Paseos exquisitos y viajes personalizados
Viajeros VIP: el boom de los turistas de alta gama que quieren sentirse porteños
Paseos exquisitos y turismo a la carta
Vita Ariztegui es actriz, productora, dramaturga, administradora de redes sociales, maestra de idiomas, políglota y fotógrafa amateur. Mujer de a pie –prefiere siempre caminar antes que subir a un vehículo– es fanática del polo y asistente casi perfecta a vernissages del circuito de arte porteño. Cultora de la buena vida, Vita es vorazmente curiosa. Por eso sintetiza su ocupación y dice: "Me llaman para acompañar viajeros visitantes".
Vita es una caza tendencias que organiza recorridos únicos para viajeros (Fernando Santamarina)
'Trend-watcher' -caza tendencias- su virtud es organizar recorridos a la carta para viajeros especiales. Desde una pareja de hermanas griegas muy acomodadas, curiosas por conocer a la super élite del polo, hasta jóvenes creativas con la inspiración puesta en descubrir diseñadores urbanos, como podría ser Fernando More. Su especialidad, además, es conseguir los deseados accesos.
Sus tours por Buenos Aires "tienen la incansable sucesión de los fracasos y actos fallidos de Argentina", explicó. Sus clientes -como pudo ser una baronesa octogenaria- descubren en sus paseos los obstáculos propios de la ciudad, obstáculos geográficos, de lejanía con el resto del mundo, de la arrogancia y vanidad de sus habitantes. Una geografía amigable, llana y una arquitectura por momentos rara y otras, sencilla. Recorridos algo alejados de la nueva Buenos Aires gentrificada y por momentos demasiada globalizada.
Llevan a sus clientes a conocer el “otro” Buenos Aires, ese que no figura en las guías de viajes
Desde un burdel a un zanjón. Todo como en un cambalache. San Telmo, Montserrat, San Nicolás, recorridos históricos obligados. El jardín del Palacio Noel, lo que fue la mansión de la familia y hoy museo Fernández Blanco, de estilo neocolonial con su patio de piso empedrado, bancos y árboles centenarios, suele ser el lugar para comenzar sus exquisitas travesías.
Sus grupos tienen el tamaño de los pasajeros que caben en un taxi. De esa manera garantiza una experiencia singular lejos de la masividad turística. Busca que sus visitantes descubran aquello que sólo verían si vivieran e hicieran investigación luego de varios años de vivir en la ciudad.
Un recorrido fijo no existe porque, para contratarla, los interesados deben dar respuesta previa a un cuestionario de gustos y preferencias. Una vez aceptado, y con un itinerario establecido de antemano, los planes no suelen cambiarse. Sin embargo, ciertas experiencias la han llevado a tener que salir con custodia por las puertas traseras de un importante hotel.
Los recorridos se organizan de acuerdo a los gustos de cada cliente
La diferencian conocer siempre el 'dress code', la manera correcta para vestirse, y cómo comportarse en determinadas situaciones, pero en especial entender que su trabajo debe la absoluta discreción y reserva. Vita comenta, bloggea, likea y taggea todo lo que le llama la atención, actividades que le han dado mérito y reconocimiento en Trip Advisor, donde esta cerca de los 40 mil lectores, aunque es el boca a boca su referencia y punto de recomendación.