¿Hay que consolar a un niño/a en plena rabieta?
Me inquieta la de veces que me preguntan si ante una rabieta de un niño/a, el llanto, un malestar indeterminado... hay que consolar.
Consolar, acompañar, atender, prestar atención... creo que son cosas que jamás te arrepentirás de haber hecho con tus hijos/as. Y ante la duda... cuando has estado realmente mal, ¿te ha gustado encontrar consuelo, atención y compañía? Pues eso. 💫
El otro día vivimos una escena de rabieta, una amiga estaba consolando a su hijo pequeño mientras nuestros mayores lo presenciaban de cerca. Lo que hizo, no sólo fue un bálsamo para su peque, sino que ayudó también a nuestros hijos mayores a seguir aprendiendo a acompañar.
Los niños nos observan siempre y toman nota. Un día, cuando sean adultos y tengan hijos, el consuelo les nacerá como lo más natural del mundo. Porque lo habrán vivido, gozado, sentido y se habrán beneficiado de él. Hagamos un mundo mejor, por favor.
Acompañémonos, amémonos. Suficiente dolor hay ya en este mundo como para no consolar y ayudar a atravesar el de nuestros hijos/as, sea el que sea.
May love be with you ❤️