La Asertividad en la Organización
La comunicación dentro de las empresas resulta vital para la consecución de objetivos, el trabajo en equipo y la calidad y salud de las relaciones interpersonales. Y es aquí donde la asertividad juega un rol esencial, ya que constituye una habilidad social que nos permite expresar nuestros derechos, opiniones, ideas, necesidades y sentimientos de manera consciente, clara y honesta sin herir o perjudicar a los demás.
Es importante entender que la asertividad involucra la tonalidad, la verbalización y la comunicación gestual.
Por ello, establecemos una serie de consejos que harán de ti, una persona asertiva, no solo en el ámbito profesional:
- Repasa todo lo que digas, tratando de encontrar vicios o negativas en la forma de expresarte. Te darás cuenta que errores cometes y los corregirás.
- NO ASUMAS, muchas veces creemos que ya sabemos lo que la otra persona dirá o siente, pero de una u otra forma coartamos su libre expresión y nos generamos una idea errónea.
- No te avergüences de cometer un error. Somos humanos y estos son necesarios para aprender. Lo importante es reconocerlo y ser responsable ante ellos.
- Puedes cambiar de idea, opinión o actuación y eso te ayuda a ser flexible y tolerante para contigo mismo y los demás.
- Aprende a decir ¨NO¨, sin necesidad de justificarte ante los demás, ni sentirte culpable o egoísta.
- Pide ayuda cuando lo necesites, siempre clarificando lo que deseas obtener.
- Si pides algo, recuerda que es posible que te digan ¨NO¨, sobre todo si se trata de algo que no es responsabilidad de la persona. Por tanto, debes ser empático.
- Todos somos diferentes, por ende recuerda siempre aclarar lo que tratas de decir, controlando tus facciones si eres demasiado expresivo y articulando con la tonalidad requerida.
La asertividad comienza contigo y en la medida que lo seas, evitaras malos entendidos, manejaras tus emociones y tendrás un mejor autocontrol. Todo lo anterior se traduce en PRODUCTIVIDAD para la organización.