverio.
El carpintero rayado o jabado, pichón y adulto. Carpintero copete rojo.
Carpintero copete rojo. Es originario de América. Se alimentan de larvas, escarabajos y frutas. Viven en parejas, aunque duermen separados dentro de huecos de ramas o tallos. En estos huecos ponen sus huevos. La pareja cava el hueco para anidar y ambos incuban los dos únicos huevos que pone la hembra. El turno del macho es de noche, también le toca alimentar las crías. Presenta cresta roja, ojo amarillo y pico córneo, de color gris pálido. Dicen los estudios que la lengua del carpintero es larga, tan larga que envuelve el cerebro para soportar los golpes que da sobre los resistentes árboles y evitar así que se haga daño alguno. Si hablamos del carpintero rayado, tenemos que decir que también es americano, su pico es negro y fuerte, sus ojos saltones, color negro, patas negras con dedos prensiles, copete naranja.
Carpintero colorado. En verdad es de la misma especie, pero este tiene el pico recto. Lo veo mucho hurgando en los árboles de los caminos buscando hormigas, comejenes, larvas, ninfas. No es tan arisco o asustadizo. Su plumaje es marrón, rayado en la cabeza y vientre. Esta variedad es originaria de Colombia y Venezuela. Hay otra variedad en Brasil y Bolivia. No parece estar entre las especies amenazadas en la región de Morrocoy.
El carga barro. Especie natural de América del Sur. En Morrocoy lo vemos en la orilla de los arroyos y quebradas. Hace su nido de barro, como para hacerlo debe recogerlo y transportarlo, la gente le bautizó de esta manera. Esta ave es bastante sedentaria y territorial. Se alimenta de grillos, mariposas, cucarachas, escarabajos, langostas y hormigas. Son muy fieles a la pareja, después que se constituyen, nunca más se separan.
El golero. Ave de origen americano, es necesario aclarar que esta especie no tiene ninguna relación con el buitre negro eurasiático, esta especie nuestra es de los Cathartidae. El techo de la cabeza y cuello no tienen plumas. El pico es corto, rudo y termina en gancho. El iris del ojo es de color café Es carroñero, aunque también come huevos y animales recién nacidos. Es urbano, busca su alimento en los basureros y calles. Ya ha perdido el temor al hombre, por eso sube a los techos y paredillas. Posee un desarrollado olfato, no tiene siringe, por lo que apenas produce unos siseos. Pone sus huevos en cuevas, huecos de árboles, o en el suelo. Este de la foto lo hizo en medio de un cayo de latas espinosas, apenas pudo criar uno de los dos polluelos que acostumbra tener por nidada. Fíjense el color blancuzco cuando están pichones. En otras regiones recibe diversos nombre como: zamuro, zopilote, sucha, gallinazo, jote o chombo. El golero presta un invaluable servicio ecológico al hombre, al mantener …, continúa otra hoja…
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1 añoMi gatito arisco se subía con el lomo por las piernas solamente de mi tía porque la quería y le daba de comer