Gratuidad educativa: impacto y valor
Objetivo: proteger el valor de las iniciativas Edtech
En estos difíciles momentos de pandemia, el apoyo de toda la comunidad educativa a la sociedad está siendo inmenso. De forma global, se puede comprobar el esfuerzo que se está haciendo por ayudar a más de 1.500 millones de estudiantes, procedentes de más de 160 países, atrapados en su discontinuidad académica.
Michael Trucano, especialista del Banco Mundial en educación y tecnología, describió la importancia de los "puntos de inflexión" para impulsar la tecnología educativa. Ahora las cuarentenas del COV-19 se han convertido en ese punto de inflexión puesto que las instituciones educativas y gobiernos están viendo el e-learning como una tabla de salvación para superar esta emergencia. Ya no hay duda, estamos ante un mundo cada vez más incierto (epidemias, crisis climáticas y otros desastres) donde la tecnología educativa está lo suficientemente madura para reducir su impacto. Un claro ejemplo de ello está siendo China, que ante sus más de 278 millones de estudiantes en casa hasta el 7 de abril, ha decidido cambiar la educación on-line a gran escala e inyectar más de seis mil millones de dólares en inteligencia artificial educativa.
Y mientras el COV-19 continúa golpeando, los proveedores de tecnología educativa han reaccionado ampliando sus servicios gratuitos o abriendo sus versiones Premium durante un periodo de tiempo. Un buen ejemplo, en la revista The Journal o UNESCO, donde se han recopilado numerosas iniciativas ¿Con qué fin?
- Primero, para ayudar y dar continuidad académica. Cabe destacar que aquellos centros que ya tenían huella digital no han necesitado apoyarse en este tipo de proyectos e iniciativas gratuitas. Pero siendo realistas, ni en países con un alto nivel de digitalización en K12, como por ejemplo Países Bajos, apenas llega al 20% de los estudiantes. Es decir, son porcentajes bajos, así que la mayor parte de los centros están valiéndose de esta gratuidad y de los REA (Recursos Educativos Abiertos) de distintos organismos e instituciones (públicas y/o privadas) para poder continuar con el curso académico.
- Segundo, para incentivar la cultura del e-learning.
- Tercero, para crear oportunidades de negocio.
Y no necesariamente todos los proveedores lo están aplicando en este orden. Pero ¿cuál será el impacto de esta gratuidad? La experiencia vivida previamente en los países asiáticos, que frágilmente están despertando de esta pesadilla, nos revela algunos aspectos interesantes.
En relación al apoyo e incentivación de la cultura e-learning, se constata que hemos tenido que llegar a una tragedia a nivel global para ver la importancia de que todo centro cuente con un PLAN de Continuidad del Aprendizaje. Sabemos que la adopción de la tecnología educativa no es fácil. Históricamente han sido muchas las barreras, pocas las ayudas y una gran falta de políticas integradoras que hayan ayudado a un despegue adecuado. Pero ahora muchas instituciones y gobiernos han puesto sus motores en marcha para definir su PLAN. Así pues, parece que es un primer paso positivo e integrador. Esto significa, que existirán centros educativos, en cuyas arquitecturas tecnológicas podrán incorporar aquellos proyectos que han sido utilizados durante este tiempo, obviamente, si la experiencia e-learning ha sido positiva.
En relación a la oportunidad de desarrollo de negocio, es importante conocer lo que está ocurriendo. Para las grandes empresas y start-ups, si existe monetización, se estima que se producirá entre 6-10 meses porque ahora hay otros frentes abiertos que son más urgentes. En consecuencia, las grandes compañías educativas están preparándose para aguantar estos tiempos de transición. Sin embargo las start-ups se están quedando sin efectivo y no encuentran financiación en los mercados para poder “aguantar” el tirón de ayuda.
Volviendo a China, desde el último cuatrimestre de 2019, la financiación y los capitales de riesgo estaban reduciéndose como observamos en el gráfico.Y aunque recientemente existen luces verdes como Yuanfudao (compañia K12, que posee cursos de apoyo y refuerzo escolar on line con más de 400 millones de usuarios que acaba de levantar una ronda de 1.000 millones de dólares), a priori, no parece que 2020 vaya a ser un año para revertir dicha tendencia. Algunas grandes educativas como New Oriental Education o Tomorrow Advancing Life (TAL) traducen esta falta de capital de las start-ups en oportunidades: "probablemente no resistirán estos tiempos, por tanto, irán desapareciendo, surgiendo así más oportunidades", según Stephanie Lee y James Leo, cofundadores de cada una de las compañías.
No cabe duda que el e-learning está en un punto de inflexión, de crecimiento, como jamás lo había estado, pero no parece que este tipo de estrategias “de gratuidad” vaya a ayudar a todas las empresas por igual. Ante una catástrofe como el COV-19, sin duda lo primero es ayudar, pero también definir estrategias que permitan su supervivencia. La cultura del “gratis en digital” históricamente ha traído muchos dolores de cabeza al sector educativo. La pérdida más importante, el valor de los propios proyectos , y tal vez ahora, algunas start-ups que tanta innovación han inyectado al sector. No caigamos de nuevo en los mismos errores, en las mismas estrategias que años atrás han hecho tanto daño al Edtech. Existen otras estrategias que permiten alcanzar los mismos objetivos pero siendo menos agresivas. Practiquemos y pongamos en marcha estrategias que permitan ayudar, superar estos tiempos de crisis pero con la supervivencia y la buena salud de todo el sector, de las grandes compañías y de las start-ups, para que su valor sea sostenible en el tiempo, más cuando se ha intentado apaliar un mal endémico.
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Directora de marketing I CMO I Growth Marketing I Marketing Omnicanal I Ayudo a las empresas a transformarse digitalmente y comunicar de manera efectiva, conectando clientes, aumentando sus ventas y posicionamiento.
4 añosGracias por el artículo Ana Isabel y compartir tu reflexión con nosotros. Ayudar en este momento es imprescindible. Todas las marcas lo han hecho (grandes y pequeñas). El tema es ¿qué quiero y debo aportar?¿cómo quiero estar presente y ayudar? No he visto a los panaderos regalando todo su pan, ni a Netflix entregando acceso gratuito. Creo, bajo mi humilde opinión, que el sector necesita reflexionar, como bien dices, sobre la pérdida de valor de los propios proyectos. Sumar a la ecuación otros valores quizá ocultos, pero que están, que no sean sólo producto.
General Manager for Snappet Spain
4 añosMuy buen análisis Ana y efectivamente ahora hay que ayudar pero también hay que sobrevivir.
Desarrollo de talento en IA y Cloud
4 añosLa supervivencia y el desarrollo del ecosistema EdTech dependen de una reforma del sistema educativo. Una reforma que tenga como objetivo prioritario que los alumnos desarrollen las competencias digitales que de verdad van a necesitar en su vida adulta. En ese contexto habrá demanda natural y muchas oportunidades de negocio para las soluciones educativas digitales de calidad.
International Energy Consultant I Project Management I Business Development I CCUS I Country and Asset Management I Principal Reservoir Engineer
4 añosExcelente analisis sobre como aportar valor a la sociedad y atender el compromiso social, ...sin olvidar la importancia de la calidad del servicio, ni la viabilidad economica del negocio.
Audentis Fortuna Iuvat | Education & technology
4 añosMuchas gracias, Ana Isabel Calvo Villalba, por tu lúcido análisis. De hecho, esta tensión ya está empezando a comprometer a algunos de los actores digitales en India.