LA DIGITALIZACIÓN COMO PILAR FUNDAMENTAL DE LA ECONOMIA CIRCULAR
¿Por qué necesitamos apoyar a una economía circular, es decir, animar ese cambio hacia una economía eficiente en el uso de los recursos? ¿Por qué deberíamos pasar de una economía lineal, aquella que hemos estado adoptando durante años, a una economía circular? Si tan buena es la economía circular y son tantos los beneficios y ventajas que nos aportaría ¿por qué no se ha implantado todavía? Y ¿cuál es la razón de ello? ¿Es la digitalización la solución de la economía lineal y el pilar de la economía circular?
La economía circular es una economía eficiente que se basa en la reutilización de esos productos ya usados, en otros nuevos, consiguiendo así el cierre del ciclo de vida completo de los bienes. De esta manera se consigue una sostenibilidad y tiene como objetivo que, el valor de los recursos, materiales y productos dure el mayor tiempo posible en la economía; se consiga una disminución de los residuos, generados tanto por los consumidores como por las empresas y el suministro y la reutilización de materias primas. Además, la economía circular, genera empleo en el sector de la gestión de los residuos.
La economía circular se basa en la ecoeficacia, la cual consiste en diseñar productos que una vez usados, sea fáciles de extraer sus componentes para hacer otros o devolverlo de donde ha salido. Por tanto, el fin de la economía circular es imitar a la naturaleza y conseguir su dinámica, para llevar a nuestro sistema a un desarrollo sostenible. Además, también es partidaria de una economía colaborativa (aprovechar los recursos disponibles). La esencia de esta economía es la reutilización y el compartir. Por tanto, para las empresas es rentable. Según datos de la Fundación Ellen MacArthur y de Comisión Europea, ‘’las empresas de la UE podrían ahorrar anualmente hasta 600.000 millones de euros si cambian a un modelo circular’’. (McArthur, 2017)
El motivo por el que se quiere implantar la economía circular es porque la cadena de valor lineal que seguimos ahora, llamada economía lineal, ha llegado a sus límites. La economía lineal empieza con la fase de extracción de la materia prima, le sigue la fabricación y la utilización y finaliza con la eliminación de los productos. Como podemos ver, no cierra el ciclo de vida de los bienes. Esto, nos ha llevado a un consumo de 16 toneladas de residuos anuales, a nivel europeo, de las cuales, 6 toneladas son empleadas para la fabricación de otros productos. Mientras que el 50% acaba en un vertedero, cosa que lleva a un fuerte impacto medioambiental y perjudica a la salud de todos. Este número aumentará dentro de 15 años, ya que cada vez habrá más población y el número de residuos producidos será mayor todavía.
A continuación, podemos ver una ilustración la cual compara la economía que estamos practicando, es decir, la lineal y, por otro lado, la economía circular:
Son muchos los años que estamos en una economía lineal, pero ha llegado un punto que es insostenible. Se empieza a ver la escasez de los recursos naturales y de los combustibles fósiles, y además se une la gran cantidad de toneladas de residuos que generamos. Todas esas cantidades de residuos, deberían de emplearse para la creación de nuevos productos, pero, ¿cómo lo hacemos?
Para lograr este cambio, tanto las empresas como los consumidores deberían de transformar su mentalidad, es decir, crear desde un primer momento, un producto que pueda ser a posteriori reutilizable o renovable en otro; la creación de una plataforma para la coordinación de recogida de basura y convertirla en una oportunidad para las empresas; concienciar a la gente sobre la gran importancia de este cambio; así como la introducción de la economía 4.0 y del big data.
Por lo nombrado anteriormente, la economía circular parece la cura inmediata de todos los problemas que tenemos desencadenados por la economía lineal y que son los protagonistas de este sistema insostenible. Entonces, ¿por qué no se establece?
La razón por la que no se ha implantado la economía circular todavía es por la gran cantidad de autores que tienen las cadenas, que buscan sacar el máximo rendimiento haciendo uso de la optimización propia, no conjunta y aquí es donde está el verdadero problema, en el modelo de negocio. Digamos que muchas empresas ponen en la teoría pautas para disminuir este desarrollo insostenible, pero no se ponen a la práctica la mayoría de veces; por ejemplo, hay países en los que se separan los residuos y finalmente se acaban juntando todos por el hecho de que no hay suficiente cantidad de basura junta.
Ante este gran problema la clave es la digitalización. La digitalización es una opción hacia un crecimiento más económico (rentable) y más duradero y una manera de trabajar junto con la naturaleza, como se comentaba anteriormente.Según las estimaciones de la consultora Accenture- ‘’El crecimiento sería de 1,36 billones de dólares hasta 2020 solo en las 10 primeras economías del mundo’’. (Ellen McArthur, 2017).
