Perfil de Yabrán, a veinte años de la foto

Recorrido numerológico por la persona más poderosa y misteriosa de los 90.

Alfredo Enrique Nallib Yabrán (1/11/1944)

Oscuro y poderoso empresario argentino telepostal que tuvo empresas en La Argentina (Oca, Ocasa, Andreani, etc) desde la época del proceso hasta mayo del ´98. Luego al comprobarse que Yabrán es el autor de un crimen en plena democracia, estuvo cinco días prófugo y luego contaré el desenlace que la mayoría conoce.

Todo comenzó en el año 1996 cuando el ministro de economía de entonces, _Domingo Cavallo_ le inició al empresario recién citado; acciones legales por evasión de impuestos, monopolio telepostal, vínculos con la mafia, narcotráfico y por ser el autor intelectual del crimen del periodista José Luis Cabezas.

El contexto político de ese momento era de un Menen reelecto que pretendía la re-reelección.

Luego de una extensa denuncia del ministro de Economía, Cavallo en el Congreso respecto de quién era Yabrán, qué hacía y que no dejaba que le conocieran el rostro.

Durante ese verano, un periodista de la revista Noticias, llamado José Luis Cabezas logra fotografiarlo. Se publica la foto como tapa de esa revista, y un año después, febrero del 2007, realizan un atentado contra éste, donde durante una madrugada, le pegan dos tiros y luego incendian el cuerpo dentro de un auto que aparece en una zanja en la cava en General Madariaga.

 Quizás pensaron que con este crimen a alguien que sólo hacía su trabajo y sacó una foto a una persona para la cual era esencial trabajar en el anonimato, detentar poder desde la oscuridad, silenciarían a la sociedad. Sin embargo, ocurrió todo lo contrario: la gente salió a las calles para manifestar su repudio, así como lo hicieron en los 90 con el crimen de María Soledad Morales, con las marchas del silencio, con la monja Marta Pelloni y con el caso Carrasco a partir del cual, se dio fin al servicio militar obligatorio.

En lo que refiere a lo numerológico, Yabrán poseía un camino de alma 1. Camino de alma es lo que la persona desea hacer en su vida, remite a su aspiración secreta, revela el cómo quiere vivir.

Es el gran hacedor de sí mismo. Es rabioso pero no logra reconocerlo. A los 1 de camino de alma, no los dejaron ser niños. Habitualmente viene de familias con padres separados, por lo que desde pequeño se tiene que hacer cargo de alguno de los padres o del resto de sus hermanos.

Siente rabia por no haber tenido niñez; a él nadie le preguntó si quería hacerse cargo, simplemente tuvo que hacerlo.

No soporta la estupidez. Mide por lo que cada uno ha hecho y no por la familia de la que proviene. Nada los detiene cuando se fijan una meta. Son individualistas, independientes y decididos. No soportan que alguien los controle. Son los que se sienten perfectos. Es un ser controlador, intolerante, jóvenes eternos.

Los 1 se validan con el conocimiento y el poder económico. Son ambiciosos. Nunca se ven vulgares, generalmente son delgados y distinguidos. No saben expresar su rabia y cuando llegan a hacerlo, pueden ser muy crueles. Es el único número que sabe muy bien donde más duele.

Prestan dinero, pero no lo que se les pide, sino lo que ellos quieren.

Se sobrecargan de trabajo, ya que no saben decir que no a la autoridad, por lo que se generan problemas al hígado y al estómago.

El 1 no entiende ni acepta las emociones. Se desestructura en el mundo emocional porque se le hacen evidentes sus carencias en ese ámbito.

Le dan mucho a sus hijos, pero espera que ellos compitan por todo. Los 1 no sueñan, realizan. Son líderes. Son muy hábiles en la evaluación de los otros, por lo que te observan y “tasan” muy rápido y si no les sirves a sus propósitos, te derivan con otras personas.

Cuando hace regalos, regala cosas sobrias y que alimenten el intelecto, así como cosas útiles.

Tienen miedo a pedir cosas o dinero a otros, ya que eso sería reconocer que no lo están haciendo bien.

Asimismo, Alfredo tenía una personalidad 8. Recuerden que la personalidad o imagen es lo que uno muestra más allá de su deseo, lo que uno emana como energía, lo que los demás reciben de nosotros como primera impresión, sin tener en cuenta lo que seamos o hagamos.

Tiene capacidad ejecutiva, perseverancia, justicia, esfuerzo y consolidación. Es disciplinado, ordenado, honesto y longevo.

