¿Infierno o paraíso?: Percepción del pasajero sobre el "Aeropuerto 4.0" (Parte I)
Con la aparición del concepto de "Industria 4.0" y las tecnologías que la abarcan (5G, biometría, big data...), ciertos sectores, acuñados como "inmovilistas", han empezado a explorarlas. Tanto la construcción como el sector aeronáutico/aeroportuario, entre otros, han tratado, con mayor o menor fortuna, de buscarles un encaje en el negocio.
En el sector aeroportuario, Estados Unidos lleva tiempo implantando tecnologías de reconocimiento facial en sus aeropuertos. Recientemente en España, Aena e Iberia empezaron a implantar esta tecnología en dos rutas desde el aeropuerto de Barajas. Previamente se había realizado un piloto en el aeropuerto de Menorca.
Pero, ¿está el usuario preparado para esta "invasión de la privacidad"?, ¿hasta qué punto se pueden usar las nuevas tecnologías para la seguridad aeroportuaria? Durante el estudio de un caso de negocio, nuestro equipo de trabajo decidió realizar una encuesta para responder a estas preguntas.
A finales de Febrero, tras la participación de más de 120 personas, nos encontramos que tanto los procesos de aduanas/seguridad como la recogida de maletas resultaban ser los más incómodos para los usuarios. La razón principal: los tiempos de espera.
La seguridad aeroportuaria y las nuevas tecnologías
Uno de los principales objetivos de instalar una nueva tecnología es permitir mejorar los tiempos de espera en el proceso en el que se instala. Buen ejemplo de ello son los sistemas ABC de control de pasaportes, que se empezaron a implantar en España en 2010. Quisimos ver si el usuario estaría de acuerdo con el uso del reconocimiento facial si ello redujera las esperas. El resultado fue bastante positivo.
Fuimos un paso más allá y planteamos un supuesto en el que el aeropuerto, no tuviera barreras físicas. Esta podría considerarse, a día de hoy, como la "última etapa" de la seguridad aeroportuaria, donde mediante cámaras, sensores y lectores se realizaran todos los controles sin que el pasajero se diera cuenta. Como podemos ver a continuación el usuario no se sentiría, hoy en día, seguro y cómodo con esta solución.
Este concepto plantea muchas preguntas entre los usuarios y no les deja totalmente tranquilos. Desde el punto de vista de la seguridad aeroportuaria, el gestor aeroportuario tiene todavía un trabajo importante de promoción del concepto "Aeropuerto 4.0". Debe conseguir demostrar al pasajero que los aeropuertos sin controles físicos son seguros e inocuos.
Para mejorar la percepción de seguridad/comodidad del pasajero, el equipaje de mano debe ser controlado. Una posible solución consistiría en instalar un sistema de escáneres para equipaje de mano a la entrada del aeropuerto, dejándolo para su revisión mientras accede a la terminal. Emularía a los sistemas de maletas "Drop-off" actuales, con la salvedad de que nuestro equipaje de mano sería entregado en un punto dentro de la terminal a nuestra elección (por ejemplo, una puerta de embarque).
Para suplir al escáner corporal la instalación de pasillos unidireccionales equipados con cámaras termográficas (y/u otro tipo de tecnología) podría ser una solución. Los usuarios caminan hasta su destino (la terminal) y pasan, de forma inocua, el control de seguridad. Deberán ser dimensionados para soportar altos flujos de pasajeros en el aeropuerto y la presencia de policía sería necesaria tanto a la entrada como a la salida de estos pasillos.
Estas serían, a priori, un par de posibles soluciones que tendrían cabida en el "Aeropuerto 4.0". Mejorarían la experiencia de los usuarios manteniendo estándares de seguridad altos dentro de la terminal.
Aquí no se acaba todo
Pero, ¿por qué la recogida de equipajes tiene también tan mala fama?, ¿no hay nada que se eche en falta en la mayoría de los grandes aeropuertos? Intentaremos darle solución a estas y otras preguntas en futuras publicaciones. Si aún no has participado y te interesa dar tu opinión, te animo a que rellenes nuestra encuesta pinchando aquí.
Técnico de Ingeniería de producción OSP en Renfe Integria
4 añosInteresante artículo sobre la relación entre seguridad/privacidad de los viajeros en los aeropuertos. ¿Cambiará nuestra percepción en la "nueva normalidad"?