Más Allá del Paisaje..
"Dios todo lo hace para Bien"
Leo esto hoy sábado 13 de febrero de 2016 en Fort Myers, Fl, un mes después de haber llegado de unas cortas vacaciones en Colombia.
No ha sido un mes fácil, decidí regresar y estar por lo menos un año más en USA y hacer empresa (qué valiente suena) no? la verdad? Ni idea, es solo que creo y siento que es hora de hacer realidad eso que hace vibrar mi corazón.
Durante estos 30 días me he encontrado de frente con una vieja cansona que me atormentaba años atrás, ella se llama depresión. No se cansa y nunca envejece. La sentí muy cerca y a veces tuvo el atrevimiento de abrazarme, pero lo peor fue que yo me sentí cómoda y confieso que por un instante me gustó. Oh no! Pero respiré profundo y entonces digo, qué maravillosa es la palabra de Dios cuando dice que es más cortante que espada de dos filos y penetra hasta lo más produndo del alma y el espíritu, y que además NUNCA regresa vacía, entonces, bajo esa premisa me dediqué a leer su palabra más. Parecía como cuando uno llega a casa muy hambriento y sabe que tiene que cocinar pero mientras se hace el arroz, por ejemplo, uno va agarrando de todo lo que hay en la cocina, pan, fruta, galletas. En fin, así era. Leía todo lo que veía que alguien escribía, me inscribí en devocionales virtuales pero antes de que llegara la hora de estos yo leía pedazos de libros, versículos, y los cantaba en canciones y los escuchaba en prédicas. Lo más sorprendente de todo esto fue que cada vez que leía algo incluso que yo ya tenía subrayado y comentado en mi Biblia, mi cara de sorpresa era inevitable. Gloria a Dios por qué nos da un espíritu que nos hace sorprender todos los días con sus maravillas.
Ayer viernes 12 de febrero de 2016
Viajé desde Orlando a la ciudad de Fort Myers son tres horas de camino aproximadamente de un viaje cómodo y tranquilo ya bastante familiar para mi. Este viaje duró al rededor de seis horas pues estuvo lleno de imprevistos y catástrofes que vi con mis propios ojos.
Al iniciar mi tramo, por ser viernes, supongo, el tráfico de automóviles era un caos. Viajaba por la ruta que conduce a la entrada principal de Disney World, Kissimmee, y los parques de Universal. Nunca había visto tanto tráfico y desespero en las personas que van a esos parques. Es un poco irónico, primero nunca me había creído la idea de que en Orlando hubiera tráfico caótico, segundo nunca entenderé por qué los viernes por la tarde es el momento en que más se manifiesta este fenómeno de estrés en las en las personas que manejan carro y tercero pues muchas de las personas, y me atrevo a decir la mayoría están de vacaciones e iban al lugar "más feliz del mundo" ya creo que por sus caras no iban tan felices.
Pero pasé esa prueba, y seguí mi recorrido ya con más de una hora de retraso.
Faltaban unos 500 pies de carretera, justo antes de llegar a un semáforo cuando un señor con su cara manchada en sangre me hacía señales de bajar la velocidad y de tomar el carril izquierdo. No entendía muy bien pero igual decidí hacerle caso. Ante mis ojos vi como la vida de varias personas se despedía lentamente, algunos en brazos de paramédicos otros solos sobre el asfalto.
Vi un accidente como nunca lo había visto, ese sí fue el verdadero caos. Vi una persona dentro de una camioneta y pensé, habrá estado molesto con sus padres, habrá cumplido el propósito de su vida o al menos iniciado, habrá hecho realidad sus sueños. A mi derecha un hombre llegaba casi sin poder sostenerse al andén en donde había grama, tal vez pensó que ese sería un lugar más cómodo para él, estaba muy débil y pensé en mis hermanos, pensé en si ese hombre sabría de la salvación, se me puso triste el corazón.
Me sentía una espectadora de mi posible propia vida, sin poder bajarme del carro veía como con rapidez llegaban al lugar tres ambulancias más, carros de policía y bomberos.