En lo negativo: Suele tener terquedad y es el más agresivo de los números de personalidad. Es personalidad fuerte, ya que tiene una gran concentración de energía.

Se exige demasiado y también lo hace con los demás.

Es vehemente y luchará hasta el final, sin medir consecuencias_ tanto para el éxito como para el fracaso_ Un ejemplo de esto podría ser el acto de acabar con su vida para no ir preso.

Suelen aislarse de la gente que no le interesa. Es rencoroso. (Manda a matar a quien lo fotografía).

Tenía un camino de vida 3. Por lo que el itinerario a través del cual tenía que tomar la vida era el progreso mediante las relaciones humanas y la comunicación interpersonal.

Los medios pueden llegar a ser sus herramientas privilegiadas

Poseía una misión 3: La misión es el para qué vinimos a este plano físico.

Es lo que más cuesta llevar a cabo a todas las personas.

En el caso del empresario, esta idea de esconderse y actuar bajo las sombras está en las antípodas de lo que esta misión solicita que se vincula más bien, con el vincularse con gente y con la autoexpresión tanto oral como escrita. Con facilidades en todo tipo de expresión, ya sea artística o literaria.

El empresario se contrapuso tanto a su camino de vida como a su misión que le pedían relacionarse, darse a conocer, no temer expresarse ni utilizar los medios en su contra, sino a su favor. Cuando recorremos la vida, olvidando el propósito de la misma, sea porque no lo conocemos o no sabemos cómo llevarlo a cabo, entonces dejamos de crecer espiritualmente, nos desdibujamos en cuanto a lo que nuestro crecimiento espiritual solicita, y perdemos satisfacer la finalidad divina revelada por el total de nuestro nombre de nacimiento, por lo que nos volvemos seres incapaces de enfrentar exitosamente algunas situaciones que la vida nos presenta.

Como a Alfredo no quería ni le interesaba ser una persona pública, tampoco tramitaba bien sus emociones, ni menos aceptaba el hecho de dejar de tener poder, (cuestión a la que ya estaba habituado).

Sumado a esto, infiero que también sintió vergüenza ante su familia cuando se enteró de que era efectivamente él, quien había sido el responsable intelectual del crimen de Cabezas. Entonces decide quitarse la vida durante el año 1998. Es muy posible que se tratara de una muerte inducida por una organización narcotraficante que operaba detrás suyo.

Lo cierto es que se mata, porque se sentía solo, desamparado y no estaba dispuesto a perder la libertad. Quizás supo, o decretaba sin querer, una y otra vez, este final, cuando decía la famosa frase suya donde confesaba que sacarle una foto era sinónimo de pegarle un tiro en la frente. La autoprofecía tuvo lugar un 20/05/1998 en una de sus estancias, cuando Yabrán escuchó que venían a detenerlo.

La kábala del empresario evidencia que desde sus 36 a los 45 años, era conveniente que diera a conocer su nombre ante los demás.

Desde sus 45 a los 53, tenía muchas inquietudes anímicas. Y aparece también en este período su muerte.

También el pináculo que atravesaba cuando se quita la vida a sus 53 años, el 20/05/1998 es un 4/7. El pináculo es comparable a una prueba que debemos enfrentar y aceptar, pues no podremos eludir ni evitar sus experiencias.

El 4 como pináculo desde los 44 a los 53 años, es un período de sistematización y sobre todo de ordenamiento. Y el desafío, (es una advertencia de cómo debemos pasar el escollo del pináculo). En el caso de Alfredo, su desafío era el (7). Este número da cuenta de que ya no se esfuerza en cambiar nada de las condiciones existentes. Se trata de un desafío trágico y difícil de soportar. Requiere de la persona una gran fuerza moral. Hubo demasiado falso orgullo, ocultamiento y aislamiento, muy difíciles de revertir.

Tampoco ayudó el hecho de que Yabrán atravesaba cuando se mata, un año personal 9. Que es el último de un ciclo de 9 años, donde se tiende a cerrar ciclos, de desembarazarse de lo viejo. Y donde ya se implica y pone el cuerpo, para muchas veces, poner fin al persistente dolor emocional.

En un punto que la policía bonaerense siga sistemáticamente vinculada al delito, muestra que las mafias continúan más allá de las personas. Los accionares criminales de aquel entonces, representados por la figura de Yabrán, siguen dando vueltas ahora, pero de un modo más atomizado.

Esperemos que nunca más haya un caso Cabezas. Es evidente que el no silenciamiento de la sociedad argentina, sirvió mucho. ¡Cabezas presente!