Proceso de Coaching Ejecutivo (PCE)
El coaching es una metodología de optimización de competencias personales, basada en conversaciones curiosas que tienen tendencia a llevar al participante al cuestionamiento de sus paradigmas y reflexione acerca de la forma en la que ha diseñado su realidad.
El Proceso de Coaching Ejecutivo (PCE) es una conversación one on one, entre el especialista del coaching con el participante que busca alcanzar algún objetivo y lograr resultados que hasta ese momento no ha podido lograr.
El profesional entiende que el participante ha iniciado este proceso después de haber intentado muchas veces y formas por si mismo, sin haber conseguido los resultados deseados.
El PCE está compuesto de 6 a 8 sesiones de 1 hora de duración cada una, salvo la sesión de inicio que dura un poco más en vista de la presentación y descripción de la metodología. Por contraparte, la sesión de cierre durará unos 40 minutos, ya que se trata sólo de exponer el aprendizaje macro y el plan de acción que el participante llevará a cabo por si mismo. Las sesiones serán tentativamente cada 15 días, entre los cuales el participante deberá trabajar en su día a día, las conclusiones que ha sacado de cada sesión.
El proceso es estrictamente confidencial entre ambos, dentro de un espacio seguro y privado y el participante decidirá hasta donde profundiza, lo que comparte y lo que no y que tanto se compromete con el proceso.
La finalidad del PCE es desarrollar las capacidad de liderazgo del participante, colocándolo como observador de si mismo, para que evalúe su propio desempeño, y en base a ello diseñe un objetivo preciso y elabore un plan de acción para alcanzarlo, ya sea dentro del mismo proceso, pero más probable luego de haberlo finalizado.
La ruta para alcanzar dicho objetivo, pasa por trabajar el liderazgo, la inteligencia emocional, la comunicación, la responsabilidad y la confianza en si mismo. En base a ello, se van identificando emociones que sirven como factores desencadenantes del comportamiento, modificando patrones mentales y se empieza a ver las cosas desde otra perspectiva.
La labor del profesional es disociarse de su propia forma de ser, para entrar en el mundo del participante para ver como son las cosas ahí, es como visitar otro país, ver sus costumbres y respetarlas. El profesional no juzga el mundo del participante, sólo aprende de él.
Es lo que se conoce como apagar la radio. Dejar de estar en nosotros y estar para el participante. Dejar los juicios, opiniones, pensamientos que no tengan que ver con el proceso, y estar presente para conectar de forma sincera con el participante.
Es importante resaltar que en el PCE, el profesional no da indicaciones al participante sobre qué es lo que tiene que hacer, no da consejos, no le exige resultados. Cualquier proceso de tenga algo de esto, no será coaching como metodología de desempeño.
Durante el PCE, el participante debe ser sincero consigo mismo, definir quien está siendo hoy, para en base a ello dar cuenta de sus recursos, valores, misión, roles, sistemas, metas y áreas de mejora, para diseñar quien será mañana.
Para lograr el objetivo propuesto, el participante decidirá qué hacer, como hacerlo y cuándo hacerlo. Deberá ser responsable consigo mismo para realizar el trabajo de reflexión e introspección que lo llevará a visualizar puntos ciegos que necesita corregir para obtener los resultados deseados. Y en este punto deberá tomar acción.
La potencia de estos procesos radica en el efecto espejo. Tomar consciencia por si mismo de la forma de ser y de estar, es mucho más poderoso que si alguien nos quiere hacer tomar consciencia, ya que en este segundo lugar sería una imposición y se puede generar resistencia y negación.
¿En qué se basa la metodología?
El PCE está compuesto por fundamentos y experiencia de las mejores prácticas de la filosofía, la psicología, el management, además del mentoring y la PNL. Es decir, recoge lo más efectivo de cada una de estas disciplinas y las une dándole forma a la metodología del coaching, que ya es reconocida a nivel mundial con alto potencial de crecimiento, debido a su poder de cambio y transformación de la humanidad del Ser.
¿Qué se necesita para ser Coach?
En Europa, una persona debe pasar por una formación teórico-práctico correspondiente a 60 ECTS (European Credit Transfer System) y cada ECTS equivale a 30 horas lectivas, entre docencia, trabajo personal y proyecto final. Todo ello se realiza aproximadamente en un año y medio, si es que se le otorga prioridad, ya que de lo contrario podría durar más.
Es decir, para certificarse como "Coach Ejecutivo" se debe pasar una formación teórico práctica de 1,800 horas, dentro de las cuales es necesario haber realizado 10 procesos de coaching de 6 a 8 sesiones de 1 hora cada una. Dentro de estos 10 procesos, 3 deben ser con clientes reales a cambio de una contraprestación económica y con constante supervisión de los mentores certificados para tal efecto.
Finalmente para lograr la certificación se debe haber demostrado el dominio de las 11 competencias de la International Coaching Federation.
Se debe tener en cuenta que a nivel europeo, las certificaciones son brindadas por Escuelas de Negocios (entiéndase Escuela de Postgrado) a través de maestrías aprobadas por el gobierno.
El coaching no es ….
Las redes sociales han popularizado el término. Encontramos entonces, coaching laboral, coaching de negocios, coaching de finanzas, coaching deportivo, coaching para conseguir pareja, coaching para bailar, coaching de ventas, etc.
Esto no es coaching como metodología del desempeño humano del Ser, sino es más un mentoring, un “te enseño lo que me sirvió”. Y considero que está muy bien que haya gente que quiera ayudar a otros a realizar el camino que ellos hicieron, pero esto no es coaching como metodología del desempeño humano del Ser. El PCE, reitero, no enseña, sino ayuda a revelar la sabiduría interior del participante.
Esta confusión también, o sobretodo, ha llevado a vincular el coaching con el “guruísmo” del sí se puede. No quiero explicarme mal, me encanta la corriente del positivismo, pero esto es oratoria, persuasión u otro análogo, pero no es coaching. No es responsable ni ético decirle a alguien "tu puedes lograr todo lo que te propongas" sin fundamentos sostenidos en base a la ausencia de conocimiento de las luces y las sombras de dicha persona en particular. No todos pueden lograr algo, ni alguien puede lograr todo.
Es la propia persona la que en base a un proceso de autoconocimiento, determinará en que medida pueda lograr aquello que desea y cuáles serán las consecuencias generadas por el esfuerzo que invertirá, cuál es el coste de oportunidad, qué podría perder para ganar lo que busca y cómo podría influir en sus sistemas. Es una cuestión de equilibrio, hay que sacar una ficha de un lado para ponerla en otro.
En conclusión, ¿Qué es el Proceso de Coaching Ejecutivo?
Es una metodología de optimización de las competencias personales, que en forma de conversación curiosa acompañada de dinámicas disruptivas, provocan un proceso de reflexión en el participante que evidenciará paradigmas y creencias que deberá transformar.
En base a ello, el participante cambiará la interpretación de su realidad existencial y diseñará un plan de acción a seguir para conseguir los resultados deseados.
Es un proceso de transformación de la humanidad del Ser, hacia nuevos niveles de desempeño y excelencia, hacia mejores resultados, que se acompañarán de una sensación de plenitud, sentido y equilibrio.
Master Trainer I Analista Conductual DISC I Especialista en Assessment Center
4 añosDaniel Castro Adrianzen me encantó tu artículo.