¿Qué es un objetivo a largo plazo y cómo alcanzarlo?

Ya sea que estés tratando de convertirte en emprendedor, escalar tu carrera hasta una gerencia o ganar un cupo para las olimpiadas de 2028, los objetivos a largo plazo demandan toda tu energía. Para cumplir un objetivo a largo plazo, necesitarás trabajar duro, planificar con anticipación y mantener tu vista en la meta.

Cuando hablamos de un objetivo a largo plazo, estamos hablando de los grandes objetivos, los objetivos de vida. Esos sueños personales o profesionales por los cuales tomamos o tomaremos importantes decisiones en la vida. Y para cada quien los objetivos a largo plazo lucirán diferentes, convertirse en médico, lanzar una startup o mudarse a otro país, entre muchos otros.

Establecer objetivos a largo plazo requiere que pienses en el futuro y en cómo puedes trabajar ahora para ayudarte más adelante. Para tener éxito con estos tipos de objetivos, deberás determinar qué le da significado a tu vida.

Puede sonar como mucha presión establecer objetivos a largo plazo, pero todos pueden alcanzarlos con algo de orientación y esfuerzo.

¿Qué es un objetivo a largo plazo?

Un objetivo a largo plazo es cualquier cosa que desees lograr en el futuro. Estos objetivos requieren una planificación más detallada y un período de tiempo más largo para alcanzarlos en comparación con los objetivos a corto plazo.

Si te estás preguntando qué se considera un objetivo a largo plazo, exige pensar a lo grande. Generalmente responden a las preguntas: "¿Cómo te ves en 5 años?", "¿Por qué logros quieres ser reconocido al momento de tu jubilación?" "¿Qué deseas alcanzar de aquí a 10 años más?"... y así.

Pueden ser objetivos profesionales, personales o una combinación de ambos. Pero al igual que tus otros objetivos en la vida, los objetivos a largo plazo nos sacan de nuestra zona de confort y requieren un trabajo.

Para lograr tus objetivos a largo plazo, es una buena idea incorporar algunos objetivos a corto plazo en el proceso. Por ejemplo, digamos que tu objetivo a largo plazo es convertirte en Gerente de Finanzas, y estás en tu primer empleo como analista contable. Este no será un vuelo directo, tendrá muchas escalas, como estudios de postgrado para ampliar tu perfil duro, trabajar competencias para ser promovido en la finalidad de ganar experiencia, potenciar habilidades de liderazgo y comunicación, e incluso cambios de empleador para desafiarte aún más.

Crear pasos realistas para alcanzar tus objetivos los hace más alcanzables. De hecho, ver progreso y lograr objetivos más pequeños motiva a las personas a continuar, aumentando tanto la positividad como la productividad.

Cómo establecer objetivos a largo plazo

Establecer objetivos con propósito conducirá a una mayor probabilidad de que los logres. Por esto es altamente aconsejable tomarse un tiempo de autoexploración personal y reflexionar antes de lanzarte a la acción. Hacer este trabajo al principio ayuda a sentar las bases para un proceso positivo y exitoso.

1. Tómate tiempo para visualizar

Reserva tiempo para visualizar tus objetivos. Piensa en qué habilidades tendrás que aprender, cómo cuidarás tu bienestar y qué hitos te gustaría alcanzar.

¿Estás pensando en cuál es un objetivo a largo plazo para un negocio, o es esto más personal? Ya sea que visualices una imagen o crees una declaración de visión personal, terminarás con una idea más clara de lo que deseas lograr.

Es importantísimo visualizar cómo luce lo que queremos, cómo pensamos que nos sentiremos al alcanzarlo, de otra forma será como perseguir un conejo blanco.

2. Asegúrate de que tus objetivos sean SMART

Establecer objetivos SMART te brinda un marco de trabajo para desarrollar un plan de acción para alcanzar tus objetivos. "SMART" es un acrónimo en inglés que significa específico, medible, alcanzable, relevante y limitado en el tiempo. Aunque no es el único marco de trabajo para establecer objetivos, será un buen método darle viabilidad a lo que tienes en mente. Para profundizar en esto te aconsejo revisar mi artículo sobre Consideraciones para la buena formulación de objetivos.

3. Haz una lista de posibles desafíos

Identificar posibles obstáculos puede ser útil. Hacerlo te prepara para situaciones en las que puedas tener que adaptarte a tus objetivos, lo cual sucede. La idea aquí no es enfatizar todas las formas en que las cosas pueden salir mal, sino estar preparado para necesitar cambiar de rumbo debido a nuevas circunstancias.

4. Comparte tus objetivos a largo plazo con otros

Compartir no se trata de presumir ni de exagerar, sino de hacerte responsable. Al decir en voz alta tus objetivos a las personas en las que confías, puedes inspirarte a tomar acción. Es una forma de pasar de pensar a hacer.

Además, compartir tus objetivos con una red profesional puede ayudar si necesitas consejos sobre tu industria. Los amigos y la familia podrán hacer un seguimiento y brindar palabras de aliento y apoyo.

Comparte tus objetivos a largo plazo con otros

Dado que tus objetivos pueden ser sobre cualquier aspecto de tu vida, tómate el tiempo para considerar en qué categoría caen. Estrechar tu enfoque te ayudará a mantenerte organizado. Es posible que te encuentres con varios objetivos a largo plazo a la vez, por lo que comprender dónde encaja cada uno, en nuestras vidas, es importante.

