La República Digital
Por Aaron Ballesteros
Refundación de la República en la Era Digital
Durante mi carrera universitaria, solía escuchar debates apasionados sobre la refundación de la República. Sin embargo, al comenzar mi carrera profesional, la narrativa ha cambiado a la modernización del Estado, dejando de lado la verdadera revolución del siglo XXI: la República Digital.
La tecnología digital es ahora el mejor aliado para lograr la refundación de la República. La agilidad que brinda la tecnología es el impulso cultural para el cambio y satisface las nuevas demandas del mercado de servicios digitales a nivel mundial.
En Perú, los esfuerzos para lograr una República Digital siguen una estrategia normativa que fortalece las viejas formas de gestionar la cosa pública, en lugar de adoptar un enfoque basado en la tecnología.
Según la Organización de las Naciones Unidas (2020), el índice de gobierno electrónico a nivel mundial es liderado por países como Dinamarca, República de Corea, Estonia, Finlandia y Australia, mientras que Perú se encuentra en el lugar 71.
Los factores clave para lograr una confianza digital incluyen un acuerdo político para adoptar la tecnología, un contrato digital con los ciudadanos que brinde certeza jurídica sobre los actos digitales del Estado, identidad digital, plataformas de intercambio de datos y una arquitectura digital que ponga al ciudadano como protagonista.
La confianza digital es fundamental y debe estar inmersa en un entorno de ciberseguridad que garantice la autenticidad, la firma digital y la verificación en línea de los datos intercambiados entre sistemas.
El contrato digital es el nuevo vínculo con los ciudadanos y debe incluir derechos digitales, una institucionalidad sólida y servicios de conectividad. Además, la cultura ágil reemplaza el modelo tradicional de mando y control, promoviendo equipos auto-gestionados y emprendimiento dentro de las entidades públicas.
En el mundo digital de hoy, es esencial que los gobiernos evolucionen para mantenerse al día con las necesidades y demandas de sus ciudadanos. Aquí presentamos los tres principios clave para construir una República Digital eficiente e innovadora.
Principio 1: Cultura de Agilidad y Emprendimiento
La experiencia de Estonia, un país líder en digitalización, nos muestra cómo la reducción de la burocracia y la promoción de una cultura emprendedora desde el inicio pueden impulsar la innovación y acelerar la construcción de una República Digital. Las metodologías ágiles aumentan la libertad y el empoderamiento de los actores involucrados, mientras que un exceso de regulaciones y leyes puede obstaculizar cualquier iniciativa emprendedora.
Principio 2: Solicitar Información al Ciudadano Digital Una Sola Vez
El gobierno debe estar en capacidad de solicitar información al ciudadano digital de una sola vez, lo cual requiere de sistemas de información que intercambien datos a través de estándares internacionales de interoperabilidad. Esto permitirá en algún momento, intercambiar datos con cualquier otra República Digital, tanto a través de entidades públicas como privadas.
Principio 3: Estándares de Interoperabilidad
Los sistemas de información deben ser capaces de intercambiar datos mediante un estándar de interoperabilidad acordado y utilizado por decisión propia de las partes, no por una obligación legal. Actualmente, Perú cuenta con una plataforma de interoperabilidad llamada PIDE, pero su enfoque se orienta principalmente al intercambio de información entre personas y trámites manuales de solicitud de uso. Para lograr una República Digital efectiva, es necesario adoptar estándares internacionales de interoperabilidad que permitan el intercambio de datos entre sistemas de información, firmados digitalmente y verificados por una autoridad certificadora.
A pesar de que algunos puedan argumentar que no es el mejor momento para estas iniciativas, la pandemia ha demostrado ser un catalizador social para el avance hacia la digitalización. Seguir postergando la digitalización con enfoques parciales tendrá un impacto directo en la educación, salud, seguridad y economía. Por lo tanto, es fundamental adoptar estos principios clave
Para lograr una República Digital en Perú, es esencial una arquitectura digital sólida que garantice acceso a servicios digitales confiables para los ciudadanos.
