La Segunda Juventud. Una estrategia eficaz para ir de los 45 a los 65 años.
El tiempo pasa si ve la derrota. Así es. A partir de los 45 años, el tiempo comienza a pasar a toda velocidad, si no te conduces con cuidado. Los 45 marcan, aproximadamente, la mitad de tu vida laboral: llevas 20 años trabajando y te quedan otros 20 más.
En este momento y sin darte cuenta comienzas a estar en la línea de salida. Si no haces nada, te esperan unos 10 años de decadencia hasta salir dolorosamente despedido. Pero si te molestan las nuevas incorporaciones, su juventud, su estilo, entonces te quedan muchos menos años.
La gente siente que su empresa se comporta injustamente al prescindir de sus mayores y por eso se enfadan con ella. Pero las empresas no son tan tontas como para renunciar a los mejores, perder talento o experiencia. Ni mucho menos. Simplemente se liberan de la gente que no va con su tiempo.
¿Qué hacer? Algunas personas, muy pocas, me lo han preguntado y como consejero debo tener clara mi respuesta. Mi foco, como no puede ser de otro modo, es estar con las personas ofreciendo estrategias viables, útiles y seguras, que les permita optar a un futuro mejor, alejado del sufrimiento.
La estrategia que te propongo para esta segunda mitad de tu vida profesional, y a la que me gusta llamar Segunda Juventud, es la siguiente.
1º. A partir de los 45 años acércate a las personas más jóvenes y talentosas que se están incorporando en la empresa, ayúdalas, sé su consejero, su mentor, hazte imprescindible para ellas. Conviértete en un referente, haz que te citen.
2º. A los 50 conviértete en un conocedor e impulsor de las nuevas tendencias en tu negocio y profesión, defiéndelas, busca aliados, sé activo y haz que la gente piense y actúe. Únete al futuro prometedor que espera a tu empresa. Haz que recurran a ti, que te pregunten.
3º. A los 55 años habla con tu jefe y proponle una reducción simbólica y lógica de tu salario (así como suena, sin dañar tu estilo de vida). Tus ambiciones han disminuido y ya no necesitas tanto dinero. No es la tan manida reducción de jornada, lo que haces es influir para ser percibido de un modo diferente. Comienza a vivir mejor, a ser un mejor profesional y deja de buscar el poder. Ayuda a los más jóvenes, acompáñales en su ascenso hacia el poder, conviértete en su consejero. Haz que te admiren por tu moralidad y tu virtud.
4º A los 60 reduce drásticamente tu presencia en la empresa y dedícate a trabajar con los más jóvenes, conviértete en el eslabón perdido que une las diferentes generaciones, visiones de la vida, del negocio. Arregla las cosas para trabajar en nuevos proyectos fuera de tu empresa. Conviértete en un gurú.
5º Ya has llegado a los 65. Eres respetado, considerado e incluso admirado ¡Enhorabuena! Ahora es el momento de preparar tu legado, tanto en tu empresa como en tu vida. Te quedan 15 o 20 años o más de una vida sana y reconfortante. Disfrútalos.