Impacto del trabajo remoto en la salud mental 😰
Nunca antes la separación -trabajo y hogar- había sido tan difusa como en los últimos dos años. Las personas fueron forzadas a adaptarse sorpresivamente al “trabajo remoto” producto de la pandemia, y como efecto, han emergido con fuerza la ansiedad y el estrés.
El estar en casa mientras se enfrenta el malabarismo del trabajo, el cuidado de los hijos, y las finanzas impredecibles, ha tenido un gran impacto en la salud mental de las personas. Muchos trabajadores declaran que este periodo ha sido el más estresante y complejo de toda su vida laboral. Los que más se han sentido afectados son quienes trabajan en su hogar y que, además, deben gestionar la educación online de sus hijos.
Esta nueva forma de vivir y laborar que en un principio prometía muchas bondades ha comenzado a pasarnos la cuenta. Las tensiones y exigencias propias de los trabajos (que ya eran desafiantes) se empezaron a conjugar con otros factores que agregaron demandas adicionales y quitaron horas de descanso. En el trabajo remoto no existen los coffee breaks, conversaciones de pasillo, las horas de colación, ni los “me voy, terminó la jornada”. Tampoco existen los tiempos de desplazamiento que marcaban un quiebre físico y psicológico entre el trabajo y la casa. Los días lucen similares y se funden en un continuo desgastando el bienestar emocional de las personas.
Los principales efectos detectados en salud mental son: el aumento de la sensación de soledad, depresión al bajar las actividades sociales, agotamiento, desequilibrio trabajo-vida familiar y aumento de los niveles de estrés. También se está observando que “el hecho de tener el lugar de trabajo en el hogar” ha generado otros problemas como: aislamiento de amistades, sufrimiento en las relaciones familiares, reducción del bienestar familiar, deterioro de la salud física y privación de sueño.
Es evidente que fuimos sorprendidos por la pandemia y que el proceso de adaptación al trabajo remoto no fue realizado paulatinamente como se hubiese querido. Lo positivo es que a pesar de todos los problemas señalados, muchas personas han asumido esta modalidad como “una nueva normalidad a la que deben acostumbrarse”. El desafío de las organizaciones será tomar un rol proactivo que asista a su fuerza laboral a encontrar el equilibrio entre los límites entre trabajo y tiempo personal, y a apoyar a las personas cuando se sientan sobrepasadas. Sugiero abordar con ellos tópicos asociados a la gestión efectiva del tiempo, la adaptación al cambio, la resiliencia y el manejo de la ansiedad.
Nadie sabe cuando se controlará el COVID-19, pero ya está claro que su incidencia va a afectar la naturaleza del trabajo a largo plazo y, que los aspectos de salud mental van a ser una tendencia a nivel del bienestar organizacional. Resolver estas problemáticas es y será imperioso para las organizaciones: será un requisito para lograr eficiencia y competitividad y, es evidente que si no se toman medidas, habrá un gran impacto en los trabajadores y sus vidas y, consecuentemente, en los resultados.
Locutora en Decidi Emprender
1 añoTe felicito por el análisis de este articulo te mencionare en mi programa de radio el lunes primero de mayo, por radio sintonía 1420am , me puedes escuchar por la www.radiosintonia1420am.com.ve