"Mi jefe no es como yo quisiera" (¿y por qué iba a serlo?)

. No responde tus emails, ni tus llamados.

. Mira tu mensaje en el whatsapp, pero no te contesta.

. Le entregaste el informe hace una semana, como él quería... y no sabés qué pasó con ello.

. Le pedís una reunión... insistís... la calendariza. Y a última hora, la cancela (sin reprogramar).

No te inspira. No sabe del tema. No se preocupa por vos ni por el equipo. No decide. ¡¡No te gusta!! (y no entendés cómo nadie más se da cuenta de que no sirve para ese puesto, y lo cambian de una buena vez :) ).

El tema es que... ¿cuánta energía se te va con el foco puesto en todo lo que no hace, todo lo que no lidera tu jefe? ¿cuántos enojos? ¿cuántas broncas por eso que no sale como a vos te gustaría? 

¿Depende de vos? No.

¿Va a ser diferente porque a vos no te guste? No.

Entonces, mi propuesta es que uses todo ese material, toda esa energía, tu tiempo, en vos: en tu desarrollo profesional. 

Que dejes de darle tanta entidad, y te ocupes de hacer con excelencia tu trabajo (sí, aunque tu jefe no lo mire). 

Que te ocupes de tu capacitación (sí, aunque la empresa no pague nada, y nadie te lo reconozca. Hoy día, hay mucho gratuito).

Que te ocupes de tus vínculos profesionales (lo que aprendas en cuanto a relacionarte mejor, a networking, a contactos, te lo llevas para siempre).

Que te ocupes de estar al tanto de lo nuevo en tu industria (aunque no lo puedas aplicar hoy, en tu trabajo). 

Que te ocupes de encontrar mejoras en tu tarea: calidad, cantidad, formato, automatizar, etc. (aunque nadie te lo reconozca: es por vos, para "liberarte" tiempo).

Que te ocupes de diseñar tu desarrollo profesional, y vayas dando pasos hacia eso: en ese lugar (que hoy te da un sueldo); o en otro (que sea más parecido al que a vos querés). 

Dejar de lado la queja, que está en general en "el otro", es un gran desafío, pero con ello, más que una especie de catarsis, nada más podemos hacer. Queda fuera de nosotros, nos quita poder.

En cambio, centrarnos en qué sí está a nuestro alcance, nos permite adueñarnos de nuestras acciones, y construir aquello que queremos.

¿Qué pensas vos?