¿Qué es el “Body Scan”?
Hacernos conscientes de nuestro cuerpo y las sensaciones corporales es una parte importante de la práctica del mindfulness. Podemos hacernos conscientes de nuestro cuerpo y sus sensaciones de muchas maneras. Algunas de ellas son la práctica del body scan, la relajación progresiva de los músculos y el mindful yoga. El Body Scan es el proceso por el cual nuestra atención es traída sistemáticamente a las diferentes partes de nuestro cuerpo para aumentar nuestra conciencia sobre las sensaciones corporales del momento.
La tarea es simplemente anclar tu atención a las diferentes partes del cuerpo y notar las sensaciones, con actitud de aceptación y sin juzgar. Como en todos los ejercicios que se practican en el mindfulness, cuando la mente se distrae nos re-enfocamos nuevamente en el cuerpo. En este proceso descubrirás sensaciones agradables y desagradables, también puede que no notes nada, y eso está bien. La práctica más común requiere tumbarse en el suelo y tomar conciencia primeramente de el peso de tu cuerpo sobre el suelo y de su posición en el espacio. Puedes también tomar conciencia de tu respiración. Luego, comienzas sistemáticamente a dirigir tu atención a las diferentes partes del cuerpo. Comenzar por los de dedos de los pies y culminar con el rostro, es una práctica común. El tiempo que dedicas a las diferentes partes depende del tiempo que deseas realizar el ejercicio. El body scan se realiza comúnmente de 15 a 45 minutos. Dependiendo del tiempo, puedes ser más especifíco en las diferentes partes en las que deseas poner tu atención. Utilizar meditaciones guiadas puedes ser de mucha ayuda para establecer la práctica. Mientras haces inventario de tu cuerpo, nota las sensaciones, los pensamientos y emociones que surgen, y siempre conecta con tu respiración.
En mis primeros intentos por incorporar esta practica experimenté estrés, dificultad para concentrarme, incluso tedio. Recuerdo, que el facilitador del curso nos recordaba que la intención del ejercicio no era relajarse o sentirse bien, que incluso podía generarnos mayor estrés. Esto es parte importante de la práctica del mindfulness, estar conscientes no implica siempre relajarnos o reducir nuestra ansiedad. Sin embargo, con el tiempo el body scan se ha vuelto un lugar seguro para mi. Un lugar donde regresar y conectar conmigo y con mi cuerpo. He aprendido a notar cuando los músculos de mi frente o quijada están tensos, he notado partes de mi cuerpo en las que experimento incomodidad, a veces dolor, y he aprendido a notar las sensaciones de mi cuerpo durante otras actividades como caminar o bailar. El body scan entrena nuestra mente para que podamos pasar de la atención detallada a la conciencia más amplia, pero sobre todo, nos ayuda disminuir la tendencia a querer que las cosas sean distintas a lo que son y dejarlas estar.