Inteligencia artificial y personalización de la experiencia del candidato en procesos de reclutamiento

Por Lucas Germán Silva , Associate Director - HALO Executive Search

La mayoría de las discusiones sobre inteligencia artificial en el reclutamiento se centran en la eficiencia, pero pocos hablan sobre cómo la IA puede personalizar la experiencia del candidato en las distintas etapas del proceso.

En la fase del primer contacto, puede analizar los currículums o perfiles de los candidatos para identificar automáticamente las coincidencias más relevantes con las vacantes. 

Además, mediante el uso de chatbots, tiene la capacidad de responder preguntas iniciales de los candidatos, y ofrecer recomendaciones personalizadas según sus habilidades y experiencia.

Durante las instancias se selección la inteligencia artificial puede diseñar pruebas y evaluaciones adaptadas a las habilidades específicas del candidato, ayudando a medir mejor su idoneidad para el puesto. 

Incluso, puede llevar a cabo entrevistas preliminares, ajustando las preguntas basadas en las respuestas anteriores del candidato para profundizar en áreas clave.

Para apoyar las acciones de seguimiento y comunicación, la IA puede mantener a los candidatos informados sobre el estado de su solicitud, enviando recordatorios y actualizaciones personalizadas a través de múltiples canales (correo electrónico, SMS, etc.). 

En términos de feedback personalizado, la IA puede generar comentarios personalizados que ayuden al candidato a mejorar.

Finalmente, en la etapa de integración y onboarding, la inteligencia artificial ofrece la posibilidad de implementar un plan de integración personalizado. 

Al unir los datos recopilados durante el proceso de selección, puede ayudar a crear un plan de integración adaptado a las necesidades y puntos fuertes del nuevo empleado.

La IA también puede sugerir programas de formación y desarrollo personalizados que se alineen con las metas profesionales del nuevo empleado y las necesidades de la empresa.

Esta capacidad de customizar el proceso para cada profesional, no solo mejora la experiencia del candidato, sino que también incrementa las posibilidades de encontrar y retener al mejor talento para la organización.