¿Has sufrido alguna vez el efecto Diderot?

¿Has sufrido alguna vez el efecto Diderot?

El Efecto Diderot está basado en 2 ideas:

  1. Los bienes adquiridos por los consumidores se alinearán con su sentido de identidad y por ende se complementarán entre sí y
  2. La introducción de una nueva posesión que se desvíe de los bienes complementarios actuales del consumidor puede resultar en un proceso de consumo en espiral.

 

El Efecto Diderot es un fenómeno social que está relacionado con el consumo de bienes que no necesitabas inicialmente, sino que los vas adquiriendo para complementar aquello que sí querías y que tal vez sí necesitabas (o tal vez no).


Para explicarlo con un ejemplo, imagina que te vas de compras y encuentras una casaca que te gusta, que puede ser cara o barata, pero dado que necesitas una porque las que tienes en casa están ya desgastadas decides comprártela de todas formas. Al llegar a casa decides ponértela, dándote con la sorpresa que no tienes ningún polo o camisa que le combine, por lo que se vuelve “necesario” comprar esta nueva camisa y bueno un par más para no repetir, unos pantalones que le hagan juego a las nuevas camisas que tienes y zapatos o zapatillas también. A esto, le podrías agregar accesorios adicionales para que puedas usar bien esa casaca.


Es la introducción de un nuevo artículo lo que impulsa tu deseo de seguir consumiendo, teniendo como resultado final un impacto negativo en tus finanzas personales, ya que se hace un hueco en tu presupuesto al gastar dinero que no tenías planeado, cortando así tu capacidad de gasto en otras áreas, o peor aún incrementando tu nivel de endeudamiento si es que se te sale de las manos.

 

Es importante saber que este efecto no se da unicamente porque decides comprarte algo (que puede ser pequeño o no), sino que también se gatilla al recibir un regalo por ejemplo. Si alguien cercano te regala una nueva mesa para tu sala porque te faltaba, pero la misma es tan bonita y diferente que te das cuenta que el resto de muebles no le combinan, vas a empezar a ver cuál de todos ellos va a ser el primero en cambiar y luego de un tiempo te verás cambiando los muebles, las butacas, la mesa de centro y la alfombra. Esto sucede en todos los aspectos de nuestras vidas, incluso cuando vas a un restaurante y pides tu comida y te ofrecen un postre o agrandar tu menú por ejemplo, cosas que no necesitamos, pero que acompañan bien a lo que estamos consumiendo.

 

En casi todas las circunstancias la introducción de algo nuevo en nuestras vidas, nos “obliga” inmediatamente a iniciar un proceso de consumo en espiral de cosas que no necesitábamos.


Denis Diderot observó y notó este fenómeno, plasmándolo en un ensayo titulado "Lamento haberme separado de mi vieja bata". En la historia de ficción, él recibe una nueva y elegante bata de su amigo, un gesto amable. Sin embargo, al recibir el obsequio, Denis nota que todas sus otras posesiones comienzan a verse monótonas y descoloridas en comparación con aquel artículo nuevo. Entonces, empieza a reemplazarlos a todos ellos, incluso las obras de arte de las paredes. Y al final de la historia, señala Denis

Yo era el amo absoluto de mi vieja bata, pero me he convertido en esclavo de la nueva.


La idea de conocer este efecto es poder romperlo cuanto antes, para que el comportamiento de consumismo asociado al mismo cause el menor impacto posible.


La pregunta es ¿cómo superar el Efecto Diderot y evitar un patrón de consumismo innecesario? 

Sobre ello, algunas ideas:

 

  1. Nos toca ser conscientes de que estamos sufriendo este efecto. Cuando debas comprar algo relacionado a un objeto que ya compraste, debes pensar y analizar aún más (que la compra inicial) si es que realmente lo necesitas.
  2. Cuando vayas a comprar algo nuevo, piensa en todas aquellas cosas que puedan estar relacionadas (lo puedes buscar en la web) para que pueda dimensionar el tamaño del gasto que vas a hacer, y a partir de ello, decidir qué vas a adquirir.
  3. Evita a toda costa las compras innecesarias, ya que es posible que te salgan más caras de lo que esperabas en un inicio.
  4. Piensa más en la utilidad que en el status de las cosas cuando las compres. El Efecto Diderot puede ser muy perjudicial sobre todo si alineas un status social a tu nivel de consumo, por lo que con el fin de mantenerlo, es posible que no solamente liquides tus ahorros, sino tomes deuda para mantener dicho status.

Ten en cuenta que para las tiendas, el Efecto Diderot es una buena manera de incrementar las ventas, por lo que cuando compres algo (sobre todo en las online), automáticamente van a ofrecerte un artículo relacionado, indicando la necesidad de tenerlo.

¿Alguna vez has notado el efecto Diderot en su propia vida? Cuando empieces a reconocerlo a tu alrededor, date un minuto, toma una pausa y piensa en el motivo de tu gasto, ello ayudará a que tus finanzas no se vean tan golpeadas.

 

La Clave

La fórmula para conseguir evitar caer en el Efecto Diderot se basa en plantearte antes de hacer la compra si realmente es necesaria y pensar el uso real que le vas a dar y, desde luego, no basar la autoestima en las posesiones porque el efecto a la larga genera más incomodidad que satisfacción puesto que terminas sintiéndose más esclavo de las compras que libre. 

 

 

Inicia sesión para ver o añadir un comentario.

Más artículos de Pablo Cateriano Gamboa

Otros usuarios han visto

Ver temas