GESTIÓN PRL EN OBRAS: VISITAS A PISOS PILOTO

Hay una situación, generalmente al final de la obra, que suele escaparse de la gestión preventiva, son las visitas a los pisos piloto mientras aún se ejecutan trabajos en una obra de construcción.

Los promotores por motivos obvios de ventas, requieren que su personal comercial, realicen visitas a los denominados pisos pilotos para facilitar la venta de las viviendas de una promoción concreta. Ante esta situación, es común, que surjan dudas de cómo se debe gestionar, y sobretodo, quién "se hace responsable" de esas visitas.

Con el objetivo de facilitar una postura ante esta situación, paso a exponer mi criterio, basándome en el RD 1627/97 sobre obras de construcción y el RD 171/2004 de coordinación de actividades empresariales, adoptando la situación más común, en la que el contratista actúa como empresario principal.

De esta manera el contratista tiene la obligación de proponer un procedimiento de control de acceso a la obra, a través del plan de seguridad y salud (PSS), que deberá validar el coordinador de seguridad y salud durante la ejecución (CSS) mediante la aprobación de este PSS.

En este PSS, el contratista planificará los trabajos contratados con el promotor, incluyéndose el control de acceso para estos trabajos.

Pero resulta que las visitas a los pisos piloto no son actividades que un contratista asume ante un promotor, por lo que se escapa de esta planificación del PSS, y si además, las visitas se realizan mientras aún se ejecutan los trabajos de ejecución de las obras, se añaden unos riesgos para los que "no se está preparado".

La solución ante está situación sería:

1.- Al ser las visitas al piso piloto una actividad que requiere el promotor, este "gestiona", toma una decisión, directamente una actividad, por lo que automáticamente pasaría a considerarse contratista en la obra.

2.- Al considerarse contratista el promotor, deberá planificar la actividad. Pero al no estar recogida en el Proyecto, ni en el Estudio de Seguridad y Salud, no podrá elaborar un PSS, debiendo elaborar un "Documento de Gestión Preventiva" (DGP) que planifique y evalúe la actividad a desarrollar, incluyendo el control de acceso. En este caso, el CSS no aprueba este DGP, pero si debe validar el procedimiento de control de acceso.

3.- Es necesario, que el contratista y el promotor-contratista, coordinen las actividades para evitar los riesgos durante las visitas, incluyéndose en esta coordinación el CSS.

Esta situación, que he intentado sea de lo más simple en una obra, se puede complicar o variar bastante, por lo que el caso debe ser analizado y consensuado por todas las partes implicadas.

Mi consejo personal, eviten la entrada de personas ajenas a una obra mientras duren los trabajos, no saben andar por una obra.

Daniel Navas