Necesitamos pasantías empresariales para profesionales

Sí, así como le leen: para profesionales, no para estudiantes. Y no, no me opongo a que los estudiantes de cualquier programa universitario, de corta o de larga duración, realicen prácticas durante la carrera o como requisito de grado. Las prácticas son irreemplazables, pues representan el máximo escenario de aprendizaje; es donde los alumnos ponen a prueba los conocimientos adquiridos y además, es donde ellos pueden obtener confianza en sus aptitudes, pero sobre todo, es donde se puede crecer, porque se cultivan y se perfeccionan habilidades, ya que se aprende haciendo.

Está claro entonces que no estoy en contra de las prácticas para estudiantes, pero también estos espacios deberían estar abiertos para los profesionales. Algunos posgrados incluyen prácticas en el pénsum, pero tampoco me refiero a eso. Lo que me interesa es que las personas con título profesional, sea que cuenten con experiencia o no, puedan ser reclutadas como practicantes por las empresas. ¿Pero para qué? ¿No se supone que ya realizaron sus prácticas durante la carrera? ¿Cuál es el objetivo de la propuesta? ¿Qué obtienen los profesionales?

Muchas personas culminan la carrera, obtienen su título, pero no encuentran empleo por falta de experiencia, ya que para muchos empleadores la práctica no cuenta como trabajo y varias compañías tienen cargos exclusivos para practicantes, es decir, que el personal rota constantemente. Así que con diploma en mano y la experiencia de una práctica en la hoja de vida, para algunos sigue siendo difícil encontrar una oportunidad laboral. Posiblemente, después de mucho buscar encuentren un empleo en el área de estudio, pero probablemente también obtengan un trabajo que no se relaciona con su formación.

Otros profesionales sí han laborado, incluso años, pero luego se dan cuenta que quieren cambiar de enfoque y ninguna empresa les da una oportunidad por falta de experiencia y aunque se capacitan, no tienen tiempo de práctica en el nuevo tema. Así mismo, hay quienes igualmente han laborado, también durante años, pero su enfoque no es específico, es decir, que no tienen ningún enfoque, ya que han encontrado empleos en diferentes áreas y al postularse a una vacante, los rechazan por no tener la experiencia suficiente que se requiere.

Las pasantías empresariales son la respuesta para esos profesionales; ¿pero de qué forma se realizarían? A través de un contrato de aprendizaje de tres meses, que le permita al profesional descubrir y utilizar su potencial, demostrando las cualidades y destrezas adquiridas en la empresa, para que al finalizar dicho periodo, se abra la posibilidad de ser vinculado como empleado. De esta manera se aprende haciendo, pues se está adquiriendo experiencia en un área de interés poco explorada, mejorando como profesional y obteniendo una nueva habilidad.

Para mí, una pasantía empresarial para un profesional no es un retroceso: es la oportunidad para seguir creciendo. ¿Ustedes qué opinan? ¿Están de acuerdo? ¿Conocen iniciativas de este tipo? ¿Hay empresas en Medellín que tengan un programa así? ¿Estarían dispuestos a realizar una pasantía empresarial? ¿O les disgusta la idea? ¿Tienen una contrapropuesta?

Me gustaría leer las opiniones de profesionales, de empresarios y de expertos en recursos humanos. Quedo atento a sus comentarios.