#OPTIMISMO en momentos #COVID19
Ser optimistas cuando todo va viento en popa es relativamente fácil pero cuando las cosas se tuercen el tema se complica un poco más. Hoy, en plena expansión del COVID19 , ser optimista puede parecer incluso insensato pero considero que es más necesario que nunca cultivarlo, muy necesario. El panorama actual no es muy alentador, se va a prolongar algunas semanas y las consecuencias del mismo serán también complejas. Propongo ejercitarnos en no dejar ganar todo el territorio al pesimismo y en cultivar pequeñas actitudes que conquisten un poco de optimismo a diario.
Tres pequeños retos para conquistarle pueden ser:
1. PONER EL FOCO EN LO POSITIVO. Tenemos que luchar y mucho en conquistar la actitud de buscar algo bueno todos los días en medio de lo que pasa. Puede ser el tener algo más de tiempo, una sonrisa o detalle de cariño, la llamada de un amigo o la que hacemos nosotros, un momento en familia, un pequeño éxito en el trabajo, el sentirnos queridos, el asombro por el gran trabajo que hacen los sanitarios y demás personal de los hospitales, una idea de ese libro que hemos podido leer etc…
2. SER AGRADECIDOS. Si agradecemos todo lo positivo que hemos detectado en el primer reto le vamos a dar aún más valor. Cada día podemos dar las gracias por infinidad de cosas pero no siempre caemos en la cuenta en hacerlo. Cuando uno puede perder a quién ama o aquello que le gusta es cuando más se valora. Nunca es tarde para empezar a escribir un diario de agradecimiento todas las noches o un par de días a la semana. En momentos difíciles, releer esos agradecimientos siempre ayuda, también en los buenos momentos nos anima a seguir hacia delante.
3. PENSAR EN EL HOY. El hoy es un auténtico regalo, por eso se le llama presente. Entretenerse demasiado en el pasado puede deprimir a las personas, preocuparse demasiado por el futuro y crearnos películas sobre el mismo puede acarrear ansiedad. La persona con la que hablamos más todos los días es “YO S.L”. ¿Cuántas veces nos creamos películas sobre nuestro futuro que tienen un final poco esperanzador? Quizás nos compense reemplazar ese tipo de películas cuando asomen por otros pensamientos más positivos y centrarnos en pensar en el hoy que es un regalo.