Posibles escenarios y nuevos paradigmas para el futuro del Turismo

El impacto del Corona virus en el turismo ha sido devastador.

El WTTC (World Travel & Tourism Council), prevé un derrumbe del 25% y advierte que están en riesgo 50 millones de puestos de trabajo.

Un tercio del turismo mundial pasa por el Mediterráneo.

Ursula Von Der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, ha dicho: "Esperen a reservar sus vacaciones.”

En Italia, según las previsiones, las presencias se reducirán en un 60 %, cerrando así el 2020 con cerca de 172 millones de presencias, frente a los más de 430 millones del último año, que se traduce en -29 mil millones. Más pesimista Luca Patane, Presidente Confcommercio Confturismo, que prevé para el 2020 un hundimiento del 80%.

En España, las 20.000 empresas turísticas que han batido récords de crecimiento en los últimos tres años están prácticamente paradas. Aquì donde el turismo representa casi el 12% del PIB, la llegada de turistas podría desplomarse hasta un 9%.

Según El País, en el mejor escenario, con una reanudación de la actividad antes del verano, las pérdidas podrían llegar a 15.8 mil miliones. En el peor de los casos, la cifra se elevaría a 56 mil millones, un tercio de los 158 mil millones en los que se calcula el importe del PIB turístico.

Sabemos que en España, como en Italia, se producirá la recuperación, pero el sector está en agitación porque tiene que ver con la incógnita de uno de los aspectos más importantes para quien trabaja con el "viaje": el tiempo.

Después de la tormenta probablemente los grandes players tendrán que ponerse a cubierto y ya se invocan al Estado de los vales o cupones para las familias a gastar en el futuro en viajes. En general habrá ofertas agresivas de la baja marginalidad para desencadenar escalas sobre volúmenes consistentes.

Luis Buzzi, socio de KPMG España y responsable del sector Turismo prevé además fenómenos de integración y colaboración y probablemente la agrupación de los actores de la oferta turística para reevaluar los escenarios, gestionar los costes fijos y mantener el talento para elaborar planes de acción eficaces.

Porque el futuro del turismo no se jugará a una carrera a la baja, ni a ofertas o paquetes preconstituidos. Es necesario un cambio de paradigma. Las personas que finalmente podrán salir de casa y recuperar la libertad de salir, tendrán necesidades diferentes.

El destino, el sueño, siempre tendrán un papel importante, pero ya no primario. Nuevos valores como la seguridad, la experiencia y el tiempo serán dominantes al menos a corto y medio plazo.

Seguridad

La sociedad se verá cambiada, y no sólo en el ámbito laboral a través del Smart working, sino en el fondo.

Si después de la guerra fue posible recomenzar con renovado entusiasmo ya que el enemigo estaba derrotado, o sabíamos que ya no podría dañarnos, hoy el enemigo invisible siempre se deslizará entre los pliegues de nuestros miedos en forma de apretón de manos, manilla del metro, estornudo. La reapertura gradual todavía verá el hábito en la distancia, el evitar lugares concurridos y en general la sospecha, ser parte de nuestro diario.

La búsqueda de seguridad puede cambiar la forma en que viajamos o utilizamos algunos productos o servicios. Probablemente se crearán las primeras certificaciones COVID FREE para hoteles, restaurantes o para los mismos empleados y se establecerá el pasaporte sanitario, como ya están probando en China. El turismo al principio se caracterizará por una elección más "local", nacional y lo más próxima posible, tratando de evitar los lugares súper concurridos y favoreciendo medios de transporte "seguros" como el coche, la moto o la bicicleta.

Confturismo realizó a finales de marzo una encuesta que señala que tan pronto como la alarma haya cesado y vuelva a viajar a Italia, el 83% de las personas elegirá la península para sus vacaciones, aunque el 16% probablemente no tendrá suficiente disponibilidad económica. La inseguridad económica, por tanto, puede caracterizar la experiencia turística más relámpago, en coche y en espacios abiertos.

Experiencia

Nos estamos acostumbrando a trabajar desde casa, pero también hacer yoga, un aperitivo o una cena virtual con los amigos, un djset, bailar, amasar una pizza. La experiencia abstracta del lugar físico domina nuestras vidas y le da otro significado. Y la experiencia adquiere más valor cuando se comparte con los demás. No importa dónde, sino cómo (online) y cuándo.

Eso no significa que cuando podamos salir no vayamos a tomar una caña con nuestros amigos al bar. Quiere decir que tendremos que volver a discutir el paradigma de "viaje", donde irá bien cualquier lugar que no sea hogar, después de mucho tiempo pasado cerrado, pero no será así por la experiencia, que deberá ser personalizada, estimulante y que permita compartir, de hecho la interacción. No se tratará, pues, de satisfacer exigencias físicas, sino emocionales. Por tanto, podremos hablar de turismo relacional.

Significa que será necesario conjugar también en la experiencia de viaje, el online y el offline con acciones a medida que puedan hacer disfrutar de la experiencia en diversas formas.

Tiempo

Las proyecciones prevén que en junio se reanude la recuperación del turismo doméstico (reunificación familiar, breves excursiones) para después continuar con los viajes urgentes de negocio. El turismo corporativo y MICE (Meetings, Incentives, Conventions and Exhibitions) sólo se reanudará en el último trimestre del año.

Al principio escribimos que el "Tiempo" es una de las principales variables para los que trabajan en el turismo. El tiempo disponible para un viaje, la fecha de llegada y la fecha de salida, la estacionalidad, la hora. ¿Cuán importante es pasar bien tu tiempo libre?

Esta experiencia, que nos ha visto reinventar el concepto de aprovechar de nuestro tiempo, dejará marcas en el sector turístico. El tiempo personal será más importante que el tiempo "disponible".

Esto significa que el usuario querrá poder entrar en un hotel en cualquier momento y durante cuantas horas quiera, como ya ha intuido la española Byhours, sin más restricciones. No se comprará el “fin de semana”, la semana de esquí, sino la experiencia. Y en esto las plataformas digitales del futuro serán decisivas. El tiempo será tan valioso para el usuario que ya no estará dispuesto a malgastarlo en un aeropuerto o frente al ordenador, en la cola o esperando su turno. Tal vez el tiempo de decisión para la salida se cuestionará, como ya hacen Waynabox o Wowtrip que le comunican el destino sorpresa 48 horas antes de la salida o tal vez las plataformas del futuro le permitirá procesar de manera intuitiva y simple, pero profesional, el viaje perfecto para usted, que se puede compartir como una lista de reproducción de Spotify y tal vez replicarlo de pago.

El nuevo operador turístico se orientará cada vez más hacia la personalización y la rapidez. Sabemos lo importante que es pasar bien tu tiempo libre. Es por eso que queremos ofrecer experiencias a medida, confeccionando,  diseñando y planificando sus viajes a medida.

Póngase en contacto conmigo para programar su viaje de incentivos, evento, o grupo para una experiencia exclusiva, pero incluso si sólo quieres tener una charla sobre el primer deseo del 70% de los españoles (encuesta realizada por jetcost.es), el viaje.