¿ QUÉ ES EL ARTE DE HABLAR EN PÚBLICO?
¿QUÉ ES EL ARTE DE HABLAR EN PÚBLICO?
Existe la creencia de que el ARTE DE HABLAR EN PÚBLICO es una de las habilidades más difíciles de dominar y que sólo los “tocados por los dioses” logran hacerlo.
Esta falsa suposición hace que la gente acepte que no puede lograrlo, que los nervios y la inseguridad cada día aumenten y se adueñen de nosotros poco a poco, a veces, sin que nos demos cuenta y tomemos medidas para solucionarlo.
Cuántas veces nos hemos encontrado con personas que son excelentes conversadores, eruditos o expertos en algún tema y una vez que se enfrentan a un auditorio o incluso a una sola persona difícil, enmudecen, tartamudean, confunden las ideas y exponen su tema tan torpemente que parecen estar sufriendo y no disfrutando el comunicarse con los demás.
Este cambio brusco en nuestra actitud se origina cuando somos el foco de atención y estamos en exposición, exhibición y nos sentimos criticados y evaluados
Muchas veces tenemos terror al ridículo, a la crítica y a lo que consideramos “estar a la altura de las circunstancias”.
Las tres cuartas partes de nuestra conciencia se encuentran ocupadas en evitar ese ridículo y obviamente nuestra atención está muy lejos del tema y objetivo de la charla.
¿Me veo bien? ¿Con quién me comparan? ¿Me están temblando la voz y las manos?
¿Por qué no fluye igual que ayer cuando ensayé frente a mi familia o el espejo?
Son muchos los ingredientes que componen la fórmula perfecta, pero el primer paso consiste en perder ese miedo. ¿Cómo? Apartando de la mente este temor y convirtiendo el riesgo a fracasar en oportunidad de triunfar. Hay que prepararnos y aprender técnicas para dominar el temor y saber condicionar nuestra mente de forma positiva.
Además, hay que aprender a dominar las Cuatro Vías de Comunicación.
- LA VOZ
- EL CUERPO
- LAS PALABRAS
- LAS EMOCIONES
Algunos elementos indispensables son:
OBJETIVO
Hay que tener bien claro el motivo por el cual vamos a exponer nuestras ideas. No perder de vista lo que queremos conseguir del público o receptor. Definir si queremos divertir, motivar, regañar, preocupar, entristecer, etc., y no salirnos del tema una y otra vez.
ESTRUCTURACIÓN
Al planear nuestro mensaje debe haber un equilibrio en los puntos que queremos desarrollar y lo que queremos integrar a esa plática. Ejemplos, historias, chistes, apoyos, etc., para que el tema sea atractivo.
La estructuración perfecta se logra siguiendo pasos específicos y lógicos que nos lleven a un cierre que logre dejar un buen sabor de boca y que el público compre nuestra idea o propuesta.
PERCEPCIÓN
Todo público o persona es diferente. Por lo tanto, debemos desarrollar la capacidad de percibir muchas cosas, tales como la receptividad, el estado de ánimo, el ambiente, el nivel de conocimiento del tema, etc. Encontrar y definir, con base en un análisis, el camino para lograr nuestro objetivo.
ROMPER EL HIELO
Este término describe la barrera que siempre de inicio existe al dirigirnos a un grupo o una persona. Esta barrera se debe romper durante los primeros segundos. Si no se elimina, lo más probable es que el mensaje no se asimile al persistir ese ambiente frio y tenso. Hay varias maneras de romper el hielo según el tipo de público o receptor que tenemos.
TIEMPO Y RITMO
Todos conocemos a alguien que tiene la “maravillosa cualidad” de dormir al público. La velocidad, las pausas, el volumen y el dinamismo de plática son elementos que podemos aprender a aplicar de forma efectiva hasta imaginarnos que nuestro mensaje es como un partido de ping-pong. Debemos eliminar también las odiosas muletillas echan a perder cualquier mensaje.
TONO Y MATIZ
Para darle credibilidad y autenticidad a nuestras palabras, el tono y matiz que utilicemos debe ser acorde con el objetivo y las palabras que usamos. Depende del tono y matiz cómo se siente e interpreta una palabra o mensaje. Al no utilizar una voz congruente con lo que deseamos reflejar, nuestras palabras pueden ser interpretadas de manera opuesta a lo que queremos transmitir
DICCIÓN Y ARTICULACIÓN
De la claridad con la que pronunciamos depende la claridad de nuestra comunicación. La naturaleza nos equipó de manera maravillosa y no sabemos utilizar este equipo. Hay que gente que habla entre dientes y no abre la boca, se le enreda la lengua o atropella las palabras. Otro problema es cambiar o saltarnos palabras, lo que hace que un mensaje sea incomprensible y difícil de seguir.
IMPOSTACIÓN DE LA VOZ
Una buena voz, poderosa y clara, debe cubrir un espacio enorme. Desafortunadamente, el abuso del micrófono ha castrado esta capacidad que tenemos desde bebés. Por eso un bebé cuando llora se oye a gran distancia. Una vez que aprendamos a impostar la voz y darle gran potencia, este será el patrimonio más preciado y herramienta formidable en cualquier situación
IMPROVISACIÓN
Sin esta habilidad, no lograremos ser grandes conversadores y narradores que mantengan el interés del público. Aun cuando a veces se cometa el error de memorizar o leer un discurso, siempre necesitaremos saber improvisar. La frescura y naturalidad que se refleja al improvisar no lo logra ningún otro método. La agilidad mental y el aplomo son necesarios, ya que tratar de hacerlo sin estos elementos nos puede ocasionar problemas.
LENGUAJE CORPORAL
De nada serviría tener buena voz, si nuestro cuerpo desmiente lo que decimos. Debemos aprender a coordinar nuestro lenguaje corporal con el mensaje. Las expresiones faciales y corporales deben reafirmar y acompañar congruentemente a nuestras palabras.
Una vez que coordinemos voz, palabras y cuerpo lograremos esa armonía y contundencia que proyecta un buen comunicador
EMOTIVIDAD Y ENERGÍA
Tan importante como una buena técnica y forma al hablar, lo que logra dejar huella y conectar con el público es el fondo. Ese fondo son las emociones, los estados de ánimo y la vibra que proyectamos. Hay personas que hablan de manera fría, solemne y robotizada. No conectan ni nos conectan con las emociones y sentimientos que debe de despertar un mensaje. Es terrible escuchar a alguien que parece un robot insensible y solamente técnico.
El toque humano y emotivo es lo que nos cimbra y enlaza con otra persona.
EL SENTIDO DEL HUMOR Y EL INGENIO
Son innumerables las ventajas que el ingenio y el sentido del humor nos brindan en la vida y sobre todo en la comunicación. Hay diferentes formas de humor. Depende del tema, del público, de nuestra personalidad, pero todos coincidimos que alguien que logra sacarnos una sonrisa ya dio el primer paso para cautivarnos.
Estas herramientas son solamente “una probadita” de todo lo que vas a descubrir y aprender en el CURSO LA PALABRA. Hay temas adicionales que te serán de gran utilidad, tales como el saber manejar grupos, controlar y enfrentar a personas y situaciones difíciles…. Y mucho más.
Imagínate y saborea todo lo que vas a lograr a nivel personal y profesional con todas estas herramientas que te van a convertir en una persona con una comunicación efectiva, poderosa y contundente.
Desde 1989, Curso LA PALABRA
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