La Actitud frente a la Incertidumbre

Hoy estamos atravesando un momento complejo de gran incertidumbre política, el cual nos afecta e impacta a todos, es por ese motivo que hoy deseo que reflexionemos juntos sobre como nuestra actitud puede hacer frente a esta situación.

Sabemos que la actitud determina la manera en la cual vamos a actuar y por ello, requerimos hoy tomar mucha conciencia sobre ésta.

Lo primero es saber que absolutamente todo lo que está en el futuro es incierto, hasta lo que puede pasar la próxima hora, por lo tanto, debemos saber que estamos habituados a vivir en incertidumbre, lo que sucede es que algunas situaciones nos generan mayor o menor sensación de incertidumbre, por ejemplo, todo aquello que está en manos de otros, aumenta nuestra incertidumbre, pensemos en la noche de bodas, el saber si el novio o la novia se presentará al altar, la exposición de un trabajo importante que lo debe hacer un colega en representación al equipo, la operación que hará un médico a alguien de la familia, etc.

Hoy, la gran incertidumbre política en Bolivia, pasa por múltiples aspectos, no sabemos si los partidos harán alianzas, si los líderes dejarán de velar por sus propios intereses, si se permitirá que vuelva al país el ex -presidente, si los nuevos políticos están lo suficientemente preparados para liderar la nación, si los gobernantes honrarán a su palabra, si se podrá gobernar el país… si y si y si. Pasan por nuestra mente muchas preguntas que hacen crecer la incertidumbre frente a un futuro incierto e impredecible.   

Ante esta condición latente, ¿cómo podemos manejar nuestra actitud, o cuáles pueden ayudarnos?:

1.    Actitud positiva, nos permite pensar haciendo afirmaciones sobre buenos resultados, mirando el futuro con mejores ojos, deseando que las cosas se acomoden o tengan un curso ideal. Esta buena actitud contagia y predispone mejor a las personas, ayudando además a que el resultado sea más favorable. Para lo cual, los comentarios que acompañen esta actitud podrían ser: “El futuro del país será mejor”, “se vienen tiempos mejores”, “tendremos una Bolivia nueva”.

2.    Actitud de confianza, ante una elección presidencial cercana, nos toca saber decidir teniendo en cuenta a aquellos candidatos que demuestren valores, principios, integridad, credibilidad y servicio. Desde esa elección, es necesario dar una cuota de confianza por quien vayamos a votar, pero sabiendo que, como seres humanos, somos falibles, vamos a errar de alguna manera porque somos todos seres imperfectos. Ahora bien, sino confiamos en alguien el país pierde, porque ésta es la clave de toda calidad de relación. Las afirmaciones de confianza están en esta línea: “Tiene buenas intenciones”, “busca lo mejor para el país”, “estará dando su mejor esfuerzo”.

3.    Actitud proactiva -propositiva, esto quiere decir, asumir un rol en donde seamos protagonista del futuro que deseamos, desde nuestro lugar y desde lo que sabemos hacer, en vez de destinar tiempo y esfuerzo en propiciar críticas destructivas, la actitud proactiva - propositiva nos debe llevar a hacer sugerencias, aportar con ideas, realizar iniciativas, descubrir qué podemos hacer para contribuir con una sociedad mejor y actuar en consecuencia. Esta actitud lleva a los ciudadanos a ser más creativos, inmiscuirse en proyectos novedosos que busquen el bien común y la contribución por el bien de todos. Las frases a utilizar son: ”Esto no viene funcionando bien, voy a implementar algo para enmendarlo”, “esta idea aportará a reducir…”, “hoy dedico mi tiempo para implementar esta acción en beneficio de mi comunidad”.

Cuando entendamos que no todo está en manos de unos cuantos, sino que todos desde el lugar en el cual nos encontramos podemos contribuir a construir una mejor sociedad, entonces podremos reducir el sentimiento de incertidumbre porque estaremos actuando para que nuestro presente pueda ser cada día mejor y ayudarnos entre todos a tener la Bolivia que anhelamos.