Negocios que ya se van

Hoy uno de mis clientes (por respeto no digo su nombre) en una llamada telefónica en la que yo le estoy ofreciendo grandes opciones de transformar su negocio a un plano mucho más digital, me comentó: “No es necesario hacer algún cambio en la operación del negocio, en máximo 1 mes estaremos completamente de regreso en las actividades en #cdmx”.

 ¿En realidad regresaremos a la “normalidad” antes conocida? Yo veo hoy a una mamá de 65 años que empezó a utilizar apps como CornerShop para hacer el súper; veo a mis sobrinos de 8 años tomando clases en línea y teniendo reuniones con sus amigos en Zoom o Google Meet; veo tiendas de abarrotes haciendo su inventario y pedidos tiendas digitales ; veo gente que se capacita en línea sin importar el ramo en el que se desempeñan; veo equipos de trabajo que tienen reuniones online concretas y sin perder el tiempo. Nadie dice qué es lo correcto o lo más fácil, pero todos (sin importar que tan inmersos estamos en el mundo digital) hemos encontrado una nueva actividad que estamos dispuestos a cambiar de nuestra “vida normal” pasada.

¿Qué sigue para nuestros negocios, aun los más tradicionales en su venta u operación? Creo yo revolucionar en sus procesos internos y externos; implementar nuevas herramientas para operar; buscar hacer reservas monetarias que te ayuden a enfrentar la próxima crisis económica, y sobre todo, buscar nuevos canales de venta que al inicio tan solo representarán un pequeño porcentaje de tus ventas, pero pueden abrir un gran futuro.

Próximamente nuestro negocio se quedará sin el cliente mencionado y por desgracia no será por la (in)conformidad de nuestro trabajo pero se irá, ya que dejará de existir en este mundo injusto de los emprendedores. Hace unos años fue puesto en un pedestal por arriesgar, hoy será crucificado por no aceptar la nueva “vida normal”.