La convivencia de Marketing y los Recursos Humanos
Actualmente Marketing y Recursos Humanos, no pueden ser vistos como dos áreas con intereses diferentes, por el contrario, comparten un interés en común: La empresa.
Ellos son los nuevos aliados para la gestión y conservación del talento que los responsables del departamento deben conocer y fomentar.
La nueva marca laboral
Gracias a herramientas como el marketing interno, se consigue que los empleados sean los primeros en percibir la filosofía de la empresa, aquellos que recomiendan la marca entre su círculo más cercano.
El marketing de recursos humanos tiene como finalidad, la satisfacción de los empleados, para contar que sean motivados, sientan orgullo y pertenencia, y valoren sus retribuciones – no solo el sueldo – de forma tal que deseen permanecer o ingresar a la compañía, logrando con esto su buen funcionamiento para lograr sus objetivos.
Saber escuchar a los empleados
En cualquier departamento de marketing recomiendan que el escuchar a quien queremos vender es de cualquier campaña el éxito. Recopilando información de manera continua y fomentando la comunicación.
Una buena forma de saber cuáles son estas necesidades de nuestros empleados es realizar encuestas periódicamente. Así, se tendrá información sobre la contratación de los mismos, la satisfacción y su actitud, ya que así se pueden obtener factores claves para lograr que se sientan parte importante en la empresa y vea sus logros como propios.
Los responsables de cada departamento deben conocer a sus trabajadores y sus necesidades, facilitando la comunicación, mostrándose solidarios con los problemas reales de ellos, organizando eventos fuera de la oficina para que las personas puedan mostrarse en otras facetas, ya que esto es fundamental.
Cambio Cultural
Las empresas, los directivos, los gerentes, los responsables del departamento de RH, todos deben optar por el cambio de costumbres para lograr aplicar las técnicas de marketing en el departamento de recursos humanos.
Es necesario el cambio total en la cultura organizativa de las empresas, ya que de preferencia todo aquel que esté al mando de un equipo de personas, debe saber la filosofía de la empresa y aplicar los mismos valores que se quieran destacar con su equipo de trabajo. De nada valdría que la dirección se muestre accesible y que facilite la comunicación si los empleados no pueden dialogar con su jefe.
Se puede afirmar que, sin talentos, no habrá ventas ni servicios sustentables, ya que una marca fuerte siempre atraerá profesionales más codiciados y clientes más rentables. Y porque un servicio de calidad siempre será el mejor argumento para que quien está guste quedarse, y quien venga decida volver.