Pilares para el tránsito a la República Digital
Para fortalecer la transición hacia una República Digital, es esencial enfocarnos en tres pilares fundamentales:
Soluciones futuristas: Debemos buscar soluciones innovadoras y vanguardistas, incluso aquellas que en la actualidad puedan parecer utópicas, pero que serán clave para avanzar hacia un futuro digital.
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Arquitectura universal: La arquitectura de la República Digital debe ser universal y estar diseñada para satisfacer las necesidades de toda la población, independientemente de su ubicación geográfica o estatus social.
Descentralización digital: Es importante que cada sector y cada nivel de gobierno tenga un plan digital propio y descentralizado, con el objetivo de lograr una transformación efectiva y sostenible a largo plazo.
En definitiva, el tránsito hacia una República Digital debe ser visto como una estrategia de avanzada, que nos permita dar un salto al futuro en lugar de limitarnos a simplemente mejorar procesos y modernizar el estado con enfoques obsoletos.
Preguntas frecuentes
En este punto, comparto algunas preguntas que recibo con frecuencia y algunas respuestas que pueden ser utilizadas como impulsores para cualquier iniciativa de gobierno digital basada en conocimiento técnico especializado y experiencia directiva en entidades públicas y privadas. Espero también contar con tu contribución para comenzar a construir la República Digital del Perú.
¿Qué estrategia se debe utilizar para movilizar y convencer a actores políticos, ciudadanos y asignar los recursos necesarios para crear esta República Digital?
Respuesta: La mejor estrategia es el uso de narrativas o relatos bien elaborados. Estos deben ser segmentados considerando la cultura de cada grupo, desde los nativos digitales hasta los "baby boomers", mostrando siempre nuevas formas de hacer las cosas y basándose en ellas para construir acuerdos.
¿Cómo podemos asegurar que se mantenga una estrategia a largo plazo para mantener políticas en los ámbitos de confianza digital y ciberseguridad?
Respuesta: Al elegir estándares de clase mundial evitaremos discutir propuestas individuales y cada vez que haya un cambio de gobierno, no tendremos que volver a empezar desde cero. Por ejemplo, para la protección de datos personales podemos utilizar el Reglamento General de Protección de Datos europeo (GDPR), para el intercambio de datos entre sistemas de información podemos utilizar X-Road, y para la ciberseguridad podemos utilizar NIS, entre otros.
¿Cuál sería el elemento fundamental que debería incluirse en la Constitución Política para impulsar el desarrollo de la República Digital?
Respuesta: Un elemento fundamental es el Derecho Digital. Esto incluiría:
¿Cómo se puede mejorar la confianza en decisiones automatizadas que utilizan Inteligencia Artificial?
R. La responsabilidad final de la decisión recae en la persona encargada del proceso, pero los desarrolladores de software tienen un papel importante en garantizar la conducta ética y en proporcionar una explicación clara de cómo funciona el algoritmo.
¿Cómo valorar el talento humano que teme ser reemplazado por la tecnología?
R. En un mercado globalizado que valora cada vez más las habilidades técnicas, es importante que los expertos obtengan certificaciones internacionales en áreas como la ciberseguridad, la gestión de datos y las metodologías ágiles. De lo contrario, corren el riesgo de quedarse atrás en la nueva economía digital.
¿Qué opinión tiene sobre la Transformación Digital y las normas en Perú?
R. La Secretaría de Gobierno y Transformación Digital está trabajando en la generación de leyes y normas en línea con las expectativas técnicas, pero estas pueden no estar al nivel de los estándares internacionales en materia de intercambio de datos y ciberseguridad. Es necesario invertir en políticas públicas que promuevan la innovación en lugar de simplemente seguir los moldes de la regulación analógica.
¿Deberíamos establecer acuerdos con organizaciones globales públicas o privadas con experiencia en la digitalización de servicios?
R. La digitalización de servicios requiere una gran inversión en tecnología, por lo que es más conveniente realizar licitaciones internacionales con cláusulas anticorrupción y condiciones para la continuidad de los servicios y la migración a otro operador cuando concluya el contrato. También podemos considerar acuerdos con empresas público-privadas, como el Instituto Nórdico de Soluciones de Interoperabilidad (NIIS), que tienen amplia experiencia en la implementación de gobiernos digitales en todo el mundo.