Los jardines vallados del ecosistema como pilar de la industria móvil
La semana pasada he estado muy liado con varias reuniones, tanto con clientes como con socios, planificando lo que a todas luces serán los nuevos proyectos en los que voy a estar envuelto el año que viene.
Y por eso, no he podido tratar todos los temas que me hubiera gustado. Pero oye, así he tenido más tiempo para consultaros con la almohada.
Y el principal era la presentación de la nueva orneada de dispositivos móviles de la manzanita, que nuevamente, y salvando algunas matizaciones (las iré contando a lo largo de la pieza) dejan claro que Apple juega en otra liga. Una en la que el dispositivo como producto tecnológico no importa una mierda.
Pero vayamos por partes.
Qué obtienes cuando compras un iPhone en 2018
Los nuevos iPhone XR (ES), iPhone XS (ES) y XS Max (ES) son hasta insultantes a nivel tecnológico, pero un éxito rotundo en cuanto a estrategia de negocio.
Para empezar, los dos últimos, que vienen a ser la evolución iterativa del iPhone X, no aportan nada más que un pelín de mejora a nivel de procesador, diagonal de pantalla, y si podemos fiarnos de lo que han dicho, batería, respecto al buque insignia de la Californiana el año pasado. Un buque insignia que ya no existe, por cierto, ya que los de Apple han decidido descatalogarlo.
A cambio de esto, eso sí, aumentamos de precio nuevamente, porque pasar la barrera de los 1000 dólares sin impuestos es algo muy del 2017. Toca subir la apuesta hasta los 1.600 largos (recalco, SIN IMPUESTOS) que costaría el grande con el mayor almacenamiento. Absurdo, sí, pero es Apple, así que hay que aplaudirlo.
Chief Marketing Officer
6 añosApple, con esa política de precios, se está jugando mucho su futuro a largo plazo.