¡La paz en el mundo y en nuestro país se viene deteriorando¡ ¿Qué mundo estamos dejando a nuestros hijos, si pensamos que no depende de nosotros ?
El Instituto para la Economía y la Paz (IEP) recientemente publicó la 16ava edición del Índice de Paz Global, en el cual ranquea a 163 países que representan el 99.7% de la población mundial. Esta medición se viene realizando desde el año 2007 y evalúa 23 indicadores cuantitativos y cualitativos.
Desafortunadamente los indicadores arrojan, que los países tienden a deteriorarse mucho más rápido de lo que mejoran y en los últimos 14 años, la paz en el mundo se ha deteriorado; de los 163 países, 84 países reportaron deterioro, al igual que 15 de los 23 indicadores.
Europa es la zona más pacífica del mundo, en donde se ubican 7 de los 10 países más pacíficos. El país más pacífico es Islandia, posición que mantiene desde el año 2008 y por 15avo año consecutivo,Afganistán es el país menos pacifico del mundo.
México se ubica entre los países con peores índices de paz a nivel global, ocupamos la posición 137 de 163; en nuestro país, la paz se ha deteriorado 17% en los últimos 6 años.
Este informe, al igual que la Evaluación Nacional de Riesgos 2020, coinciden que la delincuencia organizada es el factor que representan la mayor amenaza en el país, toda vez que la violencia que vivimos, está vinculada a los crímenes de la delincuencia organizada por la expansión territorial rápida y violenta de cárteles más grandes, predominantemente el Cártel Jalisco Nueva Generación, así como la proliferación de grupos delictivos más pequeños y la diversificación de la actividad delictiva, así como también han habido cambios en el tipo de drogas que las organizaciones delictivas han movido a nivel internacional en la última década, ya que el tráfico de marihuana ha caído en picada, mientras el tráfico de fentanilo ha aumentado. Entonces es así que la violencia tiende a ser más intensa en donde múltiples organizaciones delictivas compiten por el territorio y las rutas clave del narcotráfico.
Una de las conclusiones del informe es que las estrategias efectivas de construcción de paz deberán considerar múltiples dinámicas e interacciones, y combatir la corrupción y la ineficiencia empresarial, gubernamental e institucional, no solo reduciría la impunidad y los delitos, sino que también liberaría fondos y recursos para inversiones muy necesarias.
Sin duda estamos viviendo tiempos sumamente complejos a nivel global, por ejemplo: la alta inflación que provocan deterioro en la calidad de vida, estados de ánimo depresivos, incremento en fraudes, mercados más complejos para las empresas, un mundo más regulado, al menos en materia sanitaria y sin duda fiscal, pero algo que preocupa, es que no podemos observar la violencia como “normal” y así como con la pandemia, parecería que hemos aprendido a vivir con ella.
Recientemente he estado publicando videos en TikTok e Instagram, relacionados con la prevención de lavado de dinero y es sorprendente la cantidad de comentarios de los jóvenes, que observan que es “normal” el lavado de dinero, culpan al gobierno de este mal, consideran que los bancos están coludidos y ante la pregunta ¿venderías un inmueble o un auto, aunque sepas que te pagan con dinero lavado? la respuesta es por supuesto, las ventas y el dinero, ante todo.
Es preocupante la falta de integridad de muchas personas, la falta de discernimiento entre lo correcto y lo incorrecto.
La complejidad que estamos viviendo, de ninguna manera justifica esta falta de ética. Siempre he pensado que somos parte del problema, pero también de la solución, cada uno de los individuos de este país, tenemos la capacidad de “hacer lo correcto” y solo así, hacemos la diferencia. ¿Qué es hacer la diferencia? Desde mi punto de vista, dejar de dar mordidas a los policías de tránsito, dejar de saltarnos la fila, dejar de pensar que nuestras desgracias son culpa del gobierno y empezar a actuar con discernimiento, haciendo lo correcto, en todo momento, aunque nadie me observe.
--
2 añosQue interesante frase, que siempre me he hecho desde niño, Mara es Lapidario y lleno de desbordante verdad, Porque cuando estamos en otro país, especialmente Canadá y Estados Unidos de América, no tiramos basura, no pisamos el césped, no manejamos a exceso de velocidad, no conducimos después de beber alcohol, no nos estacionamos en zona prohibida, traemos el cinturón, no tiramos chicle, pagamos si pagamos las multas de transito y administrativas sin recato sin trampa, allá si pagamos impuestos, y respetamos la figura de la Patrol, FBI, Cia, Ejercito, además en condominio pagamos la cuota, respetamos las aéreas de uso común, no fumamos donde no se debe. Mi conclusión es, allá hacemos lo que debemos hacer y aquí en nuestro país se hace lo que puede y por ello nos olvidamos de algo fundamental para vivir sin violencia y como buena sociedad, de nuestras obligaciones y derechos que debemos cumplir y exigir respectivamente en la cultura de legalidad. Recuerdo las letras de el ilustre Rudolf von Jhering en su texto La Lucha por el derecho. Saludos
Abogada Especialista en Derecho Informático y Nuevas Tecnologías
2 añosHola Mara, cordial saludo, concuerdo contigo en muchas cosas que relacionas, no obstante, y en mi opinión personal considero que la paz no se construye de la noche a la mañana, se da paulatinamente y el cambio empieza por uno mismo, la falta de empatía nos está destruyendo y la salida más rápida es culpar al gobierno, vivo en un país que lleva mas de 50 años de conflicto y a pesar que no hemos visto ciudades destruidas como en otros lugares dl mundo aún nos falta mucho por aprender y ayudar al cambio. Me gustó mucho tu articulo, éxitos y gracias por compartirlo.
Director de Oficina en BBVA Research
2 añosEstimada Mara, que alegría saludarte y deseo te encuentres muy bien en compañía de tu familia. Sin duda alguna tienes razón en lo que comentas en tu publicación, dado que la violencia se ha apoderado de nuestras Ciudades y no vemos por donde esto mejore. Estoy consiente que desde mi trinchera puedo colaborar en beneficio de la no violencia, proporcionando educación y valores desde mi casa y en los grupos donde tengo injerencia. Gracias por compartir... Efra