Repasemos tres tipos de objetivos que podemos tener:

1. Objetivos personales. Como puedes imaginar, estos tipos de objetivos son para cosas que te gustaría lograr en tu vida personal. Los objetivos personales a largo plazo pueden involucrar tus pasatiempos, intereses o relaciones. Un ejemplo de un objetivo personal podría ser correr un maratón o viajar a un lugar nuevo. También podrías establecer objetivos de desarrollo personal, de salud o de bienestar, o sociales.
2. Objetivos profesionales. Un objetivo profesional a largo plazo es diferente para cada persona, dependiendo de tu plan de carrera. Por lo general, estos objetivos apuntan a avanzar profesionalmente y aprender nuevas habilidades. Un objetivo profesional podría ser comenzar tu propio negocio o ascender a un puesto de dirección en tu lugar de trabajo actual.
3. Objetivos financieros. Los objetivos financieros a largo plazo se tratan de dinero. Estos objetivos pueden incluir objetivos a corto plazo y necesitan tener un plan sólido. Pueden ser metas para lo que te gustaría hacer con tus ahorros, lo que te gustaría ganar o cómo te gustaría ahorrar para poder hacer una inversión significativa.

¿Por qué son importantes los objetivos a largo plazo?

El establecimiento de objetivos es importante para todas las áreas de tu vida. Pero algo sobre los objetivos a largo plazo se destaca. Tus objetivos a largo plazo se centran en prepararte para tener éxito en el futuro. Ahí es donde entran en juego tus planes a cinco años y otros objetivos extensos.

Los seres humanos no somos estáticos y debemos seguir creciendo. Depende de ti decidir dónde y en qué marco de tiempo.

Y establecer estos objetivos a largo plazo te ayuda a entenderte. ¿Quieres ascender en la escalera corporativa, o quieres encontrar un trabajo que permita tus instintos trotamundos?

Si no estás en contacto contigo mismo, establecer objetivos claros podría ser más difícil. Comprender lo que esperamos lograr en la vida podría parecer imposible si carecemos de autoconciencia.

Incluso se ha demostrado que la autoexploración es una parte esencial del establecimiento de objetivos a largo plazo, y nos enseña mucho en el camino. Es crucial para adaptarse a circunstancias cambiantes y nos enseña a enfrentar contratiempos o fracasos.

En el camino hacia el autodescubrimiento, debes decidir tanto dónde vas como cómo planeas llegar a tu destino.

¿Estás en este momento en el lugar que tienes que estar para llegar a donde quieres estar mañana?

¿Qué es la zona de incertidumbre?

La zona incertidumbre se refiere al período de transición cuando te estás acercando al final de tu viaje, pero aún no lo has alcanzado. Durante este momento, es posible que comiences a sentirte perdido, desequilibrado y lleno de dudas. La meta podría estar a la vista, pero aún así podrías sentirte como si estuvieras en un punto muerto.

Pero aquí hay algo que debes saber: esta experiencia es normal. Le sucede a todos, incluso a aquellos que crees que manejan el cambio excepcionalmente bien. Todo cambio es intimidante. Puede hacerte cuestionar qué pasará a continuación y si todo lo que has hecho ha valido la pena.

También puedes sentirte nervioso o asustado por lo que traerá este cambio. Es como si hubieras estado planeando un viaje en solitario durante meses, y ahora, es la noche antes de tu vuelo.

Este período de transición puede desviarte de tus objetivos a largo plazo, así que es importante concentrarse en cómo puedes combatirlo y seguir avanzando.

Cómo luchar contra la zona de incertidumbre para alcanzar objetivos a largo plazo

Es normal y aceptable sentir una mezcla de emociones a medida que te acercas al final de nuestro viaje de establecimiento de objetivos a largo plazo. Pero no quieres dejar que tu zona de incertidumbre te consuma. Prueba estas cuatro formas en las que puedes superarla:

1. Enfócate en aprender: Acepta oportunidades para aprender nuevas habilidades y absorber nuevos consejos e información.
2. Muestra tu creatividad: No hay una sola manera de alcanzar tus objetivos o celebrar hitos. Actúa de manera expresiva y creativa según lo que sea mejor para tu crecimiento personal.
3. Usa tu sistema de apoyo: Ya sean mentores, compañeros de trabajo, amigos o familiares, es importante apoyarte en personas de confianza. Habla sobre tus emociones y cómo te sientes mientras navegas por este período, y escucha lo que tienen que decirte a cambio.
4. Estar dispuesto a correr riesgos: Podrías recibir una nueva oportunidad o sentirte inspirado para probar algo nuevo. Tomar riesgos puede sacarte de tu zona de confort y experimentar algo esclarecedor.

Recuerda: la persistencia es la clave

Hablar sobre un objetivo a largo plazo lleva tiempo por una razón. Estos logros no sucederán dentro de esta semana, ni un mes. Tus objetivos a largo plazo prosperarán cuando puedas aprender a retrasar tu gratificación en lugar de sucumbir al placer instantáneo.

Los objetivos a largo plazo exigen planificación, motivación y resistencia. Sobre todo, requieren persistencia.

Pero la persistencia es crucial durante todo el proceso, especialmente en la temida zona de incertidumbre. Te mantiene en movimiento, enfocado y motivado. Y abrazar la persistencia te ayuda a evitar ser presa del síndrome del impostor y ayuda a silenciar tu pensamiento rumiante. Es lo que te guía para disfrutar de todo lo que te traerá lograr tus objetivos.

La próxima vez que sientas una pizca de duda mientras trabajas para alcanzar tus objetivos a largo plazo, recuerda que una dosis saludable de persistencia te mantendrá en el camino correcto.

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Nicoll Zúñiga Varela | Career Coach & Headhunter

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