¿Qué es OKR y para qué sirve?

¿Qué es OKR y para qué sirve?

Resumen

En nuestro artículo "¿Qué es OKR y para qué sirve?" exploramos cómo enfrentar los desafíos comunes de las organizaciones, como la falta de claridad en los objetivos, la desconexión entre equipos y la resistencia al cambio. Descubrimos cómo los pilares del enfoque OKR - Foco, Palancas, Tablero y Cadencia - se unen para ofrecer una solución integral.

Con OKR, definimos metas significativas e involucramos a nuestros equipos en la definición de objetivos (Foco), establecemos un enfoque y ruta de de ejecución claros (Palancas), fomentamos la transparencia y la colaboración (Tablero) y mantenemos una agilidad adaptativa (Cadencia).

Este enfoque nos capacita para superar desafíos y lograr una gestión estratégica efectiva, transformando obstáculos en oportunidades para nuestro crecimiento y éxito continuo.


Problemáticas organizacionales del día a día

Las dificultades de las organizaciones para ejecutar sus planes estratégicos son conocidas. Algunas de las cifras sobre la estrategia y su ejecución hablan de ello:

  • Según Harvard Business Review el 48% de los líderes dedica menos de un día a la estrategia cada mes y el 95% de los empleados no comprende la estrategia de su empresa.
  • De acuerdo a The Economist, el 88% de los C-Level dice que ejecutar iniciativas estratégicas con éxito es “esencial” o “muy importante” para la competitividad y el 61% de ellos reconoce que sus empresas luchan por cerrar la brecha entre la formulación de estrategias y su implementación diaria.

Las organizaciones enfrentan desafíos significativos al ejecutar sus planes estratégicos. La falta de comprensión de la estrategia y la brecha entre la formulación y la implementación son problemas comunes.

¿Quisieras reunirte y conocer nuestra experiencia apoyando implementaciones de OKR?

Pero más allá de las cifras, pongámonos en los zapatos de nuestro día a día: ¿qué tan familiares les resultan las siguientes situaciones?:

  • ¿Los objetivos de negocios son poco claros, numerosos, insulsos o no inspiran a hacer un esfuerzo por desafíos que valgan la pena?
  • ¿No siempre conocemos los objetivos del negocio y, cuando lo hacemos, no sabemos cuál podría ser nuestra contribución?
  • ¿Pasamos la mayoría del tiempo inmersos en las tareas diarias y sólo nos enfocamos en lo estratégico cuando es necesario rendir cuentas?
  • ¿Sentimos que no participamos en la definición de objetivos y nos limitamos a ejecutar metas impuestas jerárquicamente?
  • ¿Cada equipo sigue su propio camino, con agendas y prioridades que no se alinean con el resto de la organización?
  • ¿Ante los cambios, nos sentimos atrapados por la inercia del negocio y tenemos dificultad en ajustar con agilidad y proactividad?
  • ¿Estamos sumidos en una cultura que reconoce más la cantidad de trabajo que se hace, en vez de los logros que se alcanzan?
  • ¿Recibimos retroalimentación solo cuando las cosas salen mal?
  • ¿Nos hemos acostumbrado a que sólo una fracción de las iniciativas estratégicas se implemente año tras año?

Las problemáticas organizacionales del día a día se reflejan en la falta de claridad y en la falta de conexión entre los objetivos de negocio y las contribuciones individuales. Las organizaciones se sumergen en las tareas diarias, perdiendo de vista la importancia de alinear sus acciones con las metas estratégicas. La falta de participación en la definición de objetivos, junto con la falta de alineación entre equipos y la resistencia al cambio, crea una inercia empresarial que dificulta la adaptación ágil. Además, una cultura que valora la cantidad de trabajo sobre los logros alcanzados, junto con la falta de retroalimentación efectiva y la implementación limitada de iniciativas estratégicas, contribuye a la falta de eficacia y dirección en las organizaciones.

Lo fundamental en OKR

Los desafíos anteriores subrayan la necesidad de adoptar enfoques como OKR para superar estas barreras y lograr una gestión estratégica efectiva. Pero ¿qué es OKR?

OKR (proviene de Objectives and key Results) es una metodología de alineamiento organizacional en torno a iniciativas de cambio para el logro de objetivos desafiantes.