Vi que uno de los carros involucrado no estaba del todo en el carril que le correspondía, y pensé así pasa cuando tal vez ligeramente en nuestras vidas nos salimos solo un poco de esa línea correcta que debemos seguir, cuando nos creemos más astutos, más "inteligentes" más "audaces" como si tuviéramos el control siempre, pero pasa también en la vida que nos desviamos y que siempre tenemos consecuencias directas y que a veces producen daños colaterales los cuales claramente no queremos, pero pasa, y también pasa que aveces son mortales, ahí lo vi.
Recordé a un compañero del colegio y sus últimas palabras horas antes de morir "yo soy a prueba de balas", mi corazón seguía muy triste.
Mi camino siguió y a 40 minutos de ese lugar, mientras intentaba recuperarme, volví a ver un hombre que me desviaba totalmente de ruta. Cada vez era más difícil verlo pues había mucho humo alrededor . Mis ojos ahora presenciaban un incendio forestal. Dos carros de bomberos intentaban controlar las llamas, ellos, los bomberos, en mi opción unos héroes, estaba dando su vida por eso que también es importante.
Solo 40 minutos atrás intentaban salvar la vida de personas, aquí lo hacían para un incendio que crecía con hambre y claro para proteger nuestras vidas.
Fuimos guiados un gran número de carros por uno de los bomberos por un camino oscuro en medio de granjas, y potreros. Solo escuchaba mi GPS decir que retomara la ruta pero yo debía seguir la luz y la dirección de alguien que quiera proteger la vida de todos lo que iríamos directo al incendio. Durante más de 20 millas seguí manejando y luego me hallé sola, en una calle donde debía escoger la derecha o la izquierda, no había más bomberos, ni luces de carros y entonces la señal volvió a mi celular y el GPS ya ubicado me siguió guiando hasta llegar a la ruta adecuada.
Mientras todo esto pasaba ya acumulaba casi dos horas y media de retraso. Me había encontrado en mi camino con lo que podría ser la vida de todos nosotros.
A veces el paisaje se nos hace igual como una foto, a veces así también nos pasa en la vida, y entonces un día vemos las cosas diferente y entendemos que de verdad, la palabra de Dios es viva y eficaz. Le preguntaba a Dios cuál había sido su propósito para que yo viera como espectadora todo lo que ya narré, entendí que así es la vida, un soplo, es fugaz, no es nuestra, definitivamente NO.
Agradecí con lágrimas cuando volvió a visitarme la amarga depresión, por qué fue la prueba y aún si querer, si ánimos, o sin entender seguí leyendola Biblia, seguí buscándolo y El lo vio, como siempre lo hace.
Mi corazón seguía un poco triste, sí, pero es lindo saber cómo eso que tanto he escuchado sobre el discernimiento o la voz sensible de Dios lo pude experimentar, entendí que Dios nunca jamás está ausente, que nos quiere llevar a otro nivel en una relación con Jesús, que no nos tomemos la vida como un paisaje sin gracia, si no que nunca nos dejemos de sorprender por El y sobretodo que nos dejemos amar por El.
Consultor Estratégico / Branding + Diseño
8 años:)
Psicóloga. Sexóloga. Terapeuta. Comunicadora Social. Periodista. Columnista. Consultora de Empresas. Docente Universitaria. Escritora Publicada.
8 añosLaura, conectarte con tu fragilidad siempre te hará más fuerte. Es el móvil del equilibrio. Luz/oscuridad, Yin/Yang, Desde el encuentro de los opuestos aflorará nuestra sabiduría. Excelente muestra de tu historia vivida durante unas cuantas horas que al leerla toca muchisisimas horas de nuestras vidas... Hace una década viví en Fort Myers... recuerdos y experiencia de alto crecimiento. Bone fortune!!! Y de nuevo, Gracias!!!
Consultor Estratégico / Branding + Diseño
8 añosoh caray... que lindo. un abrazo muy grande!!!!
Es muy cierto Laura, hay muchaa cosas que tomamos por dadas cuando el solo hecho de abrir nuestros ojos es una señal de que Dios nos ha regalado un nuevo comenzar! Gracias por tu relato y los mejores deseos :)
Logistics
8 añosEn algún momento de silencio encontraras el mensaje de Dios ha querido enviarte entre tantas vivencias juntas. En el silencio encontramos las respuestas que por mucho estuvimos buscando y por nuestro afán nunca vimos! Cariños tu articulo me llego al corazón!