Los principales motivos para digitalizar los procesos de edificación
Según datos recientes publicados por el Observatorio Sectorial DBK de Informa, la construcción crecerá en España un 7% en 2018 hasta situarse en los 120.800 millones de euros, impulsado por el crecimiento de la edificación y por la suave recuperación de la obra civil. Si bien es una cifra ligeramente inferior a la alcanzada en 2017 (7,8%), los datos constatan que continua la senda de la recuperación iniciada en 2015.
Estas previsiones vienen avaladas por el último informe de Bankia España / Infraestructuras y transportes. Julio 2018, en el que se indica que la confianza del sector está en máximos desde 2007, cuyo VAB creció en el 1T18 a un ritmo desconocido desde 2001 -impulsado especialmente por el vigor del segmento residencial- si bien aún está muy lejos de los máximos pre-crisis.
Lejos de adormecerse por el efecto de la recuperación, es sin duda el momento para mejorar la competitividad del sector. El mejor modelo para conseguirlo es apostar por la transformación de los negocios y su digitalización. Esta transformación empapar todos los procesos, desde el diseño a la ejecución y mejorando la experiencia del usuario en cada etapa.
Conceptos como sostenibilidad, eficiencia energética, biodinámica, domótica, innovación en los materiales, industrialización de los procesos, el big data apoyado en el cloud… deben ir ligados a los nuevos proyectos constructivos.
Sin ir más lejos, ya es posible la fabricación digital y la impresión en 3D aplicándola a materiales pesados como el hormigón, hasta tal punto que se puede imprimir hasta una casa habitable y sostenible, como se pudo ver en el último Salone del Mobile en Milán. ¡Con una superficie de 100 m2 y con plazos de construcción de tan sólo 48 horas!
La utilización del BIM (Building Information Modeling), que se está implantando a marchas forzadas por el imperativo de las AA PP para la licitación de obra pública en diciembre de 2018 y de infraestructuras en julio de 2019, trae consigo la unión del big data y la analítica con la gestión del día a día de los proyectos, constituyéndose así un modelo de información para la construcción.
Al gestionar integralmente los datos de la edificación durante todo su ciclo de vida, las compañías podrán optimizar el gasto, y más concretamente el tiempo y los recursos tanto en el propio diseño como en la construcción.
No hay que olvidarse tampoco del impacto de la realidad virtual y la realidad aumentada, y su aprovechamiento para la optimización del diseño, tanto desde el punto de vista del arquitecto, como de la dirección de obra y la propia experiencia del cliente, como apuntábamos antes. Las casetas inmobiliarias tradicionales acabarán dando paso a las visitas virtuales y a la simulación para que juntas faciliten la decisión de compra.
Todos ellos son más y más motivos por los que la digitalización de los procesos ligados a la actividad empresarial de la construcción debe producirse sin demora. Es una transformación cultural que desde Quonext apoyamos con soluciones tecnológicas como QuoBuilding, preparadas para digitalizar e integrar toda la cadena de valor.