Como buena metodología, OKR descansa sobre 4 pilares, que son creencias o fundamentos basales que deben cumplirse para que esta fórmula aporte el valor esperado:

  1. Foco: Pocos objetivos pero de alto impacto en lo estratégico.
  2. Palancas (o key results): La fuerza de Palanca debidamente aplicada permite mover los objetos más pesados (objetivos desafiantes).
  3. Tablero: El feedback, las conversaciones y las decisiones descansan sobre un Tablero (o cuadro de mando) de información que es visible y compartido por todos.
  4. Cadencia: una ejecución de excelencia se basa en tareas frecuentes y de baja complejidad, pero que realizadas con hábitos y disciplina permiten alcanzar metas difíciles.

Los cuatro pilares fundamentales de OKR, se entrelazan para proporcionar a las organizaciones una metodología estratégica poderosa y efectiva. Al establecer objetivos claros y significativos (Foco), desglosarlos en resultados clave específicos y medibles (Palancas), compartir el progreso y la información de manera transparente a través de un Tablero compartido y visible para todos, y mantener una cadencia regular de revisión y ajuste, las organizaciones pueden alinear sus equipos y recursos hacia metas estratégicas comunes.

Este enfoque cohesivo promueve la claridad, la responsabilidad y la agilidad. Permite que las organizaciones se adapten rápidamente a los cambios del entorno empresarial, aprovechen las oportunidades emergentes y se mantengan enfocadas en lo que realmente importa, llevándolas a un nivel superior de efectividad estratégica y logro de objetivos.

¿Conversemos sobre cómo apoyar a tu oprganización adoptando esta exitosa metodología?

Entonces ¿para qué sirve OKR?

Desde el punto de vista de estos pilares de los OKR ¿cómo esta metodología ayuda a enfrentar y resolver los problemas que mencionábamos en las preguntas anteriores sobre las problemáticas del día a día y la ejecución estratégica?

Foco:

El pilar del Foco en OKR resuelve el problema de la confusión y la falta de claridad en torno a los objetivos. Al definir metas significativas, involucramos activamente a nuestros equipos en la definición de objetivos. Esto elimina la incertidumbre y alinea a todos hacia un propósito común. Al enfocarnos en metas que realmente importan, cada miembro del equipo comprende su contribución vital para lograr estos objetivos, lo que crea un sentido de propósito y dirección claros.

Palancas (o key results):

El pilar de Palancas en OKR aborda el problema de la falta de enfoque y ejecución clara. Al establecer un enfoque y una ruta de ejecución clara y medible a través de Key Results específicos, proporcionamos a los equipos una guía precisa para alcanzar sus metas. Estos resultados clave actúan como hitos tangibles, permitiendo a los equipos medir su progreso de manera objetiva. Esto no solo clarifica las expectativas, sino que también da lugar a un sentido de logro tangible a medida que se alcanzan estos hitos, motivando a los equipos hacia un rendimiento excepcional.

Tablero:

El pilar del Tablero en OKR soluciona el problema de la falta de transparencia y colaboración. Al fomentar la transparencia a través de un cuadro de mando compartido, todos tienen acceso a la misma información relevante en tiempo real. Esto crea un ambiente de confianza y colaboración, donde las discusiones y las decisiones se basan en datos concretos. Al tener una visión clara del progreso de los objetivos, los equipos pueden colaborar de manera más efectiva, identificar desafíos temprano y celebrar los éxitos juntos, lo que fortalece el sentido de comunidad y logro compartido.

Cadencia:

El pilar de Cadencia en OKR aborda el problema de la falta de agilidad y adaptabilidad. Mantenemos una agilidad adaptativa al revisar y ajustar nuestras estrategias y tácticas de manera regular. Esto se logra a través de reuniones y revisiones periódicas donde evaluamos el progreso, identificamos desviaciones y realizamos ajustes según sea necesario. Al mantenernos ágiles, podemos responder proactivamente a los cambios del mercado y las necesidades del cliente. Esta capacidad de adaptación constante nos permite estar un paso adelante, preparados para enfrentar cualquier desafío y capitalizar nuevas oportunidades de manera efectiva y eficiente.

En conclusión, adoptar la metodología OKR no solo es una respuesta efectiva a los desafíos organizacionales, sino también un camino hacia la transformación. Al abrazar el Foco, las Palancas, el Tablero y la Cadencia, las organizaciones pueden encontrar claridad, participación, colaboración, transparencia y agilidad. En última instancia, OKR no solo es una herramienta, sino un cambio de mentalidad que nos empodera para convertir nuestros objetivos desafiantes en realidades tangibles, guiándonos hacia un futuro empresarial más eficaz y exitoso.

Inicia sesión para ver o añadir un comentario.

Más artículos de Mauricio Castro Figueroa

Otros usuarios han visto

Ver temas