Los grandes avances tecnológicos: elemento clave para paliar los efectos del Covid-19

A estas alturas, es difícil que quede alguien que no esté cansado de oír hablar de la «nueva normalidad». Sabemos que nos hallamos en un momento histórico sin precedentes y somos conscientes de que el impacto económico del coronavirus nos ha empujado a una crisis de magnitudes aún desconocidas. Sin embargo, son muchas las empresas que, en estos tiempos de cambio e incertidumbre, han logrado sobreponerse y explorar una realidad cada vez más inminente para todos: la de la hiperdigitalización. Casi un año después de nuestro primer confinamiento, tenemos que echar la vista atrás y reconocer el esencial papel de las grandes tecnologías para paliar los efectos socioeconómicos de la pandemia.

Han pasado 11 meses desde que el mundo se detuviera repentinamente; éxodo masivo de las oficinas, cierre de negocios, parón económico a nivel global… a lo largo de este año, hemos tenido que adaptar nuestra forma de comunicarnos con los demás, y, por ende, las empresas se han visto obligadas a rediseñar y reorientar su actividad. En este nuevo terreno, las implantaciones tecnológicas han sido la solución clave para muchas instituciones y empresas, especialmente aquellas más pequeñas y con menos recursos para reactivar su economía; en cuestión de semanas, la digitalización pasó de ser una posibilidad a una necesidad.

Plataformas unificadas de organización y colaboración como Teams, de Microsoft 365, se convirtieron en una herramienta imprescindible para que empleados y líderes de todo tipo de entidades pudieran seguir desarrollando su actividad de forma cómoda y efectiva, mientras que, en las organizaciones sanitarias de todo el mundo, servicios de análisis como Power BI o Power Apps se alzaron como grandes aliados para que los hospitales siguieran gestionando su coordinación y comunicación sin sobresaltos. Pero la penetración de este tipo de plataformas en todos los sectores no se limita a mostrarnos un panorama temporal con soluciones provisionales, sino que representa un giro de 180º en la filosofía y cultura de las organizaciones; una nueva visión en la que se enfatiza la necesidad de integrar nuevas prácticas y procesos en el día a día de los trabajadores.

Si hasta hace unos meses no teníamos claro el papel que podían jugar estos programas a la hora de plantear un nuevo modelo de trabajo, ahora sabemos que estamos ante herramientas imprescindibles para estimular una actividad colaborativa y ágil dentro de las empresas. Aplicaciones como MyAnalytics, Microsoft Bookings o la ya mencionada Teams no son solo un instrumento para la supervivencia de las compañías, sino que se han convertido en una oportunidad para lograr equipos más organizados y competitivos.

Hace apenas unas semanas, daba la vuelta al mundo el vídeo promocional que anunciaba la llegada de Microsoft Viva, una nueva categoría de software empresarial cuyo objetivo principal consiste en unificar en una sola plataforma todas las herramientas necesarias para que trabajadores y líderes de todo tipo de empresas puedan hacer frente al trabajo en remoto con absoluta comodidad y eficacia. Centrada en cuatro campos clave como son el aprendizaje, el bienestar, el compromiso y el conocimiento, esta plataforma integrada en Teams cuenta con el apoyo de proyectos como Headspace, LinkedIn Learning o edX, entre muchos otros, pues como anunciaba el CEO de Microsoft, Satya Nadella:

Ninguna compañía resolverá un desafío como este solo […] Nuestro rol único como proveedor de plataformas y herramientas nos permite conectar los puntos, reunir un ecosistema de socios y permitir a las organizaciones de todos los tamaños construir la capacidad digital necesaria para abordar estos desafíos.

Si bien es cierto que muchas de las actualizaciones de Microsoft Viva aún no están completamente implementadas, no cabe duda de que esta herramienta de empoderamiento para los empleados, como se autodefine la plataforma, marcará un nuevo hito en el arduo camino que deben emprender las empresas en la era post-Covid-19.

En momentos tan ambiguos y confusos como en el que vivimos, es bueno recordar que, a lo largo de la historia, los cambios y avances tecnológicos y científicos más significativos han surgido en momentos de crisis y desconcierto. Las grandes tecnologías están pavimentando el camino hacia un panorama menos vertiginoso, y a pesar de todos los contratiempos a los que nos seguimos enfrentando día tras día, ya no es una utopía pensar que todos estos cambios pueden ofrecernos nuevas oportunidades laborales, así como una cultura de empresa más próspera, innovadora y segura.