Los 5 mayores sacrificios que hacen los emprendedores

Hay muchas cosas que me encantan de hacer una startup.

Valoro la libertad, por encima de todo, disfrutar de la vida, y las startups son realmente liberadoras.

Tu tiempo es tuyo, lo gastas en actividades inherentemente creativas, y no tienes que perder nada de eso escuchando el lenguaje comercial o la jerga en reuniones interminables.

Puedes ser tú mismo, ser valiente y recibir un pago por hacerlo.

Disfruté trabajando en el mundo corporativo y público, conocí a personas excelentes y tuve buenas experiencias. Pero hay una sensación real de flexibilidad y control con las nuevas empresas que no obtienes con un trabajo tradicional.

No te dejes engañar, es trabajo dirigir una empresa. MUCHO. Todavía te despiertas en el lado equivocado de la cama y no quieres ir a trabajar. Pero al final, es fácil motivarte porque estás fundamentalmente inspirado.

Probablemente estés pensando: ¡ suena genial! Dónde firmo?

Bueno, antes de dejar tu horario de 9 a 5, déjame contarte sobre lo que los empresarios no tienen. Porque a cambio de la flexibilidad y la inspiración, hay algunas cosas que renunciar.

1. Tranquilidad

La mayoría de los días me despierto emocionado.

Estoy inspirado o tengo un miedo mortal. A veces, es un poco de ambos, y ambos pueden ser estimulantes.

Por ejemplo, cerré las cosas durante un par de semanas durante las vacaciones. Pero incluso si no estoy trabajando tanto, la aventura aún está en mi mente. Constantemente pienso que esta pausa nos va a costar 15.000 € para seguir pagando a la gente durante esas dos semanas.

Eso no es algo de lo que puedas olvidarte. No me malinterpretes, no tiene sentido obsesionarse con el dinero. Pero saber que la cuenta bancaria está disminuyendo es estresante. Está en el fondo de tu mente, siempre. Y no es solo capital. Las ideas siguen llegando, y también lo hacen las dudas y los temores, como cruceros que te invitan a saltar.

Por lo tanto, no esperes mucha paz mental como emprendedor, pero tienes que saber que es posible encontrarlo de vez en cuando.

Si sabes que tu idea es buena, el equipo es bueno, y el trabajo que se está haciendo es bueno, eso es tranquilidad.

2. Seguridad y protección

Hay algunos beneficios de trabajar para una empresa grande, a saber, la estructura y la seguridad.

Conozco personas que han estado en su trabajo actual durante 25 años.

¿Yo? Yo no era capaz de eso. Y no hay nada de malo en tener un trabajo estable. Las personas que hacen que las grandes empresas funcionen son fundamentales, y se crean excelentes carreras en esas organizaciones. Estuve felizmente persiguiéndolo por muchos años.

Pero las personas a menudo permanecen en sus trabajos porque sus prioridades están en otros lugares. Están enfocados en sus familias u otros aspectos personales. Tal vez estén pagando la hipoteca o el estudio de sus hijos, y no quieren meterse con eso.

Valoran la estabilidad y la fiabilidad más que la libertad, sus ambiciones personales superan al profesional. La libertad tiene un precio, tanto financiero como emocional.

No tienes seguridad cuando estás ejecutando un inicio. Las cosas pueden terminar rápidamente. Realmente no sabes dónde estarás en un año a partir de ahora. Te encuentras trabajando duro para superar el miedo y la negación, más que tus amigos en entornos empresariales.

Requiere honestidad y autorreflexión, y el riesgo es real.

3. Vacaciones reales

Cuando trabajaba como consultor, me tomaba dos semanas de vacaciones cada año, a veces dos veces al año.

Podría olvidarme de todo. Si nunca has tomado vacaciones de dos semanas en tu vida profesional, te lo recomiendo encarecidamente. Esa semana extra marca la diferencia.

Pero estas vacaciones desaparecen cuando comienzas la ruta de inicio.

Los empresarios pueden (y deben) tomarse un descanso. Administra el calendario con mucho cuidado para asegurarte de que eso suceda. El fundador "siempre registrado las 24 horas del día, 7 días a la semana" es el estereotipo más antiguo que existe, y los mejores empresarios insisten en mantener el equilibrio.

Pero es difícil de verificar por tanto tiempo cuando se está ejecutando una empresa. No es tanto que las cosas no se hagan, o que no se puede confiar en los demás para avanzar. Solo lo extrañas. Incluso en vacaciones, las ideas siguen llegando. Encontrarás la aventura pasando tiempo en tus pensamientos. Es el lado negativo de la inspiración.

Eso es algo a lo que debes llegar a un acuerdo como emprendedor. Por razones más positivas que negativas, tu compañía va contigo.

Una vez que acepta este hecho inevitable, el tiempo libre es más agradable.

4. Un camino profesional estable

Digamos que todo funciona bien.

Saliste con éxito de tu inicio con una buena cantidad de dinero. ¿Ahora que?

Cuando dejas atrás un trabajo estable, dejas atrás una trayectoria definida. En una startup, estás trabajando en el proyecto mientras dure, y luego se termina.

¿Vas a volver a trabajar a tiempo completo? ¿Tendrás la suerte de tener una segunda idea que se convierta en una startup? ¿Vas a dedicar tu tiempo a invertir?

Hay una cierta cantidad de consuelo en saber qué sucederá después, incluso si no es muy emocionante. Pierdes eso cuando trabajas por tu cuenta.

5. Un camino de regreso

Conozco personas que probaron una startup, fallaron y tuvieron que volver a trabajar en un rol empresarial.

Eso no es necesariamente algo fácil de hacer. Por un lado, la gente querrá saber qué sucedió.

Mi primera aventura tuvo una buena salida, y la gente todavía me pregunta por qué no la estoy ejecutando en este momento. Puede ser difícil de explicar a las personas que no están familiarizadas con el mundo de las startups, y esa es la mayoría de las personas.

Entonces, es probable que tengas que explicar lo que sucedió. Puede resultar poco atractivo para alguien que te está contratando. ¿Explotaste? ¿Eres incapaz de implementar cosas? ¿Por qué estás en mi oficina ahora mismo en lugar de dirigir tu negocio?

La buena noticia es que si tienes éxito, se vuelve un poco adictivo. Es divertido, liberador y emocionante. Si obtienes una o dos salidas exitosas, tendrás todo tipo de oportunidades en tu camino. Tu ojo para la oportunidad se vuelve más nítido.

Y no todos necesitan estabilidad o una carrera definida. Algunas personas prosperan en la incertidumbre.

Solo asegúrate de haber pensado si lo haces o no antes de decidir convertirte en emprendedor, porque para eso te suscribes.