Las malas decisiones de gestión y su influencia en el Valor empresarial.
A lo largo de la vida de una empresa las decisiones que adoptan los directivos/gestores de la misma, afectan de forma ineludible al valor de la compañía (como no podría ser de otro modo). Ahora bien, decisiones de gestión hay muchas y sería complicado agruparlas todas (aunque fuese por categorías) en un solo artículo. Sin embargo, existe una materia que resulta especialmente significativa a la hora de afirmar que un gestor actúa de forma “racional” con respecto a la creación de valor empresarial. Y esa no es otra que la observación del destino que dan los directivos a la liquidez “sobrante” generada por el negocio, en función del ciclo vital en que se encuentre la empresa. Para ello, y simplemente a modo de recordatorio, comentar que en las primeras fases de todo ciclo empresarial (Desarrollo y Crecimiento) la compañía es una “máquina de absorber” dinero, de tal modo que este no “sobra” precisamente y se hace necesario pedir grandes cantidades a bancos e incluso accionistas (vía ampliaciones de capital). En las siguientes fases (Madurez y Declive) la situación ya es diferente. En este caso, el crecimiento ya está ralentizado y se genera más dinero del necesario para el desarrollo normal de la empresa. Será entonces en estas últimas etapas donde deberemos fijar nuestra atención para averiguar qué hace la compañía con el dinero (a qué destinos lo dirige).
Antes de seguir adelante, una apreciación. Estos ciclos, que parecen tan evidentes sobre el papel, no lo son tanto en la realidad, puesto que a menudo acostumbran a enlazarse unos con otros, de modo que tras un período de “Declive” no es sorprendente que aparezca una nueva etapa de “Desarrollo” y así sucesivamente.