La digitalización en la logística, es cosa del pasado

Como sabemos en una cadena de suministro, la logística sirve para la planificación, gestión y control del almacenamiento de bienes, así como de los servicios necesarios y el flujo de información generada, que va desde el punto de origen del producto hasta el punto de consumo, y cuyo objetivo es cubrir la demanda de los consumidores.

Si hablamos de quien consume estos servicios logísticos, hablamos de una persona que tiene una serie de características como:

- Libertad. Quiere y debe elegir entre todas las opciones disponibles en el mercado.

- Consumo de datos. Los datos en realtime es cosa del pasado, y además el consumo de los mismos "debe" ser proporcionado en diferentes tipos de dispositivos, principalmente en móviles.

- Exigencia. La comparación continua es algo diario y muy común. Por ello aquí prima aquello del que primero pega, pega dos veces.

- Trasparencia. La empresa tiene que dar a conocer valores, trayectoria y fines y es el usuario quien decide guiarse en su opción de compra o no.

- Innovación. Adaptación a un mundo muy cambiante y más aún en aspectos innovadores como es la tecnología

Y si hablamos de la situación actual de las exigencias en el sector logístico, podemos hablar de la demanda de plazos de entrega fiables, amplios horarios de servicio, calidad en la entrega, seguimiento del pedido en tiempo real, flexibilidad y personalización del servicio, servicio ágil de devoluciones, y aunque podemos decir que muchas compañías lo están logrando, muchas otras les queda aún mucho por hacer, y son las primeras, las que han conseguido una mayor consolidación en el mercado y por lo tanto, un avance competitivo basado en la digitalización de sus procesos.

¿Qué retos digitales y tecnológicos tiene actualmente la logística?

• Digitalizar procesos diarios. Actualmente en sectores logísticos como por ejemplo el portuario existe un gran reto a la hora de automatizar procesos e implantar software que digitalicen el día a día. Éstas aplicaciones suelen ser escalables empezando desde el atraque hasta el puerto completo, arrojando una cantidad de datos analizables y por lo tanto medibles y mejorables.
• Gestión de flotas. Independientemente si hablamos de buques, camiones, coches, etc. el éxito es la entrega de mercancía, o llegada de pasajeros y para ellos actualmente existen una infinidad de sistemas de cálculo de rutas, optimización de combustible, medición de tiempos, previsiones de ETAS, de meteorología, etc. la implantación digital de éstos procesos forma parte de la transformación digital logística.
• Aumentar la experiencia digital del cliente. Os podéis imaginar como cliente todo lo que conlleva, ¿verdad?, seguimiento de paquetes en realtime, fecha exacta de entrega, auto-shipping, etc.
• Culturizar a la propia compañía. Los procesos de cambio empiezan desde la propia casa hacia fuera y es importante destacar que no sólo con palabras, sino con hechos. La motivación de los empleados es clave, está demostrado que aumenta la competitividad y el bienestar de los propios empleados, y todo ello lógicamente revierte en un mejor clima laboral, con todas sus consecuencias adyacentes.
• Tecnología. Sin duda el principal reto y oportunidad al mismo tiempo para el sector logístico en el ámbito tecnológico vendrá de la implantación del internet de las cosas o IoT, la interconexión digital de objetos cotidianos a través de internet.

No existe ningún atajo para la digitalización, requiere inversión e investigación, analizar procesos y automatizarlos, implantando softwares que permitan la automatización y el análisis de datos, así como la visualización de kpis que permita la toma de decisiones de forma proactiva, evitando informes manuales, tediosos y fuera de plazo para poder maniobrar y evitar situaciones indeseables.

La buena noticia es que existe muchas posibilidades para automatizar, digitalizar e innovar en el sector logístico, ya sea en el marítimo, terrestre o aéreo, lógicamente requiere inversión, y aunque es recuperable la madurez que está adquiriendo el mercado hace que pase a ser una exigencia.