La Gamificación en nuestro día a día
Cuando somos niños nos pasamos la mayor parte del tiempo jugando, y sin saberlo, estamos aprendiendo y adquiriendo habilidades que de otra forma no podríamos, como relacionarlos con las personas, el respeto a las normas y reglas, el avanzar sin tener miedo, competir con responsabilidad y ética, colaborar con los demás, entre muchas otras cosas.
A lo largo de la historia, el juego ha evolucionado con el mismo progreso del ser humano, desde los juegos infantiles y espontáneos de nuestros niños, pasando por juegos de mesa, juguetes de todas las clases, formas y estilos, hasta los más recientes videojuegos. Sin embargo, el objetivo básicamente siempre ha sido el mismo, entretener, educar y ser una fuente de motivación.
Bajo este escenario, en los últimos años se ha desarrollado un nuevo concepto denominado “Gamificación”, que es definida como una metodología que se orienta a la motivación de los participantes mediante el uso de mecánicas y dinámicas de juegos en contextos no lúdicos, con la finalidad de adquirir nuevos conocimientos, perfeccionar una habilidad, recompensar comportamientos, entre otros objetivos.
La Gamificación logra motivar a las personas, generando compromiso, a la vez que aumenta su autoestima y las ganas de superación; utilizando para ello, diferentes técnicas y dinámicas que han sido extraídas de los juegos para el logro del objetivo buscado teniendo en cuenta la “historia” que comuniquemos.