Fusariosis Vascular en Garbanzos: Una Amenaza Silenciosa.

La fusariosis vascular es una de las enfermedades más comunes y destructivas en los cultivos de tanto garbanzos como cebolla, tomate, chile y pepino, generando pérdidas significativas en la producción a nivel mundial. Esta enfermedad, provocada por el hongo Fusarium oxysporum f. sp. ciceris, afecta el sistema vascular de la planta, limitando su capacidad de transportar agua y nutrientes, lo cual resulta en el debilitamiento de la planta y, en casos graves, su muerte, representando entonces, una de las enfermedades más relevantes e importantes a considerar. 

A continuación, exploraremos las características de esta enfermedad enfocados en el garbanzo, cómo identificarla en el campo, su ciclo de vida, métodos de control y recomendaciones para mitigar su impacto. 

¿Qué es la Fusariosis Vascular? 

La fusariosis vascular es una enfermedad fúngica causada por el patógeno Fusarium oxysporum f. sp. ciceris, que tiene una especial afinidad por los cultivos de garbanzo (Cicer arietinum). Este patógeno penetra en la planta a través de las raíces y se propaga a través del sistema vascular, bloqueando el flujo de agua y nutrientes. Esto causa que la planta presente síntomas de marchitez y, eventualmente, se descomponga internamente, comprometiendo el rendimiento del cultivo (Jiménez-Gasco et al., 2004). 

Síntomas de la Fusariosis Vascular en Garbanzos 

La detección temprana de la fusariosis vascular es clave para evitar la diseminación de la enfermedad en el campo. Los síntomas iniciales incluyen: 

-Marchitamiento: Las hojas de la planta comienzan a marchitarse, especialmente en la parte superior de la planta. Este marchitamiento puede ser más evidente en climas cálidos y secos. 

-Amarillamiento: Las hojas se tornan amarillas, progresando desde las hojas más bajas hacia la parte superior de la planta. 

-Necrosis Vascular: Al cortar el tallo de la planta afectada, se observa un oscurecimiento del sistema vascular, debido a la acumulación de toxinas y la destrucción de los tejidos (Haware et al., 1992). 

Estos síntomas suelen aparecer en plantas de distintas etapas de crecimiento, aunque son más comunes durante el periodo de floración y desarrollo de las vainas. 

 3. Ciclo de Vida de Fusarium oxysporum f. sp. ciceris 

El ciclo de vida de Fusarium oxysporum en garbanzos comienza cuando las esporas del hongo en el suelo infectan las raíces de la planta. Estas esporas pueden permanecer viables en el suelo por largos períodos, incluso sin la presencia de una planta hospedera, ya que tienen la capacidad de formar estructuras de resistencia llamadas clamidosporas. Una vez que el hongo coloniza el sistema vascular, se disemina rápidamente, bloqueando el flujo de agua y nutrientes y produciendo toxinas que agravan los síntomas en la planta. 

Es importante destacar que esta enfermedad puede ser transmitida tanto por el suelo como por semillas infectadas. Esto hace que la limpieza de herramientas y el uso de semillas certificadas libres de patógenos sean esenciales para evitar la diseminación de la enfermedad en nuevos campos (Triki et al., 2001). 

 4. Estrategias de Control 

El manejo de la fusariosis vascular en garbanzos es un desafío debido a la naturaleza persistente de las esporas en el suelo. A continuación, se presentan algunas de las estrategias más eficaces para mitigar el impacto de esta enfermedad: 

- Rotación de Cultivos: La rotación de cultivos es fundamental para reducir la concentración de Fusarium en el suelo. La rotación con cultivos no susceptibles, como cereales, puede ayudar a disminuir la presión del inóculo en el suelo (Navas-Cortés et al., 2000). 

- Uso de Variedades Resistentes: Actualmente, existen algunas variedades de garbanzo que muestran cierta resistencia a Fusarium oxysporum f. sp. ciceris. La elección de estas variedades puede ser una herramienta eficaz para reducir las pérdidas en áreas con alta incidencia de la enfermedad (Rubio et al., 2005). 

-Control Biológico: Diversos estudios han evaluado el uso de microorganismos antagonistas como Trichoderma y Pseudomonas para suprimir el crecimiento de Fusarium en el suelo. Estos organismos pueden colonizar el rizosfera (zona del suelo circundante y más cercano a las raíces de las plantas) de la planta, actuando como una barrera contra el hongo (Landa et al., 2004). 

- Medidas de Higiene: La limpieza de herramientas, calzado y maquinaria puede prevenir la propagación de esporas entre campos. Además, es recomendable desinfectar las semillas antes de la siembra para reducir el riesgo de infección inicial. 

La fusariosis vascular en garbanzos es una amenaza considerable para los agricultores debido a su alta persistencia en el suelo y su capacidad de reducir el rendimiento de los cultivos. Sin embargo, mediante prácticas agronómicas adecuadas, como la rotación de cultivos y el uso de variedades resistentes, es posible mitigar el impacto de esta enfermedad.  

 Fuentes 

- Haware, M. P., Nene, Y. L., & Mathur, S. B. (1992). Seedborne diseases of chickpea. In ICARDA, Aleppo, Syria. 

- Jiménez-Gasco, M. M., Milgroom, M. G., & Jiménez-Díaz, R. M. (2004). Stepwise evolution of races in Fusarium oxysporum f. sp. ciceris inferred from fingerprinting and vegetative compatibility analysis. Phytopathology, 94(3), 228-235. 

- Landa, B. B., Navas-Cortés, J. A., & Jiménez-Díaz, R. M. (2004). Integrated management of Fusarium wilt of chickpeas with sowing date, host resistance, and biological control. Phytopathology, 94(9), 946-960. 

- Navas-Cortés, J. A., Hau, B., & Jiménez-Díaz, R. M. (2000). Yield loss in chickpeas in relation to development of Fusarium wilt epidemics. Phytopathology, 90(11), 1269-1278. 

- Rubio, J., Moreno, M. T., & Gil, J. (2005). Sources of resistance to Fusarium wilt in chickpea in a collection of germplasm from the Iberian Peninsula. Plant Disease, 89(5), 520-524. 

- Triki, M. A., & Ben Salah, H. (2001). Screening chickpea for resistance to Fusarium wilt in Tunisia. Phytopathologia Mediterranea, 40, 163-170.