Pertenencia
Uno de los desafíos de los equipos es generar un sentido de pertenencia, ya lo he mencionado en otras oportunidades, esto no es un ejercicio intelectual que resulte de poner en el papel las razones por la que sería bueno que estuviéramos juntos, tampoco es un espacio que pueda construirse por decreto y que sólo basta que los demás sigamos la emoción de estar incluidos en dicho espacio. Pertenecer es una dimensión mucho más profunda, remite a nuestro ADN, una suerte de código genético que se expresa en los participantes de un equipo, es la resultante de un patrón coherente de comportamientos que el equipo valora y elige seguir. Pertenencia genera en sus miembros sentido de comodidad, bienestar, grandeza de participar, en último término orgullo de estar, No basta con declarar la bienvenida, requiere de dedicación y cuidado de sus miembros, hace falta una permanente preocupación por cuidar los valores que dan sentido al estar juntos. Son múltiples las manifestaciones de ese sentido de pertenencia, para mi el mas importante es la EPICA, esa historia prácticamente imposible de cumplir, esa narrativa que requiere de todas las personas, en la épica, nadie sobra, excluir es el claro ejemplo de que no será posible cumplir los objetivos propuestos. La épica es un aveces mítico viaje de transformación de cada miembro de equipo, está ahí por que entiende y siente que no puede conseguir lo que busca en otro lugar, ese viaje de transformación también lo enfrenta a sus propios miedos, y es en el acto de pertenecer, donde logra crecer y convertirse en una mejor versión de si mismo, ¿cómo lo logra? sólo hace falta participar, comprometerse, estar disponible para él y los demás, tratar de aprender permanentemente responder la pregunta ¿qué tengo que hacer? para lograr cumplir con el propósito del equipo es lo que le da sentido al pertenecer. Este mágico sentido logra hacer que cada miembro del equipo se sienta mejor ser humano gracias al compartir sus experiencias con otras personas.