Lecciones de vida que me dio el fútbol
Me apasiona el futbol, aunque no me hubiera lastimado la rodilla difícilmente hubiera llegado a profesional. Sin embargo el futbol me dio tanto que no puedo estar más que agradecido por todo el tiempo que lo he practicado, aunque ahora en veteranos sea más amor al deporte que justa competitiva.
Aprendí que en la vida el talento no es suficiente, supere a gente mucho más hábil que yo en la carrera por un lugar en la selección representativa de la escuela y lo hice a puro esfuerzo, era el primero en llegar al entrenamiento y el ultimo en irme. Mientras mis compañeros no dejaban pasar una fiesta yo me cuidaba y entrenaba. Después de que el entrenamiento terminaba todavía me quedaba a practicar tiros a portería. Nadie me regalo el puesto yo lo obtuve como consecuencia de mi esfuerzo dedicado, enfocado y constante.
Entendí que en la vida nadie puede ganar el partido solo, necesitas rodearte de gente talentosa, que comparta tú mismo ideal y tenga el mismo objetivo. Cada uno con habilidades propias, puestas sin embargo al servicio del equipo para funcionar mejor. Sinergia fue pues un término que aprendí en la práctica, mejor dicho en la cancha.
Una gran enseñanza fue que solo hay tres resultados posibles, victoria, empate y derrota. Que ninguno de ellos dura para siempre. Es pues necesario vivir en el presente, en el entrenamiento del día a día, que es como se generan las victorias del mañana. Era en la pretemporada y sus rigores donde nos preparábamos para el torneo que íbamos a afrontar. Tuve la dicha de ganar varias finales y también perdí alguna, aprendí que no éramos los mejores en la victoria ni los peores en la derrota.
Y la mayor enseñanza es que en una cancha de futbol nada importa tu raza, credo o posición social los que realmente amamos el futbol entendemos que es un simple juego 22 extraños en comunión con el balón.
Todos estos conceptos no los aprendí en libros de superación personal, no los curse en la escuela. Todo cuanto aprendí sobre estos temas me lo enseño en la práctica y de forma interactiva el futbol, como no voy a ser un apasionado del futbol.
Ahora tengo la oportunidad de transmitir a mi hijo esas bases que le servirán en un futuro, que forjaran su carácter, aunque él tenga muchas condiciones como lo han dicho sus entrenadores no pretendo realizar mis sueños a través de él. Lo importante es que a él le gusta el futbol y se esfuerza por ser mejor jugador cada día.
Así que yo solo seguiré en mi papel de llevarlo a sus entrenamientos y ser su fan número 1 y que el futbol le enseñe y determine hasta dónde quiere llegar. Por esa pasión es que ayudare a él y a cuantos pueda a lograr cumplir su sueño!