Herramientas Importantes

En el momento en que las cosas marchan bien, la empresa se encuentra sana y genera utilidades, más allá de las turbulencias del entorno, es cuando conviene realizar un análisis para detectar los temas que no funcionan adecuadamente y corregirlos. En medio de una crisis, el  análisis y los cambios que se necesitan son difíciles de realizar y de implementar. Para ello es necesario evaluar los números (estado de resultados, estado patrimonial, EOAF, estadísticas de venta) y los procesos. Toda mejora en la productividad impacta en los resultados. Puede implicar un ahorro de tiempos, de personal, disminución de roturas, pérdidas, devoluciones o menor consumo de recursos. Cada sector de la empresa debe ser eficiente y esto tiene que poder medirse. La planificación financiera complementa esta evaluación y propensión a la mejora. Ayuda a maximizar los activos, sobre todo en contextos con tasas de interés elevadas. Permite tener una visión proyectada de ingresos y egresos, que sirve para optimizar el rendimiento de un bien escaso como el dinero, negociar mejores condiciones con los proveedores y prevenir situaciones complejas. En una crisis de la magnitud de la que estamos atravesando, tener la empresa sana económica y financieramente significa tener posibilidades de llegar con vida a la otra orilla y estar en condiciones de poder picar en punta ante cambios en el contexto. No es poca cosa! Este análisis hay que realizarlo de manera continua. Permanentemente hay que medir resultados, situación patrimonial, financiera y productividad. Una última herramienta importante para tener una visión que permita el control de la situación, es una matriz FODA, que se debe revisar con periodicidad. Establecer con claridad y objetividad las fortalezas y debilidades, oportunidades y amenazas permite medir los riesgos de quedar afuera del juego y poder anticiparse y/o detectar situaciones que pueden generar beneficios.