La inequidad nace en las oportunidades de educacion
En Colombia el futuro de nuestros hijos no está determinado por su capacidad, sino por el poder económico de sus padres.
Inequidad se puede definir como la diferencia de oportunidades entre distintos grupos. Esto se puede presentar en la prestación o acceso a bienes y servicios como vivienda, salud educación etc.
Colombia es el segundo país con mayor inequidad en la distribución de los recursos económicos en Latinoamérica y esta brecha crece día a día. La inequidad es en buena parte la generadora de problemas estructurales de nuestra sociedad como la violencia (guerrilla, crimen organizado y bandas delincuenciales), embarazo juvenil, actividades ilícitas etc.
Para poder combatir esta inequidad debemos empezar por garantizar igualdad de oportunidades a nuestros ciudadanos y esto inicia con una cobertura nacional de educación con altos estándares de calidad.
En Colombia el futuro de nuestros hijos no está determinado por la capacidad, dedicación y esfuerzo de cada uno de ellos, sino por la capacidad económica de sus padres. La diferencia entre un kínder con 10 alumnos, profesores capacitados, instalaciones que cuentan con la infraestructura física y tecnológica de punta vs un jardín del ICBF es de 1.3 millones de pesos por alumno. De entrada, se puede descartar a por lo menos el 85% de los posibles alumnos.
El 15% de los alumnos restante (intuyo que es menor) que cuentan con los recursos, ingresan a colegios privados bilingües, con grandes instalaciones, computador por alumno, transporte escolar y programas deportivos entre otras ventajas. El costo mensual de estudiar es estos lugares de privilegio inicia en 2 millones de pesos y puede llegar a 3.5 o 4. Son estos estudiantes los que sacan los mejores puntajes del ICFES y claro, cuentan con la capacidad económica para ingresar a la Universidad de los Andes, La Javeriana, La Sabana donde el semestre (realmente 16 semanas) están arriba de los 10 millones de pesos.
Dirán algunos de ustedes que programas como Ser Pilo Paga, apoyan a los estudiantes que no tienen recursos. Es cierto, sin embargo, se debe ser el mejor para poder obtener este beneficio, mientras que si se cuenta con el dinero esta condición no es necesaria.
Al terminar su ciclo universitario, el alumno bilingüe, graduado de una universidad considerada “top” tendrá acceso a los mejores cargos con sus respectivos salarios, generando un nuevo ciclo donde sus hijos podrán, gracias a la capacidad económica de sus padres, obtener la mejor educación. El resto de la población tendrá que ingeniárselas para lograrlo.
Una educación de calidad para todos los colombianos no solo beneficia a los que actualmente no tienen acceso a ella. El surgimiento de una competencia sana en términos educativos entre la población tendrá como consecuencia un mejor desempeño de toda la población en las distintas pruebas de admisión y posteriormente de ingreso al mundo laboral. Como resultado tendremos un mejor promedio en las distintas evaluaciones que se realizan, y de poder mantener esa tendencia, lograremos mejorar el nivel de competencia del país en la región.
Sera la capacidad, dedicación y esfuerzo de cada uno de los individuos lo que defina el futuro de las generaciones venideras.