La trampa de la contraoferta: ¿Realmente es un premio o un riesgo?
Cuando un director o gerente comunica su intención de dejar la empresa, es posible recibir una contraoferta tentadora: un aumento de sueldo, un ascenso o beneficios adicionales. Sin embargo, esta "victoria" puede convertirse en una condena profesional.
De acuerdo con un estudio de Gartner, el 39% de los empleados que aceptaron una contraoferta terminaron dejando la empresa en menos de un año. Además, investigaciones de Harvard Business Review indican que el 50% de quienes aceptan una contraoferta vuelven a buscar un cambio en los siguientes 24 meses.
Estas cifras globales encuentran eco en el mercado mexicano, donde aceptar una contraoferta rara vez soluciona las verdaderas causas del descontento.
El contexto en México.
Un artículo de Hays México señala que el 80% de los empleados que aceptan una contraoferta terminan saliendo de la empresa en menos de seis meses, y el 93% lo hacen antes de los dieciocho meses. Además, datos de Robert Walters indican que el 66% de los empleados que aceptaron una contraoferta abandonaron la compañía antes de los tres años posteriores.
Estos datos reflejan que las promesas hechas en medio de la presión rara vez abordan los problemas estructurales del entorno laboral. Por ello, aceptar una contraoferta puede ser una decisión que, a mediano o largo plazo, afecte la trayectoria profesional de un director o gerente.
Un ejemplo.
Asesoré a un director comercial que recibió una oferta para liderar una región clave en otra compañía. Al comunicar su salida, su empleador le ofreció un aumento del 20% y la dirección de un proyecto estratégico. Tentado por la oferta, decidió quedarse. Un año después, me buscó nuevamente. Aunque su salario había mejorado, el entorno laboral seguía siendo el mismo: alta rotación, falta de apoyo del equipo y un liderazgo poco receptivo. Además, la percepción de su lealtad estaba comprometida, lo que limitó su participación en proyectos clave. Finalmente, decidió buscar un cambio definitivo, pero ahora enfrentaba mayores retos para justificar su salida.
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El precio de aceptar una contraoferta.
Estrategia detallada para enfrentar una contraoferta.
Afrontar una contraoferta requiere madurez y claridad. No es solo una decisión financiera, sino un momento para redefinir tus prioridades y proyectar tu carrera hacia el futuro que deseas. Tómate el tiempo necesario, apóyate en expertos y decide con estrategia.
Aceptar una contraoferta puede parecer la opción más cómoda en el corto plazo, pero a menudo tiene costos ocultos para tu carrera. Pregúntate: ¿Quieres quedarte donde estás por comodidad, o prefieres construir una trayectoria más sólida en un lugar que valore tu potencial desde el inicio?
En Recolócate, hemos asesorado a directores y gerentes en situaciones similares. Si estás enfrentando una contraoferta y necesitas claridad para tomar la mejor decisión, contáctanos. Juntos trazaremos el camino ideal para tu futuro profesional.
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3 díasMuchas gracias por tu mención Jacobo Argüelles Madrigal abrazo.
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3 díasSiempre con grandes aprendizajes con Rene Marín Uribe y Recolocate.net gracias amigo!