Los desafíos de recibir feedback

Seguramente si estás trabajando en el mundo complejo de hoy has escuchado hablar de los contextos VICA  O RUPT y, fundamentalmente, la premisa sobre estos temas es que el cambio y el desequilibrio son la moneda corriente.

Comenzamos a transitar un presente y un futuro totalmente desafiantes, donde se nos convoca a dejar atrás nuestros hábitos y aprendizajes y se nos invita a mantenernos abiertos y creativos.

La herramienta del feedback es fundamental para que, como integrante de un equipo, organización o empresa, puedas subirte rápidamente a esta ola del cambio.

Entonces aprovecho para preguntarte cómo te sentís cuando recibís feedback. Te confieso que le tenía mucho miedo y a veces, cuando estoy en automático, me siento bastante ansiosa frente a ese tipo de conversación.

Por lo cual, recibir feedback puede ser una experiencia desafiante y emocionalmente desestabilizadora para muchas personas. Sin embargo, es fundamental aprender a manejarlo de manera constructiva para poder crecer y mejorar.

Aquí hay algunas estrategias que utilizo y que pueden ayudarte a prepararte para recibir feedback sin que te desestabilice emocionalmente:

1. Practicar una mentalidad abierta: En lugar de ver el feedback como una crítica personal, trata de verlo como una oportunidad para aprender y crecer.  Actualmente se lo llama feedback constructivo porque apela a quien lo recibe, pueda construir nuevas herramientas y oportunidades frente a aquellos que no resultó tan bien. Mantén una mentalidad abierta y receptiva, y recuerda que el feedback puede ofrecerte información valiosa sobre áreas en las que puedes mejorar.

2. Distinguir la crítica del autoconcepto: Es importante recordar que recibir críticas no significa que eres una mala persona o que no vales la pena. Trata de separar la crítica de tu autoconcepto y recuerda que tu valía como persona no está determinada por tus errores o áreas de mejora o por las observaciones de los demás, que por cierto, son juicios y no verdades.

3. Empatiza contigo mismo: Ser amable y compasivo contigo mismo es fundamental cuando recibes feedback. En lugar de castigarte por tus errores, practica la compasión y recuerda que todos cometemos errores y que el crecimiento personal es un proceso continuo.

4. Acepta tus emociones: Es natural sentirse emocionalmente afectado al recibir feedback, especialmente si es crítico, constructivo o negativo. Permítete sentir y procesar tus emociones de manera saludable, ya sea hablando con alguien de confianza, escribiendo en un diario o practicando técnicas de relajación como la respiración profunda o la meditación.

5. Pide clarificaciones si es necesario: Si no estás seguro de entender completamente el feedback que recibes, no tengas miedo de pedir clarificaciones. Pide ejemplos concretos o sugerencias sobre cómo mejorar para asegurarte de que comprendes completamente lo que se está comunicando.

6. Fomenta la comunicación abierta y honesta: Siempre que sea posible, fomenta un ambiente de comunicación abierta y honesta en el que puedas expresar tus preocupaciones y opiniones de manera respetuosa. Esto puede ayudar a establecer una relación de confianza con la persona que te da feedback y facilitar futuras interacciones.

7. Concéntrate en los aspectos positivos: Aunque el feedback pueda ser duro desde el observador que estás siendo, trata de identificar los aspectos positivos y constructivos que puedas extraer de él. Reconoce tus fortalezas y logros, y utiliza el feedback como una oportunidad para mejorar aún más.

Si te interesa profundizar en herramientas para prepararte en este tipo de conversaciones, puedes contactarme en mi perfil para obtener mayor información.

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