Por eso decimos que la digitalización es el pilar de la economía circular puesto que gracias a la tecnología podremos implantar una iluminación inteligente, el big data, el uso de una logística inversa, así como el uso de energía. Un ejemplo en el que queda bien claro este concepto, es, por ejemplo, la aplicación de teléfono móvil ‘’Wallapop’’, en la que cada persona sube los artículos que ya no quiere, los pone a la venta y los revende. O como ‘’Stuffgstr’’, otra aplicación de móvil, que además de hacer lo que hace Wallapop, los comparte y los recicla. Como podemos ver, se está haciendo uso del término economía circular gracias a la tecnología.
Con la llegada de la digitalización aparecen conceptos como los que se explican a continuación:
Big Data
El big data es un gran conjunto de datos que se caracterizan por las 3V: volumen, variabilidad y velocidad. Es una herramienta muy útil para las organizaciones ya que pueden obtener ideas; identificar problemas; proporciona un punto de referencia a las empresas; hacen que se puedan mover más rápido y más fácil gracias a la búsqueda de tendencias dentro de la inmensa cantidad de datos; las empresas pueden conseguir valora través del big data, como, por ejemplo, reducción de costes o una rápida y mejor toma de decisiones, etc. Por tanto, si aplicamos el big data a la economía circular podremos ver el seguimiento completo que siguen los materiales para así poder aprovecharlos mejor.
Plataformas Colaborativas
La economía circular opta también por el uso de plataformas colaborativas, la cuales hacen que esos recursos que ya existen, no sean eliminados definitivamente y no se empleen más para ningún otro fin. Lo que se intenta con estas plataformas, es alargar el ciclo de vida de los recursos y volver a utilizarlos sin la necesidad de crear más bienes.
Blockchain
Para garantizar 100% que un residuo pueda ser reutilizado de nuevo, hay que saber cuál es su composición, así como su ciclo de vida. Pero saber esto es muy difícil de conseguir, por ello, Totti Könnölä, experto en economía circular, defiende que esto podría cambiar con el ‘’blockchain’’, ya que es una ‘’tecnología que nos proporcionará el libro de vida de cualquier producto con total fiabilidad sin necesidad de intermediarios que nos aportan valor, solo costes’’- Totti Könnölä. (2017).
Por tanto, se apoya por el ‘’blockchain’’ para reciclar.
Matching
También se fomenta la práctica del ‘’matching’’. Consiste en crear una utilización innovadora de los recursos, es decir, convertir la cantidad de residuos desechados en grandísimas oportunidades. Uniendo este concepto a la industria 4.0 podremos implantar la economía circular.
Las intervenciones económicas y sociales a nivel global que puede causar la digitalización, seguida del cambio de modelo de negocio serian:
Por una parte, una disminución de las barreras de entrada y poniendo a las empresas en el peligro con el término ‘’disrupción digital’’, empresas que antes no eran potenciales pueden destronar a las que siempre han sido poderosas, ya que, ningún competidor es pequeño. Las empresas tradicionales y que no han nacido en la era digital, deben cambiar, si no quieren verse abatidas por las que sí que han nacido en esta era digital.
Otro problema que presenta este nuevo cambio, estaría también relacionado con la ‘’disrupción digital’’, puesto que lleva a la aparición de empresas que se hacen con todo o la mayor parte del mercado, es decir, que tiene el poder absoluto.
Y, por último, la digitalización puede llevar a una situación de desigualdad, lo que lleva a una mayor inestabilidad social y política, esto se debe al desacoplamiento en la economía digital.
Por eso, el sector público debe facilitar en gran medida la implantación de este gran cambio. Debe dirigir y estimular la afiliación de la economía circular, través de políticas medioambientales, así como disminuir las dudas legales acerca de estos temas. Por ejemplo, debe de impulsar nuevas posibilidades tecnológicas en vez de inmovilizarlas o bloquearlas. Si todos adoptamos un proceso de aprendizaje y poco a poco nos vamos adaptando, pero siempre en cambio continuo, y verla como una oportunidad y saber rentabilizarla, podremos así implantar la economía circular y digital.
La economía circular es la nueva revolución y la solución de cara al futuro para conseguir la sostenibilidad. Esta creará un aumento de riqueza y un cambio en nuestra mentalidad, con el fin de generar nuevas oportunidades de crecer, basadas en el balance económico, social y medioambiental con ayuda de la digitalización.